Capítulo 5

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Wangji bajo sus pupilas al cuerpo del conejito dormido en su regazo, una leve sonrisa se hizo presente en sus labios, se veía tan tranquilo y tierno.

Dejó su libro a un lado y cargo al animal viéndolo. El conejito despertó y al ver el rostro del mayor alzó sus orejas, movio su cola y nariz indicando que estaba feliz. Wei Ying acercó a Lan haciendo que sus narices rozen.

Wangji sonrió por primera vez enfrente del animal que apreció su sonrisa, una sonrisa cuadrada que lo hacía ver más amable y agradable que intimidante y serio. El de grandes orejas acaricio su hocico contra la boca del mayor en forma de afecto, el humano se dejó hacer por el conejo.

Wei Ying de un momento a otro paso de ser un conejito esponjoso a un humano tierno, Lan lo solto rápidamente y volvió a agarrar su libro. El híbrido fue a ponerse ropa triste, no le gustaba como se comportaba el mayor con el cuando era un humano, ya vestido se sentó en la cama con sus orejas abajo y abrazo sus piernas aburrido.

Wei Ying suspiro sin tener la atención de Wangji y agarró una almohada para abrazarla y aspirar en aroma de esta, Wangji lo miró de reojo notando el aura triste de este, con una mala actitud se levantó de su comodo sillón para sentarse al lado del híbrido.

- ¿No me quieres? - preguntó el de sonrisa de conejo escondiendo su cara en la almohada, Lan suspiro, nunca fue bueno demostrando amor o algo así-

- No eres taaaan molesto -respondió Wangji acariciando su propia cabellera un poco incómodo-

- No pregunte eso - dijo el castaño volteando moviendose en su lugar como si buscará esconderse cuál conejito asustado-

- Wei Ying... - hablo Wangji incómodo sin saber qué hacer, nadie le había insistido tanto en demostrarle afecto, ni la pareja más frustrante que había tenido-

- Cuando soy un humano no me quieres...¿soy feo? - siguió hablando ahora con un tono triste sin querer encarar al mayor-

Lan lo miró extrañado, no había notado su comportamiento con el chico, era cierto que cuando era un conejo lo cargaba mucho y dejaba que este restregara su pelaje suave contra el, pero si era un humano lo evitaba la mayoría de veces. Tal vez esto le había afectado al híbrido.

Wangji suspiro pesadamente antes de agarrar el brazo del castaño volteando el cuerpo del mismo, lo atrajo hacia su cuerpo y lo aprisiono en sus brazos.

- No eres feo - comenzó a hablar Wangji con un tono tranquilo y suave a la vez que acariciaba las orejas del híbrido-

- ¿Por qué no me quieres cuando soy humano? - preguntó el castaño levantando mirada al rostro del contrario que ya no tenía su mirada intimidante, si no una más relajada y estaba levemente sonriendo-

- Si t-te quiero - respondió con dificultad, no era alguien de mostrar algo así verbalmente pero tenía que hacer ya que se veía como el más bajo estaba a punto de llorar-

Wei Ying sonrió feliz y comenzó a restregar sus orejas contra el chico, ya que era una muestra de amor. Wangji sonrió con ternura por esta acción.

El de grandes orejas se acercó a la cara de Wangji con una sonrisa tierna y restrego sus narices sorprendiendo al contrario.

- JiJi estas rojito - dijo el híbrido con una risita, el mencionado desvío su mirada y pasó su mano por la cabellera del castaño para después pegar la cabeza del chico a su pecho evitando que lo vea-

- Me gusta tu cara, es muy bonita -siguió hablando Wei Ying ahora picando las mejillas de Lan con sus dedos -

Wangji sólo sintió arder sus mejillas, odiaba sinrojarse y casi nunca lo hacía, más bien, nunca lo hacía. No sabía el porqué ahora lo hacía.

Un pequeño conejitoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora