Para su mala suerte, sin razón aparente, ese alfa había comenzado a molestarlo.
Le escondía los libros, no lo dejaba comer tranquilo, lo molestaba cada vez que lo veía por los pasillos, le colocaba apodos vergonzosos y cada que podía, le hacía una...
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Al día siguiente Hyuna pasó recogiéndolo como lo hacía siempre. Llegó al instituto, entró a sus clases y se sintió algo extraño el no tener la presencia del alfa cerca de él, pero no le dió importancia y siguió con sus clases.
Su nuevo compañero de mesa, el alfa llamado Yugyeom, no le había hablado en las primeras dos clases, y Jungkook agradeció eso.
Pero no tuvo tanta suerte en la tercera.
"Hola Jungkook."
"Hola."
El omega ni siquiera había volteado a verlo.
"¿No peleaste con tu alfa por mi culpa, verdad? Si me dices que si, me cambiaré de lugar, no quiero molestarte o a tu-."
"¿Mi alfa? Yo no tengo alfa."
El omega lo interrumpió, dándole una mirada por fin.
"El alfa de ayer, ¿No es tu alfa?"
"Es más como mi bully. No te preocupes por él, ya no molestará más."
Yugyeom hizo una mueca, y asintió.
No creía del todo que ese alfa solo fuera el bully de Jungkook, parecía más... Posesivo con el omega. Más no dijo nada y siguió prestando atención a la clase, al darse cuenta de que el omega no quería hablar.
Cuando las clases terminaron, Yugyeom volvió a hablarle al omega de ojos bonitos, ahora que sabía que no tenía alfa, las esperanzas volvían a él.
"Jungkook, ¿Quieres ir a por un helado conmigo mañana?"
Y Jungkook analizó. El alfa que le gustaba claramente nunca le haría caso, y no podía rechazar a todas las personas por siempre. Además, necesitaba hacer amigos.
Con un asentimiento silencioso respondió.
"Claro, solo dime la hora y el lugar."
Pero el alfa negó.
"Iré a traerte, ¿No sabes lo peligroso que es que un omega salga solo?"
Y Jungkook por primera vez en el día, sonrió. Una sonrisa débil, pero lo hizo.
Le dió su número de teléfono y la dirección donde podría pasar a recogerlo. Fijaron la hora y así, Jungkook salió con los ánimos un poco más altos.
Cuando entró al auto, saludó con una sonrisa, lo que hizo a Hyuna sonreír también.
Taehyung iba en silencio, con audífonos puestos y viendo por la ventana. El omega no le tomó importancia y también se puso los audífonos.
Al llegar a su casa, lo primero que hizo fue correr hacia la cocina, lugar predilecto de su padre alfa.
Abrazó a su padre, para luego darle un sonoro beso en su mejilla.
