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Todos estaban en el País de las Maravillas, bueno, por todos me refiero a Ben, Mal, Jay, Carlos, Evie, Doug, Lukas, Lari, James, Mirana, Alicia, el Sombrerero, Bella, Adam y el Hada Madrina.
Acaban de firmar la adopción de Maya y Cameron, Mirana había accedido a adoptarlos hasta que Juliette fuera mayor de edad, y luego fueron directo al salon del trono. Todos los que no conocían Wonderland estaban maravillados con lo limpio e impecable que era el castillo de Mirana, blanco.
───. Yo te nombro a ti, Maya De Crims ─── el Hada Madrina señaló a Maya con su varita ───. Y a ti, Cameron de Crims, como princesa y príncipe del País de las Maravillas ─── la mujer terminó por hacer aparecer una corona sobre la cabeza de cada niño. Cameron era sujetado por Juliette, quién sonrió ampliamente al verlos.
Maya se giró a verla.
───. Cumpliste tu promesa ───dijo Maya, con pequeñas lágrimas en sus ojos.
Los ojos de Juliette se pusieron rojos al retener las lágrimas y la abrazó con fuerza.
───. Claro que sí, Maya. Una promesa jamás se rompe ─── respondió, besando la mejilla de Cameron, Maya limpió sus ojos, y los tres se giraron a ver al público, quienes hicieron una reverencia.
───. Ahora, si gustan pasar al comedor, Lari les enseñará dónde esta ─── indicó Mirana amablemente.
Carlos tomó a Cameron de los brazos de Juliette y junto a Maya y los demás salieron, siendo guiados por Larissa. Juliette miró a su madre.
───. Tenemos un tema pendiente ─── comentó Juliette, asintiendo. Mirana sonrió satisfecha al saber que Juliette ya estaba lista para la conversación.
───. Quieres más tiempo ─── dijo Mirana, cuidando sus palabras, pero siendo directa.
───. Mamá, amo este lugar, desde las flores que hablan hasta los gemelos, el País de las Maravillas es mí hogar. Pero quiero conocer el mundo. Quiero enamorarme más de mil veces, perder la cuenta. Poder averiguar si Carlos es mi media narajan, quiero vivir un poco más ─── explicó, limpiando las lágrimas se le escapaban.
───. Está bien, mi niña, yo te entiendo ─── Mirana la tomó por los hombros con delicadeza ───. Está bien, el tiempo que necesites.
───. Y yo... ─── Juliette sonrió al darse cuenta de que no tendría que justificar sus acciones por que ella la entendía. Su madre la comprendía ─── gracias. Pero hay algo más; quiero que hagamos una casa hogar para los niños de la Isla, aquí en Wonderland y otra en Auradon, quiero ayudar a más niños como Maya y Cameron.
