Capítulo 22: Ángel de Dolor (III Parte)

19 3 0
                                    


Yukito estaba arropando a la pequeña Mein Li la cual abrazaba un oso de felpa color blanco, los ojos mieles del chico vieron la duda en los ojos de su hija así que haló una silla para sentarse la lado de la cama.

Yukito: ¿Te sucede algo?

Mein Li: ¿Voy a tener un hermanito?

Yukito: Si... te lo dijimos durante los días que fuimos de vacaciones... pensé que no te habían quedado dudas.

Mein Li: No es eso papi.

Yukito: ¿Entonces?

Mein Li: ¿Por qué tío Yue no ha tenido hijos?

Shaoran: Los van a tener – Interrumpió entrando a la habitación – viajaron para eso... estarán ausentes por unos meses pero estoy seguro que volverán con algún primo o prima para que juegues.

Mein Li: ¡¿EN SERIO?! – Ve a sus padres asentir - ¡Genial!

Yukito: ¿Esa era toda tu duda?

Mein Li: No... también quiero saber si el bebé va a dormir conmigo.

Shaoran: Tendrá su propia habitación cariño.

Mein Li: Ah... qué lástima.

Yukito: Los bebés lloran mucho cuando recién nacen así que por un tiempo tendrá que dormir en su propia habitación... no creo que te guste que te levante a las dos de la mañana un día de escuela.

Mien Li: Creo que no.

Shaoran: Bueno... basta de charlas que ya es muy tarde... tienes que dormir.

Mein Li: Buenas noches padre – Shaoran se inclina para darle un peso en la frente – buenas noches papi – Yukito hace la misma operación.

La pequeña cierra sus ojitos y Yukito apaga la luz del cuarto dejándole la puerta semiabierta para que la luz del pasillo entre, Shaoran toma de la mano a su esposo y lo guía a su habitación en donde lo abraza besándolo con pasión.

Shaoran: Te extrañé mucho... ahora que trabajo sólo el tiempo pasa más lentamente.

Yukito: También te extrañé amor... sin Yue en casa y Mein Li en el preescolar no tengo nada que hacer... ya ansío que nazca – Se acaricia el vientre aún plano.

Shaoran: Te amo... no sabes cuanto.

Yukito: Claro que lo sé tonto – Le pesa la punta de la nariz – tanto como para darme vida todos los días... tanto para pensar que vivo en el paraíso.

Shaoran: Estás muy romántico – Besa sus mejillas y luego sus labios... mientras sus manos discretamente viajan, una por la espalda y otra hasta llegar a su redondeado trasero.

Yukito: Y tú muy apasionado.

Shaoran: Pero así me amas.

Yukito: Si... así te amo.

Los besos que iniciaron junto a la puerta de la habitación terminaron en la enorme cama matrimonial.

+++

No podía creer que estaba frente a esa elegante y pesada puerta de madera oscura, hacía años que no se encontraba ahí, pero no era distinto de cómo lo recordaba, parecía que el tiempo no hubiera pasado por esas oficinas.

Melisa: Anímate Joey... en este momento no está haciendo nada importante.

Joey: Pero – La chica a su lado le tapó los labios con un dedo – viniste para hablar con él o no... pues hazlo... demuéstrame esa valentía que tenías cuando llegaste a trabajar aquí.

I DON'T WANNA CRYDonde viven las historias. Descúbrelo ahora