O6 ☃️

3.1K 505 120
                                    

Capítulo dedicado a 

☃️

Durante dos días Yoongi no contestó los mensajes de Taehyung, en el lobby del edificio le dijeron que Taehyung había ido a buscarlo, pero Yoongi pidió que no lo dejaran subir. El tercer día no escuchó nada del menor, durmió y comió poco, como los días anteriores a que llegara Taehyung a su vida.

Tras revisar su refrigerador y alacena, tuvo que colocarse botas y salir al supermercado. Éste le quedaba a cinco cuadras por lo que no tenía problema en ir caminando, además le gustaba que podía elegir a su gusto los artículos y luego se los enviaban a domicilio.

Tuvo que correr en la última cuadra porque comenzaba a nevar; esperaba que cuando saliera la nieve se hubiera detenido.

Después de realizar sus compras y yendo de regreso hacia su casa, algo duro y frío le golpeó la espalda. Se giró de golpe y vio a Taehyung de pie a pocos metros, agachado, armando otra bola de nieve.

—¿Qué te sucede? —le gritó y el menor le aventó otra bola de nieve que el pelinegro no logró esquivar por completo— ¡Taehyung!

El castaño se preparaba con otra munición así que Yoongi decidió no quedarse atrás y agacharse para hacer lo mismo.

Le aventó una bola de nieve a Taehyung pero ésta ni siquiera lo alcanzó.

—¿Es lo mejor que tienes? —preguntó Taehyung, tirándole una y golpeando su hombro.

Se enfrascaron en una guerra de bolas de nieve, sus semblantes serios se convirtieron en risas y provocaciones, hasta que Yoongi dio un paso en falso y resbaló con el hielo, cayendo de sentón.

—¡Yoongi! —exclamó el menor, corriendo para auxiliar al pelinegro—, ¿estás bien?

—Yo sí, mi trasero plano no tanto —dijo sobándose.

—Tu trasero es perfectamente redondito, Yoon.

El sonrojo del mayor no fue notorio porque su rostro ya estaba colorado por la reciente actividad, pero Taehyung ya sabía identificar cuando Yoongi se cohibía porque fruncía los labios y sus ojos se entrecerraban, viéndose más chiquitos.

Lo ayudó a levantarse y ambos se sacudieron la nieve, quedándose en silencio.

—¿Sigues molesto? —Yoongi negó—, ¿estamos bien?

—Sí, lo siento, ese día... solo me sorprendió verte con alguien más —hizo una pequeña mueca.

—No suelo tener varios clientes a la vez, pero con él casi terminaba y tú querías empezar de inmediato. Debí decírtelo, perdón —dijo sincero; Yoongi asintió.

—También me disculpo, mi reacción no estuvo bien, no es como si fueras... —se mordió el labio y suspiró—, como sea. Debemos concentrarnos en el propósito de todo esto, quedan pocos días para la cena —Taehyung asintió y le preguntó si podía acompañarlo a casa, el mayor afirmó y caminaron juntos.

☃️

Pidieron comida a domicilio y Yoongi le dio ropa seca al menor, el jogger le quedaba un poco corto, pero era mejor a enfermarse; mientras el pelinegro se quitaba la ropa húmeda por la nieve, el timbre sonó y Taehyung abrió.

—¿Y tú quién eres? —preguntó un chico castaño y de labios gruesos. Creía ya haberlo visto pero no recordaba dónde.

—Kim Taehyung, novio de Yoongi, ¿tú quién eres?

El chico castaño abrió los ojos y rápidamente sopló un silbato que traía en su mochila, haciendo que Taehyung se cubriera los oídos por chillante sonido.

El contrato navideño | TAEGI | COMPLETADonde viven las historias. Descúbrelo ahora