El momento de Riot

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–Winter, ¿Que ocurre? –le pregunto Harrison con preocupación.

–Harrison, tienen que impedir que el cohete despegue a toda costa –le indico una voz femenina al otro lado de la llamada.

–¿Quien eres tu?, ¿Y que haces con el Scroll de Winter? –le cuestiono Harrison con suma desconfianza.

–Soy Ciel Solei, Winter está indispuesta en estos momentos y me pidió que les dijera eso –le contesto la voz femenina.

–¿Para que quiere que hagamos eso? –le cuestiono Harrison sumamente confuso.

–No lo sé, eso fue todo lo que me dijo, no se si algo pueda venir si es que el cohete despega –le respondió Ciel.

–Enterado, por el momento pon a Winter en un lugar seguro donde se pueda recuperar e intenta mantenerla con vida, ¿De acuerdo? –le ordenó Harrison con seriedad.

–De acuerdo, señor –acato Ciel para acto seguido colgar el Scroll.

–¿Cómo que mantener a Winter con vida? –le pregunta Kyle muy confundido y extrañado.

–Victor tenía razón en que los refuerzos jamás llegarán –les comento Harrison con suma molestia la cual no entienden del todo sus compañeros –La base atlasiana fue atacada, y no pueden enviar refuerzos, así que estamos por nuestra propia cuenta –les reveló Harrison impactando mucho a sus compañeros de equipo.

–¡¿Cómo fue posible eso?! –le cuestiono Carol sumamente alterada por la noticia.

–Cariño, en la base de Atlas habían enormes cantidades de Paladines y Automatas que son transportados hacia las misiones en las que los requieren, no me extrañaría que fuera la más afectada por el virus cibernético –le explico Ryan con suma molestia mientras que Carol apreta su único puño disponible en señal de frustración.

–¿Y tiene algo que ver el cohete con esto? –le pregunto Kyle a su líder.

–Me dijo que tenemos que detener el despegue a toda costa, no sé porque, pero siento que tiene que ver con los Simbiontes –le respondió Harrison mientras se giraba a ver el cadáver del recién asesinado Victor Giménez.

–En todo caso no hay tiempo que perder –declaro Kyle con determinación que sería correspondida por Carol quienes estaban por marcharse del lugar, sin embargo, ambos son detenidos por Harrison.

–Ryan, llévate a tu esposa y a Kyle de aquí –le ordenó Harrison.

–¡¿Que?!, ¡¿Cómo por qué quieres dejarnos fuera de esto?! –le cuestiono Carol sumamente molesta por sentirse excluida de aquella misión.

–Primero, de todos ustedes están sumamente heridos, segundo, Ryan perdió su arma y no puede luchar muy bien cuerpo a cuerpo mucho menos si se tratan de Simbiontes, tercero, el los llevará a la enfermería más cercano por si se desploman por la perdida de sangre –les explico Harrison con una postura de completa seriedad.

Carol estaba por reclamarle eso, sin embargo, Kyle empezaba a tambalearse hacia atrás, pero este se recompone con un poco de dificultad y mira su mano, notando que este empezaba a ver borroso, hecho el cual hace que Carol cierre la boca.

–¿Y que es lo que harás tu? –le cuestiono Ryan a su líder.

–Voy a regresar al centro de mando, veré si desde ahí puedo abortar el despegue de algún modo u otro, y de paso les avisaré de esto a los Ace Operatives si es que puedo comunicarme con ello, así que no cuestionen mis órdenes y hagan lo que les pedí –le respondió Harrison.

Luego de eso, Harrison de media vuelta y con su machete en mano se va corriendo del lugar para poder dirigirse hacia la estación de control mientras que su equipo toma dirección opuesta de donde Harrison se había ido.

Harrison mientras estaba corriendo, una alarma comenzaría a sonar.

–Atención, el despegue del cohete se ha aplazado de 10 a 25 minutos debido a unas fallas técnicas que el sistema automático se está encargando de reparar, las reparaciones estarán terminadas en 18 minutos –.

—¡Bien, eso me dará un poco más de tiempo! –exclamo Harrison en sus pensamientos mientras se dirigía a su destino a su vez que tomaba su Scroll para poder llamar al líder de los Ace Operatives.

