mi elección

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pov poche

But I love you so...

Estaba destruida, no se cuantos días han pasado desde la maldita noche en la que se fue, solo se que he llorado como nunca. Pero daba igual, yo lo había decidido, aún así dolia.

flashback

"James White, director de estudios forset", era lo que decía la bonita placa dorada que decoraba la puerta. Abrí soltando un suspiro, era yo, podía tomarme esas libertades.

¡Pero si es mi maravillosa chica!-

James — sonreí

- Cariño, tenemos problemas-. Odiaba cuando me llamaba de esa forma, - forset esta cayendo, eres lo unico que nos mantiene con vida, necesitamos explotarte - asentí - Querida, lamento decir que estas estancada

¿estancada?

sí, veras, hemos pensado en que hacer y se nos ocurrio la idea perfecta

te escucho — James sonrió, pero su mirada había cambiado, ya no me veía con dulzura

la idea de una mujer casada es agotadora. Tienes dos opciones, corazón —. Sabía por dónde iba y no quería escuchar.

— Estas loco

— Amor, eres importante. Eres una estrella de Hollywood. Pero las estrellas no son para siempre. Tú, cariño, no puedes irte. Tienes un contrato que te tiene atada. Pobre y pequeña majito. Tan desesperada por firmar con alguien, por demostrar que tenía talento, que terminaste por firmar lo primero que te pusieron en frente, ¡sin siquiera leer capsulas!, eso cariño es de tontos. Sabes cómo soy, me importa el dinero sobre todas las cosas, y no me avergüenza decirlo. Cuando me lo estabas dando, tú eras quien mandabas aquí, lo sabes. Pero justo ahora no me estás dando lo suficiente. Y es una pena pero logras que ella se vaya, o logro que desaparezca

—¡JAMES, MALDITA SEA!

tranquilizate

¡ES MI ESPOSA, ES EL AMOR DE MI VIDA!

Amor, sabes quién soy yo. Aprecio a Danielita, pero necesitas dar de que hablar y teniendo una aburrida vida en los suburbios con el amor de tu vida, pretendiendo ser una persona normal, cuando podrías salir al mundo y arrancarle lo que quieres, estando con ella no estás sacando todo tú potencial cariño.

— No me importa mi potencial, me importa amarla —. Sentía un nudo en la garganta

pensé que sabias como funcionaba esto cariño. Tienes que elegir, y tu carrera es por lo que has estado luchando toda tu vida, corazón.

La prefiero a ella—, me miro confundido — prefiero tenerla ella que seguir en forset, hay estudios que darían lo que sea por tenerme

y cada uno de esos estudios estan comiendo de la palma de mi mano, una llamada y ninguno querra tenerte en sus peliculas, una llamda y todas las revistas estaran llenas de rumores sobre ti, una llamada bastaría para que le dijeras adiós a tu carrera. No tenemos el mismo poder que antes, pero no estamos jodidos. Seguimos siendo los mejores. Tenemos nuevas estrellas, pero tú, tú te estás quedando en el pasado. Te sientes vieja, quiero lo mejor para ti cariño, entiéndelo. Antes eras la luz que iluminaba el camino de Forset, ahora eres una de las del montón, estás desperdiciando tu talento

— La prefiero a ella. Prefiero tenerla que este estupido trabajo

bueno, si así lo decides podrían vivir algún tiempo bien, felices. Tres meses me parece justo, después... mmh, ¿qué te parece un accidente automovilistico?— lo mire con horror, lagrimas caían por mis mejillas, no pude retenerlas más — tranquila cariño, ya te lo dije, tú vivirás en esta mierda para siempre, pero puedes salvarla a ella. Ya sabes que hacer.

fin del flashback

hubiera preferido vivir los ultimos tres meses de mi vida a su lado, que ver su carita destruida cuando llevaba chicas a casa o cuando, simplemente no llegaba. Era obvió que ella creía que me había acostado con otras chicas incontbles veces, era el plan, pero no era asi. Había besado a aquella primera chica, no recuerdo su nombre, pero lo había hecho. Aún me dolía pensarlo, me daba asco pensar en sus labios tocando mi cuello. Termine por echandola de la habitación. Cuando no iba a casa por las noches dormia en cualquier hotel. Tomaba. Tomaba hasta que no me doliera el alma de saber que ella, que el amor de mi vida, estaba en casa llamandome, con lagrimas en los ojos y el corazon roto.

Con las chicas que llevaba a casa nunca pasaba nada, ellas solo dormían en alguna de las habitaciones de casa, decepcionadas de no haber llegado a nada mientras yo iba a mi habitación, a ver a mi amor dormir. Detallaba su rostro, sus ojos hinchados, sus mejillas aún enrojecidas, me destruía. Nunca me acostaba a su lado, no tenía el derecho. Solo me sentaba ahí, a veces lloraba, dolía saber que la cuenta regresiva para pereder al amor de mi vida empezaba.

Algunas veces me olvidaba de todo, de lo que estaba haciendo y actuaba con normalidad. Ella rechazaba esto, pero al final cedía y teníamos días "normales". Era una mentira, ambas los sabíamos, pero era tan reconfortante. Cuando esto pasaba, por la noche, cuando ella dormia con una sonrisa y no entre lagrimas me rompía. Le estaba haciendo daño, yo causaba sus lagrimas, era mi culpa que ella durmiera con sus ojitos rojos y su corazon roto. Yo no la elegí a ella.

Estaba perdida en mis pensamientos, mi almohada estaba empapada en lágrimas y el programa que estaba viendo en la TV habia acabado, mi día se basaba en eso, en pensar en ella y en que la había roto. La noticia que salió, ella estaba destruida y era mi culpa. El timbre sono, sacandome abruptamente de mis pensamientos, no esperaba a nadie.

— ¿Calle?











perdon por no actualizar, prometo hacerlo mas seguido. <3




I love you so | cachéDonde viven las historias. Descúbrelo ahora