Capítulo 9.

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El nuevo día ya se había anunciado. Jaemin se levantó como todos los días y se alistó para ir a la clínica.
La diferencia era que desde que se acostó a dormir lo hizo con una sonrisa. Debía verse como un idiota por continuar sonriendo de esa manera. ¿Pero cómo evitarlo?, ¿cómo evitarlo cuando, Lee Jeno, te había besado?

Su corazón se aceleraba con solo recordar sus labios rozándose y aquella sonrisa se ensanchaba aún más.
No tenía idea de como debería actuar hoy cuando lo viera. ¿Habrá sido un error para él?, ¿no significaba nada?, ¿era simplemente un juego?

Sí, aquí viene el Jaemin que piensa en exceso las cosas.

Y esque su cabeza es tan astuta que en poco tiempo podía crearse un montón de escenarios con la más mínima situación.
Quería saber qué pensaba Jeno al respecto, pues fue él quién le había besado. Se quedó sentado en su cama pensando y pensando, hasta que reaccionó y se dió cuenta que ya había perdido 20 minutos. Finalmente reaccionó y se apresuró a alistarse.

Tomó un baño de agua caliente y cuando finalmente estuvo listo salió para marcharse. Su casa ya estaba vacía, no era novedad. Su madre siempre enviaba un mensaje más tarde para asegurarse que había llegado bien a la clínica.

Durante el trayecto, puso un poco de música para no ir tan en silencio. Aunque a decir verdad, ni siquiera escuchaba la música, su mente seguía tan entretenida pensando en Lee Jeno.

Cuando se estacionó frente a la veterinaria, Yuta ya había abierto, pudo visualizarlo a través del ventanal.

- Hoy llegaste más temprano

- Quería distraerme un poco -respondió sin mostrar mucho interés.

- ¿Algo pasa, Yuta?

- No, todo está bien

Jaemin no se quedó muy conforme con esa respuesta, sabía que su amigo había estado actuando raro durante algunos días, pero no sabía cómo abordar el tema.
Así que simplemente lo dejó pasar.

El día marchó bastante tranquilo, habían tenido solo dos pacientes. Jaemin trataba de controlarse pero cada cierto tiempo miraba el reloj. Sabía que el señor Park vendría por él en un par de horas, eso lo ponía más que nervioso y se estaba acobardando de atreverse a ver a Jeno está tarde.

- ¿Algo importante pasará? -cuestionó Yuta desde uno de los sofás.

- ¿Por qué? -Jaemin alejó su vista del reloj para mirar a su amigo.

- Te has pasado mirando el reloj todo el día, Nana

- Claro que no

- Ya sé que hay algo que no quieres contarme. Pero sé más disimulado

Jaemin se dijo a si mismo que era momento de hablar. Estaba con su mejor amigo, él le daría un buen consejo.
- ¿Puedo contarte algo?

- Sabes que sí, Nana. ¿Qué sucede?

- Se trata de Jeno -luego de esas palabras, pudo notar como su amigo se puso un poco serio por unos segundos.

- ¿Te ha hecho algo? Te juro que voy a...

- No, no -interrumpió rápidamente a su amigo-. No me ha hecho nada

- ¿Entonces?

- Es que, no sé cómo decirlo Yuta

Yuta rió de lado. - ¿Por él ha sido esa sonrisa desde que llegaste?

- Creo que si

- ¿Te gusta Lee Jeno? -su corazón dolió al hacer esa pregunta. Pero tampoco podía darle la espalda a su amigo.

El disco de tu corazón [NOMIN] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora