𝙁𝙧𝙚𝙮𝙙𝙖 𝙋𝙤𝙩𝙩𝙚𝙧 [✓]

𝐍𝐔𝐄𝐕𝐄

HARRY APARECIÓ CON LOS DOS CUERPOS Y LOS PROFESORES SE ACERCARON AL ESCUCHAR UN LLANTO.
Lo primero que notaron fue a Cedric boca abajo con su vestimenta llena de sangre y herida con los ojos cerrados y después vieron como Harry lloraba abrazando a su hermana colocándola con cuidado su cabeza entre sus piernas y acariciando su pelo y acomodandolo a un lado para verla bien y ella abriera los ojos. En el estado que se encontraban pensaron lo peor. Pero al ver que Cedric respiraba y solo estaba desmayado se calmaron.

–NO!–Grito con miedo Harry al notar como lo separaban del cuerpo de su hermana inconsciente–  Freyda!–grito su nombre y extendiendo sus brazos para atraparla o ella lo escuchara.

Harry se sentía terrible, no pudo cuidar a su hermana y lo peor, es que vio como la torturaban frente a sus ojos, cada gritó de horror que lanzaba su hermana, era una puñalada en todo el cuerpo. Se sentía la peor persona del mundo al no defenderla por estar ocupado atacando a otro mortifago y se sentía el peor hermano. Ella siempre lo defendía y ella no tenía quien haga lo mismo por ella. Por eso lloraba desconsolado sosteniendo el cuerpo de su hermana viendo sus lastimadura y heridas abiertas. Se arriesgo por él, casi muriendo y él no hizo nada...

–Por favor no, no me saquen a mí hermana,  lo pido por favor profesor. No me separen de ella–pidio con apuro tratando de soltarse de Moody pero este lo arrastraba y se lo llevó –

Los profesores se llevaron a Freyda y Cedric a la enfermería. Se preguntaban...

¿Qué diablos había pasado?

Pero ahora no era momento de hacer preguntas a Harry, cuando esté mejor, él mismo iría a decirles. Aunque el director tenía una sospecha pero se mantenía tranquilo.

¿Cómo podía estar tan tranquilo allí? Si casi mueren tres estudiantes!!!

***

Cedric y Freyda se encontraban en una de las camillas, uno a lado del otro siendo curados y con vendas.  Cedric fue el primer en despertar y cuando se iba a sentar, sintió una punzada en todo su pecho y cuerpo, tenía una remera blanca ahora pero se estaba notando que se volvía carmesí. La herida que tuvo en el laberinto al enfrentarse fue grave por esa especie desconocida que tenía garras. Se sentó diciendo maldiciones por el gran dolor que sentía y su rostro tenía curitas al igual que sus brazos y algunas partes de su cuerpo.

Se sobresalto al recordar algo.

FREYDA.

aún no podía procesar que casi tuvo su propia muerte viéndola con sus ojos y Freyda lo halla salvado de milagro, aún no podía creer que ella lo había salvado. No creía que un chico solamente puede ayudar o salvar a una chica, el colegio y sus amigos eran un poco machistas, pero él no se consideraba de aquella forma. Tenía suerte de que había conocido a algunas personas que pensaran igual que él. Capaz en algún futuro los hombres no sean tan machistas y la mujer pueda también tomar sus decisiones y ayudar a los hombres.
La verdad que valoraba todo lo que hizo por ella y ahora la cuidaría con su vida, si es que sería una oportunidad de cuidarla no se arrepentía de usar su vida para que ella esté bien.