Para su mala suerte, sin razón aparente, ese alfa había comenzado a molestarlo.
Le escondía los libros, no lo dejaba comer tranquilo, lo molestaba cada vez que lo veía por los pasillos, le colocaba apodos vergonzosos y cada que podía, le hacía una...
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Era viernes, las clases de los viernes eran más tranquilas. Los profesores de las primeras dos horas habían faltado, la tercer hora la recibieron con el asistente del profesor y los profesores de las últimas dos horas, tampoco llegaron. Al salir, Jungkook iba rápido, el auto de Hyuna justo se estacionó y ni siquiera tuvo que apagar el motor.
Sus padres se irían hoy por la tarde, y quería despedirse bien de ellos.
Al llegar a su casa, como había predicho, sus padres estaban colocando las maletas en el auto de su padre Jin.
Almorzaron, se despidieron y Jungkook llamó a Gigi para decirle que llegaría hoy por la tarde. Pero para la mala suerte de Jungkook, Gigi no podría recibirlo esa tarde.
El omega hizo un pequeño berrinche, no le gustaba quedarse solo de noche. Agradeció que no era época de lluvias y tormentas eléctricas, porque si fuera el caso, ni loco se quedaría solo.
Pasó toda la tarde haciendo las pocas tareas que tenía, ordenando, limpiando, cantando y bailando. Cuando llegó la hora de la cena, comió algo que su padre Jin había dejado en el microondas.
Al llegar a su habitación, mandó un mensaje a sus padres, para ver si ya habían llegado y avisarles que había comido y que todo estaba bien. Sus padres le recordaron el haber cerrado todas las puertas y ventanas, y luego de confirmarlo, le dieron las buenas noches con un audio.
Justo a las 9:00 de la noche, un aroma que conocía casi tan bien como el suyo comenzó a llenar su habitación. Se levantó de su cama para ver si había cerrado bien las ventanas, y cuando abrió levemente las cortinas para ver, su vista inevitablemente fue hacia la ventana que quedaba justo al frente de la suya. La ventana de Taehyung.
El alfa había bajado sus cortinas, eso solo quería decir una cosa. Su celo había llegado.
En toda la noche no durmió. El aroma del alfa no le había dejado dormir, además de que tenía a su omega inquieto, pidiendo ir hacia el alfa. Fue una noche terrible para Jungkook.
Iba de camino hacia la casa de su amigo. No quedaba lejos, si pasaba entre los callejones y no por la carretera principal.
Al llegar, tocó la puerta y le abrió un omega que reconoció como la pareja de su amigo.
"Hola Jungkookie, cuánto tiempo. Pasa, Yoongi se está bañando."
"Hola Hobi. Te ves bien."
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