En el ala más lejana de la enfermería se escuchaba el bip del monitor de signos vitales. Desde que entró en coma, Uranus había mantenido un ritmo estable e incluso mostraba signos de actividad cerebral. Sin embargo, los doctores no se explicaban porqué no había despertado aún. Sus poderes de Senshi deberían haber curado ya todo daño interno. Mercury no dijo nada, pero creía que tal vez era la misma Uranus que no quería despertar.
La revisión por parte de los doctores era rutinaria, observaban si había algún cambio y apuntaban lo que veían, pero todo era exactamente igual: sin cambios. Por lo que no sorprendió que esa noche fuese exactamente igual. Antes de salir de la habitación, el doctor apagó las luces sin volver a ver el cuerpo que yacía inerte en la cama y cerró la puerta tras de sí, por lo que no pudo notar el leve movimiento de un par de dedos de la mano derecha de Uranus.
*****
Habían pasado un par de horas de la pequeña fiesta que se había armado en la sala de reuniones de su escuadrón. Haruka, aún transformada, estaba sentada en la mesa más alejada junto con Takao y Takeshi, mientras veía como los demás tomaban, bailaban y reian, celebrando la pequeña victoria. En su mano tenía un vaso con lo que podía identificar como cerveza, o algo muy similar. Al parecer era una bebida muy popular. Sin embargo, no había tomado mas que un par de sorbos. Miraba el reloj que se encontraba a la pared a la mitad del salón. Faltaba una hora para le media noche, por lo que debería irse pronto.
-Ve el reloj con ansias, comandante ¿Debe irse ya?
-Le había prometido a Neptune verla a la media noche... pero creo que me iré antes -dijo dejando el vaso de cerveza en la mesa -¿habrá algún inconveniente por eso?
-No lo creo, la mayoría de aquí está bastante tomada como para darse cuenta de su ausencia.
-Bien -dijo poniéndose de pie -fue divertido todo esto, pero debo irme.
Takao y Takeshi se pudieron de pie. Ambos llevaron su puño al corazón en señal de saludo. Haruka sonrió y asintió levemente con la cabeza. Se dio la vuelta, pero un golpe en el rostro la tomó por sorpresa y terminó en el suelo. El golpe seco hizo que todos se quedaran en silencio.
-¡Tu! -gritó el soldado que la había golpeado, en claro estado de ebriedad. Se agachó para darle otro golpe pero Takeshi lo agarró de los hombros y lo cargó hacia atrás -¡sueltame! -decía mientras intentaba zafarse, en vano, del agarre.
Haruka se limpió el hilo de sangre que brotaba de sus labios y se puso de pié, con ira en los ojos. Todos alrededor pensaban que iría contra el soldado a golpearlo sin piedad, pero solo atinó a mirarlo con desprecio antes de hablar.
-Tienes 3 segundos para decirme porqué me atacaste -hizo aparecer su espada y se la puso en el cuello -o serás acusado de traición.
-¿Traición? -dijo en tono burlón, mientras reía -¡¿me vas a hablar tú de traición?! -Haruka bajó la espada y lo miró seria, pero con interés.
-Comandante -dijo Takao – está ebrio, voy a llevarme-
-NO -interrumpió Haruka -deja que hable.
-Si Takao, hazle caso a tu amo
-¡Cierra la boca! -dijo el aludido mientras le dio un golpe en el estómago.
-¡Suficiente! -Gritó con autoridad la rubia -Takeshi, suéltalo, y tú, habla. -El general lo soltó, tal como se lo ordenó, pero siempre atento para evitar otro ataque.
-¿Cómo pudo? -le dijo el soldado en tono muy bajo, casi susurrando -ella era todo lo que yo amaba -continuó -y me dejó... por ti ¡Por tu culpa! -le apuntó con el dedo, tambaleándose -¿no le bastó meterse con la Reina y tuvo que meterse con mi novia? -Se escuchó un suspiro de sorpresa alrededor, mientras Haruka solo atinó a abrir los ojos como plato. No podía creer lo que escuchaba -¿Ahora me va a hablar de traición? Traición es lo que hiciste al meterte con mi novia ¿No teníamos un código? ¡No respetas a nadie! Ya tenías suficiente cogiéndote a la Rein- un golpe hizo que se callara y cayera al suelo. Haruka lo había golpeado.
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Reminiscencia
Roman d'amourHaruka, aburrida de la paz después de la guerra, busca nuevas emociones y las encuentra en los piques de autos y en una cautivante mujer. Por otro lado, el futuro Tokio de Cristal está bajo ataque y S.Uranus, comandante del ejército, cae en coma des...