Corazones Medio Rotos. (jenlisa)

Capítulo 2.

JENNIE KIM.

—Cuando la vi delante de mi la respiración se me cortó, Chu —me eché a llorar casi—. Es que si pudieras ver lo cambiada que está. Es un sueño.

Esta sonrió de lado, —Bueno, un poco más flechada si quedaste.

—No es eso, es sólo que tenía tiempo sin ver a Lisa, es una reacción muy normal —me encogí de hombros—. ¿A poco tu no reaccionarías así al ver a Rosé?

—La desnudo y me la cojo —dijo sin más.

—Chu. No.

—Dijiste que Lalisa está cambiada, puede que ahora sí estén listas para una segunda oportunidad —supuso.

—¿Qué?, no, Chu, mira lo que pasó. Me mintió —recordé.

Y el tiempo podía pasar, pero me seguía molestando en el pecho; ese dolor interminable al recordar como me decía en la cara que jamás me mentiría, al recordar todas esas veces que me acarició con la verdad en sus hombros, y nunca fue capaz de decírmela; nunca fue capaz de tener un deje de valentía.

Y es que es ilógico, no le costaba nada hacerlo; pero me vio la cara de tonta, me engañó.

—Jennie, sé que lo que te hizo no tiene perdón de nadie —asentí. Prosiguió—. Pero Lisa no es mala persona.

—Y yo no he dicho que lo sea, pero lo nuestro no terminó en los mejores terminos, ahora es mi vecina y te juro que no puedo sentirme más encerrada —me llevé la mano al pelo—. Su mirada tiene algo nuevo, se ve tan hermosa así. Te juro que es como si volviese a verla por primera vez, Jisoo.

—Jendeukie, ¿sigues enamorada de Lisa?

—No —respondí, rápidamente. Aquella ladeó la cabeza hacia un lado con suspicacia—. Ya no, porque... porque ella me mint...

—Ya basta, Jennie. Sabemos que te mintió, pero pudo haber cambiado. Rosé me dijo que lo hizo, que mejoró, que es una mejor persona —declaró—. Imagínate dejarla ir otra vez, sería una idiotez. Se merecen ser feliz.

—Recién la vi, Jisoo —suspiré—. ¿Quién me asegura que no volvera a romperme el corazón?, Lisa no ha cambiado. Y si lo hizo, solo fue físicamente y ni tanto.

La que sí estaba algo cambiada era Jisoo, aquella de alguna u otra manera estaba mostrándose en una faseta diferente, junto a Rosé, parecían inseparables. Pero era obvio, al ser la novia de mi mejor amiga, no podía dejarla a un lado, y de vez en cuando hacíamos reuniones en mi casa o en casa de alguna de ellas.

Pero pedí de por favor, que en ninguna Lalisa fuera mencionada; algo que ambas respetaron. Lo mismo pasa con Jin, aunque con él poco o nada me hablo, las veces que lo hice, le pedí que Lisa no fuese mencionada.

Sobre Mino, él sabe mi relación con ella. Que no hay nada entre nosotras y ni siquiera hace el amago de mencionar el nombre de la Tailandesa. Así que agradezco mucho eso por su parte. Siempre fue un apoyo para mí, un amigo que me llevó a donde estoy hoy en día.

—Te estás equivocando, sé que lleva tiempo, pero si podemos cambiar. Solo es cuestión de querer.

—El querer no lo es todo, Jisoo. Se puede querer pero eso no servirá de nada —solté el aire que estaba conteniendo—. Ya no hay más Lisa y Jennie. Se acabó -
—torcí los labios, desaprobando mis propias palabras—. Oye, ¿sabías que una chica nueva se mudó al lado de mi departamento y frente de el de Lisa?

—Sí, Rosé me comentó que el ruido no dejaba descansar bien a tu amada —bromeó.

—Jisoo —solté en advertencia.