𝕋ℕ 𝕎𝕙𝕚𝕤𝕡𝕖𝕣𝕤 ℂ𝕝𝕒𝕨𝕥𝕙𝕠𝕣𝕟𝕖|| Hunter x TN

~𝕝𝕒 𝕧𝕚𝕤𝕚𝕥𝕒 𝕒 𝔼𝕕𝕒~

TN ya tenía nueve, y echaba mucho de menos a su madre. Evidentemente, se seguían hablando por cuervo, pero no era lo mismo que en persona.

─Oye Raine..─

─¿Que pasa peque?─

─Mañana es tu día libre, ¿verdad?─

─Sí, ¿por? ¿Quieres hacer algo en especial?─

─Podríamos..¿visitar a mamá..?─

Raine se lo pensó un poco, pero terminó sonriendo. ─Te lo prometí, ya va tocando.─

Últimamente el emperador estaba más concentrado en conseguir palismanes que en los rebeldes, por lo cual en definitiva era el momento perfecto.

TN no sabía cómo iba a conseguir dormir de la emoción.

A la mañana siguiente se despertó bastante temprano, se puso uno de los vestidos que Darius le había comprado, era de color morado con estrellas negras.

─¡¡Raine, Raine, Raine, Raine, despiertaa!!─ Gritaba la niña emocionada mientras trataba de despertarlo saltando en la cama.

El adulto se despertó sin muchas ganas y medio dormido, pero TN tenía razón, era mejor salir temprano y no ser vistos.

Tras un largo viaje llegaron al claro desde donde se llegaba a la casa de Eda, pero justo cuando veía la casa, ambos chocaron con una barrera invisible.

Eda salió cabreada y despeinada. ─Nuuunca entraréis malditos guard-─ Calló al ver quienes eran y bajó la barrera para que pasaran y luego la volvió a subir. Se peinó de forma rápida, al ver a Raine y se sonrojó un poco.

─¡MAMÁÁÁÁÁ!─ Gritó TN emocionada corriendo a abrazarla.

King, que solía dormir hasta tarde, despertó tras semejante grito y corrió a la puerta. ─¡TN!─

─¡KING!─

También se abrazaron.

Todos entraron y se sentaron en el salón.

Raine estaba sobre un sillón peinando el largo pelo de Eda, la cual estaba en el suelo con un cojín.

TN y King estaban hablando muy emocionadamente sobre todo a la vez, les encantaba haberse reencontrado.

─¿Que tal te va con la maldición?─ Preguntó Raine algo preocupado.

─Tranquilo, la sé mantener a raya. ¿Y a vosotros qué tal os va?─

─Bastante bien, ahora TN hasta tiene un tío.─ Dijo entre risas.

─¿Quién?─

─¿Sabes el jefe del aquelarre de los abominables? Darius.─

─Ya decía yo que tú no le habías comprado el vestido a la niña.─ Dijo con una risa.

Raine fingió ofenderse pero terminó sonriendo también.

Definitivamente, ellos eran la personificación del amor.

Fue una mañana bastante divertida, cocinaron todos juntos algo desastroso y terminaron comieron en calma.
Tras comer, TN y King se fueron a jugar por cualquier rincón de la casa mientras que los adultos se quedaron en el salón.

─Eda, me gustaría hablar contigo un tema..─ Dijo Raine algo nervioso.

─Mh.─ Respondió en señal de que prosiguiera.

─¿Qué te parecería apuntar a TN a Hexside..?─

Para su sorpresa, Eda sonrió. ─Me parece bien, siempre y cuando no haya ataduras con las asignaturas. Pero yo no la puedo inscribir, tengo prohibida la entrada.─

─La inscribiré para que empiece el siguiente curso. Y si consigo que Darius firme también, seguro que la dejan hacer todas las asignaturas.─

─Vale.─ Le abrazó dejando a Raine algo sonrojade.

Ya iba siendo tarde y se tuvieron que volver al castillo.

─¿Como te ha parecido el día?─ Preguntó le adulto sin apartar la vista del frente para no chocarse con nada.

─¡Super guay! King va a montar un ejército para combatir el mal con sus peluches.─ Dijo tomándoselo muy en serio. ─¡Y me va a dejar ser la segunda al mando!─ Dijo con emoción.

─Que bien. Yo te tengo una sorpresa, pero la verás el mes que viene, para el monstruo nuevo.─

─¡Ahhhhh! Ahora me has dejado con las dudaaas. ¡No se valee!─ Dijo cruzándose de brazos y apartando la cabeza infantilmente.

Ese día se fueron a dormir pronto tras tal viaje.