|0.33|

546 47 0
                                    

- Así que Yuri -

- Así es -

- Es un nombre muy bonito, puedes colocarla sobre la báscula- asentí y le quite la cobija a Yuri mientras le entregaba su cobija a Pat. Hoy habíamos venido a ver al pediatra ya que así me lo recomendó la enfermera para que la revisara y también me ayudara a aclarar algunas dudas. - Es una niña bastante bonita y está en un peso adecuado. ¿Cuánto tiempo tiene que nació? -

- Una semana -

- Muy bien, ya puedes bajarla ¿Qué tal te has sentido tú? -

- Bastante bien -

- Okey, pues todo está normal, su peso es de 3.6 kg y mide 35 cm está muy sana -

- Muchas gracias doctor- dije mientras la volvía a tapar para que no le diera frío.

- Recuerde que debe de traerla cada mes para revisarla y aún no puede darle leche en fórmula hasta que cumpla los seis meses -

- Está bien, muchas gracias- Pat tomo la pañalera y nos despedimos del pediatra para después salir y buscar un taxi que nos llevará al trabajo. En cuanto llegamos ambas nos bajamos y entramos al local.

- Yo quiero cargarla!- gritó Yoichi mientras se me acercaba y me quitaba a Yuri de los brazos.

- Idiota la puedes lastimar!- le gritó Hanae mientras le daba un golpe en la cabeza a su mellizo. Ambos habían entrado a trabajar cuando cumplí los siete meses de embarazo ya que no había estado trabajando durante esos meses debido a las recomendaciones de la obstetra.

- Cállate está durmiendo -

- Hey chicos si siguen gritando la van a despertar -

- Es tan hermosa, perdona que no hayamos ido a verte al hospital -

- No se preocupen, ahí deje su moisés para que la dejen- respondí mientras ataba mi cabello en una coleta.

- Está bien -

Había pasado ya un buen rato, así que me encontraba sentada dandole de comer a mi pequeña, cuando escuche como se abrió la puerta y Patricia junto a Hideki comenzaron a guardar las cosas de Yuri.

- Pon a la bebé en su moisés- me dijo Hideki mientras se acercaba, asentí y la coloque tapándola y después ví como Pat se acercó a la barra donde estaba sentada.

- ¿Qué está pasando? -

- Es Yoshio, pero si ve a tu hija pensará que tú y Rin se siguen viendo y lo va a golpear -

-¿Qué? ¿Por qué? -

- Sólo actúa normal- asentí y me levanté de la silla.

- Nara cuanto tiempo sin verte -

- ¿Qué haces aquí? -

- Sólo venía a verte, cómo dije antes tenía tiempo sin verte -

- Me sentía algo mal- respondí intentando evitar su mirada.

- Supongo que por fue por qué tu novio te termino -

- Algo. Espera¿Tú cómo sabes de eso? -

- Tengo muchos contactos Nara -

- Vete de aquí- dije mientras rogaba en mi interior por qué Yuri no comenzará a llorar.

- Está bien, sólo quería venir a verte. Adiós- cuando Yoshio se fue, solté un suspiro y me volví a sentar mientras le daba de comer a mi bebé de nuevo.

- Hay algo que quieras decirme -

- Te lo tendré que explicar en casa -

- Supongo que está bien, puedes pasarme un pañal y las toallitas -

- Aquí estan- tome las cosas y me metí al baño para cambiarle el pañal a Yuri, en cuanto termine tire el pañal sucio a la basura y salí de los baños.

- Cariño cuanto tiempo sin verte y ahora tienes una hija. Tu padre se equivocó cuando dijo que jamás tendrías una hija o te enredarías con algún delincuente -

- ¿Qué haces aquí? -

- No es obvio, vengo por ti y por... Mi nieta -

- Déjate de bromas Ayame, tú no eres mi madre y tampoco eres su abuela -

- Claro que lo soy o quieres que te recuerde que estoy casada con tu padre -

- Eres viuda, así de déjame ahora o llamaré a la policía -

- Sólo venía a decirte que la fecha límite que te dí,  para que me des tu dinero está por acabarse -

- ¿De qué estás hablando? -

- De la fecha que venía en la carta que te entregaron el mismo día que enterraste a tu padre -

- Lárgate de aquí si no quieres que te saque a patadas -

- No puedes hacerlo -

- Ella no pero yo sí- respondió Patricia mientras se paraba a mi lado. - La puerta está muy grande y puedes salir por ella o necesitas ayuda -

- Está bien, mi abogado irá a buscar mi dinero -

- Yo no tengo por qué darte mi dinero- le dije pero ella sólo se rió y salió del local.

- Será mejor que ya nos vayamos a casa -

I LOVE HER   Rindou Haitani Donde viven las historias. Descúbrelo ahora