Mientras tanto fuera de la estación, el equipo de jóvenes cazadores, el equipo en estos momentos estaban en la labor de ayudar a todos los heridos por el ataque mientras que lo de mentalidad más madura ayudaban a juntar y contar todos los muertos que habían.

Todo el ambiente era muy deprimente, tanto así que todos se conformaron con que lo peor ya había pasado, sin embargo, una figura alta y musculosa se manifiesta en medio de todos, haciendo que algunos se desplomen al suelo del miedo mientras que otros simplemente se quedaban paralizados.

Todo esto llamo la atención de los jóvenes cazadores quienes dejaron sus labores y fueron hacia donde estaba todo el escándalo.

Ren, Pyrrha y Blake habían salido de la zona en dónde se encontraban los cadáver mientras que Penny, Ruby y Nora habían salido de la zona en dónde se juntaban todos los heridos. Cada uno de ellos llegó con sus armas lista para un posible enfrentamiento, sin embargo, fue grande su sorpresa al reconocer a la figura misteriosa al instante.

–¡Jaune! –gritaron todos al uniso alegres de ver al rubio con el Simbionte negro.

Sin embargo, el Simbionte no les corresponde el saludo y por consecuente deja de cubrir a su portador, revelando a una persona completamente distinta.

–Tu no eres Jaune –le dijo Ruby en un tono cortante mientras preparaba su arma.

–Ya lo sé, soy Eddie Brock, uno de los amigos de Jaune, y tengo que decirles que no solo el está en graves problemas, todos lo estamos –les trato de explicar Eddie.

–Pero el caos de nuestro armamento ya terminó –le comento uno de los soldados atlasianos sumamente confundido.

–Ja, ¡¿Acaso crees que eso es lo peor que le puede pasar a Remenant?! –le cuestiono el Simbionte manifestándose y asustando aún más a los soldados.

–¿Que quieres decir con eso? –le pregunto Ruby con aún más confusión.

–Me refiero… –el Simbionte había manifestado otro zarcillo para señalar el cohete –A que si esa cosa despega, lo peor solo estará por empezar –les reveló Venom impactando de gran manera a todos por la noticia.

De vuelta con Harrison, este finalmente había llegado al puesto de control, ahí vio como todo el lugar estaba casi destrozado por la aparición de los Simbiontes. El líder del equipo HCKR estaba buscando una computadora que pueda servir para abortar el despegue, sin embargo, no encontraba nada, o eso fue hasta que al final de la hilera de computadoras vio una que apenas servía, por lo que Harrison se dispuso a correr hacia dicha computadora para abortar el despegue.

Harrison se dispuso a revisar la computadora, todo estaba en orden, por lo que empezo a teclear el teclado para poder acceder a algo, sin embargo, un extraño rugido detrás de él le puso los pelos de punta, por lo que se gira rápidamente solo para ver una bola con pinchos que se dirigía hacia el cazador, por lo que Harrison rápidamente se hace a un lado esquivado el ataque pero dicho ataque le dió directamente a la computadora, dejando sin opción alguna para detener el despegue.

El cazador molesto y frustrado se gira en dirección de donde provino el ataque, viendo así a lo que parecía ser una figura humanoide musculosa de más de 2 metros de color grisasea de nombre Riot.

Harrison teniendo al Simbionte en frente lo observados con más detenimiento, observo el color de la misma con mucha atención, sus siniestros ojos ovalados y esos dientes, y mucho más la bola de pinchos con la que el Simbionte lo había atacado, dándose cuenta de algo de lo que comenzaría a reír, cosa la cual llama la atención del Simbionte.

–Jajajajaja, ya veo, así que, lo que nos atacó en el tren y lo que me quito el brazo no fue un grimm nuevo, si no que fuiste tú, un Simbionte –concluyo Harrison en voz alta haciendo que el Simbionte grisaseo ría por lo concluido.

Tras esto, el Simbionte se lanza al ataque contra Harrison quien empuña su arma calentando el filo de esta para dirigirse y cargar contra el Simbionte.

CONTINUARÁ…

Jaune Arc: el huésped de Venom.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora