N.03

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Aún recuerda aquellos días en los que era el extraño en todos lados. una cabellera rubia desordenada unos ojos verde claros donde debajo de estos resaltan unas pequeñas ojeras por las noches de insomnio cuando su cabeza no lo deja descansar con múltiples paranoias o angustias, una camiseta verde mal abotonada debido a sus temblores.

La primera persona que llegó a ser realmente importante para el fue Jason blanco, uno de sus mejores amigos, quien tristemente falleció un día que el y todos los chicos del grupo jugaban fútbol americano.

Jason sabía que desde antes tweek miraba a lo lejos a aquel chico de gorro azul desde la primera vez que estos tuvieron su gran pelea. El chico problema, independientemente de todo tweek siempre sufría de espasmos y ataques de pánico por muy pequeña que fuese el problema.
Por lo que Tweek suponía y este nunca se fijaría en el.

Sorpresivamente así fue, Craig decidió hacer que su amistad fuese una relación, a todas luces Tweek agradecía a aquellas chicas coreanas. sin embargo las cosas se fueron deteriorando. Poco a poco notaba como craig se alejaba de el o quizás solo llegaba a ser indiferente. Hasta que aquellos apodos lindos dejaban de ser pronunciados, aquellas salidas y todos esos detalles que craig tenía hacía este.

Llegaron a pelear verbalmente más de una ocasión en todo ese lapso debido a las inquietudes de tweek que llegaron a exasperar a tucker.

Nunca creyó que este terminaría con el de forma tan repentina en la puerta de su casa con un doloroso Necesito un tiempo. Su corazón no dejaba de correr y su respiración paso a ser algo letargica. Sin poder dormir y sin ninguna contestación a sus llamadas o mensajes lo persiguió al siguiente día en la escuela hasta los baños para poder arreglar las cosas pero lo único que recibió fue un golpe contra los baños y un corazón roto que llegó a darle un ataque de pánico.

La cabeza le daba vueltas, quería vomitar, llorar, morir. Comenzó a sentir como su cuerpo le traicionaba y sentía como comenzaba temblar todo su cuerpo, abrió levemente la boca para respirar bocanadas grandes de aire ya que sentía un enorme nudo en la garganta que no le dejaba respirar, la vista se nublo mirando a un punto incierto, tenía mucho calor. lentamente llevo sus manos a su nuca, cómo si el fuese a gritar antes de explotar de rabia, dolor, angustia, desesperación.

—¿Tweek?—se escucho de repente, casi lejano haciendo que este saliese de su trance dejando de temblar por la sorpresa. Lentamente levantaba la mirada para toparse con unos ojos azules, estos a su vez lo veían con profundidad.

Kenny alzó ambas cejas preocupado, se veía realmente mal. Se miraron en silencio por un largo rato, sin ninguna emoción de por medió. Tragó en seco dando un paso hacia adelante de este aún sin causar efecto alguno, como si tweek se hubiera congelado—Hey, hey, tranquilo—Tocó levemente su hombro regalándole una pequeña sonrisa—Tweek, ya pasó.

Tomo impulso y solo lo hizo, se lanzó a los brazos de Kenny. No le importaba la vergüenza, solo se sentía desprotegido, solo y dolido. De pronto soltó ese llanto que hace un momento no pudo expresar. Kenneth después de unos segundos abrazo al bajito y pego su rostro al cabello de éste. Tweek en su desespero lo abrazo con fuerza y kenny hizo lo mismo tratando de confrontarlo.

No sabe exactamente cuánto tiempo estuvieron así, solo abrazo a tweek hasta que dejase de llorar, tweek trataba de halar su cabello de vez en vez por mero impulso ansioso a lo que un serio Kenny quitaba su mano con algo de fuerza y un rotundo "Nop, no te hagas daño".

Las horas pasaron y podía jugar haber escuchado el timbre de la última clase, poco le importo llegar, se recargó en la pared sin soltar a Tweek quien aún seguía soltando en llanto. Kenny noto como este se calmaba, por mera inercia tocó el cabello de Tweek causando que se separé de Kenny apenado y algo devastado, ¿Qué debía decirle a este? Se abalanzó a un compañero de la escuela en los baños, comenzó a temblar debido a su sobre pensar, cosa que termino al sentir una mano sobre su rostro limpiando los rastros de lágrimas que quedaban. A Kenny nunca le gustó ver a otras personas ya que una de sus personas más importantes lloraba siempre a causa de sus padres, salvo Cartman ya que se veía jodidamente gracioso.

Moriría por ti Donde viven las historias. Descúbrelo ahora