Acepte dar un tour a los nuevos, bueno, no acepte, Alejandro me obligó.
No es que no quisiera, simplemente no tenía deseos de hacer algo hoy.
En fin, Alejandro es Alejandro y si no hago lo que dice, seguramente me negara la entrada a su casa y no probaré la comida que hace su abuela.
- Baños, duchas, comedor, campo de tiro. Creo que es todo. Si no encuentran algún lugar, pregunten con confianza a los otros soldados.
— y porque no tu? – soap alzó una ceja.
– Porque yo debo encargame de los recién llegados. Y no, no hablo de ustedes. Pero si pueden acudir a mi. Tranquilo. Umm, ahora, sus habitaciones. – volvi a caminar, ellos me seguían sin decir nada, bueno, solo los otros dos, Soap seguia siendo parlanchin.
– Sepan que no las habitaciones de mujeres están arriba, y las de varones aquí abajo. No intenten nada con las mujeres, lo sabré y tendrán problemas- advertíSoap sonrió inocentemente y yo solo pude propinarle un leve golpe en el brazo.
Ghost y könig seguían callados.– Ahora, caballeros, debo irme. Disfruten de su estadía y no se metan en líos.
Debo mencionar que en todo el trayecto que recorrí junto a ellos, me sentí observada.
Era curioso, pero no le tome importancia. Se que hay algunos rumores. Quizá un curiosos que anda por ahí.[...]
Yo no participaría en la misión. Pero debía estar alerta en caso de que necesitaran refuerzos.
Era aburrido estar esperando a que mi intercomunicador emitiera algún sonido y así salir a la acción.
En este momento maldigo a Kate y Alejandro por no incluirme.– Ahhhh... odio esto, odio los papeles, odio ordenar... Los odio a todos. Es todo, me largo. – Sentenciaste abandonando tu asiento para salir a los pasillos y dirigirte a tu habitación. No sin antes recoger tus cosas del casillero.
Estarías en tu habitación, pero seguirías atenta al llamado de la 141.
– Estos imbéciles son unos sucios. Dejan basura por todos lados. Ya verán, los haré hacer doscientas lagartijas mañana – Levante los envoltorios y los estruje con mi mano y así tirarlos a la basura.
Frente al casillero, justo antes de abrirlo, escuchaste tu intercomunicador, sonreíste porque finalmente saldrías a apoyar a tu equipo.
Pero no fue así.– ¡___! Llama a los médicos! Nuestra ubicación es la pista de aterrizaje, MacTavish y König fueron heridos de bala. ¡Apresúrate! - Era Alejandro. Se le oía alterado.
Y ahora la alterada eras tu.
Llamando y apresurado a los médicos que llegaron en poco tiempo a auxiliar a los hombres.König fue el único que no se dejó tocar, los médicos intentaban hacerlo entender, pero simplemente el no cedía.
El contacto físico no era algo que le agradara, de hecho, lo detestaba.– Yo me encargo, vayan con el Sargento y hagan todo lo posible para que este bien. – ordene
El par se médicos se fueron sin mediar palabra. Y yo solo pude mirar a König. Parecía asustado. Imagino que por la pérdida de sangre o el dolor.
– Ven – intente tomar su brazo, pero el se alejo al instante. – Esta bien, no voy a tocarte, te curare y será todo. Puedes confiar en mi König – dije con suavidad para convencerlo.
– Puedo hacerlo... solo – Era la primera vez que oía su voz. Y vaya que me sorprendió. Para su tamaño y complexión, su voz era suave y no tan grave
– Déjame ayudarte. No hablaré ni tocare de más. Soll retiraré las balas y podrás irte a descansar. ¿De acuerdo? – consulte en espera de su aprobación.
Esta no tardo mucho, pues König movió un poco su cabeza de delante hacia atrás.
–¿Duele? – pregunte por tercera vez desde que empece a curarlo.Estaba por terminar y el parecía impaciente. Lo supe por el ruido se sus botas al chocar contra el suelo en un golpeteo constante.
– No
– Estoy por terminar.
Finalmente termine de vendar su brazo. Habían sido tres balas en total y el se mostraba tan sereno.
No hubo ni una sola mueca de dolor en su rostro.– Gracias
Fue lo único que dijo, después se fue y yo suspire.
Por lo menos volvieron y no muertos."Pov König"
Apenas salí de ahí toque mi pecho, el aire estaba faltando, me sentía asfixiado.
Jamás había estado tan cerca de una chica. Ni siquiera he tenido algún tipo de rose o toque femenino.
Es tan extraño, sus manos son muy suaves, sus toques lo eran aún más y la forma en la que me hablo para preguntar si dolía.
¿Estaba preocupada?
¿Por que se preocuparía por mi?
No entiendo este sentimiento reconfortante que tengo en el pecho luego de sus cuidados.
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Schau mich an
Fanfiction"Temo no volver a verte nunca mas" - Por favor, no me dejes...