"LE AGRADEZCO A LOS CIELOS EN LO ALTO POR HABERTE CONOCIDO, ESTABA SOLO, NO HABÍA AMOR EN MI VIDA, TENÍA MIEDO DE LA VIDA, Y TÚ LLEGASTE A TIEMPO".-Michael Jackson.
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Kelly fumaba más de lo habitual, y eso preocupo a sus amigos.
La razón que le provocaba ansiedad a Kelly, era la reciente ruptura con Renata, su novia. Tuvieron una gran discusión bastante intensa a diferencia de las que ya habian tenido tiempo atras, todo había comenzado por celos de parte de ambos.
Kelly quería y ansiaba tenerla con él, ir a buscarla y perdirle perdón, decirle que la amaba, pero él tenía un gran orgullo al igual que ella.
―Kelly, vamos amigo, levanta tu trasero y vamos a un bar.
―Olvidenlo, yo estoy más que bien aquí.
―¿Bien? ¿Enserio?, tú tienes todo menos estar bien.
―Vamos, Kelly, has algo por ti amigo, tan siquiera buscala o has algo.
―Olvidalo, Tracii, Kelly tiene más orgullo que todos nosotros juntos, así que no creo que se digne a buscar a Renata.―Dijo Phil mirando a Kelly con los brazos cruzados sobre su pecho.
[...]
Renata bebía una taza de cafe que recién había preparado, quería estar tranquila y que nada ni nadie la molestara, pero al parecer su deseo no sería escuchado, pues alguien había tocado la puerta de su departamento.
Al abrir la puerta, pudo ver a un Kelly sentado en el suelo con la cabeza abajo.
―¿Kelly?.―Llamó Renata y esté levantó la cabeza para mirarla con los ojos entrecerrados.
―Hola preciosa.―Dijo Kelly con un tono de voz algo raro, era obvio que estaba ebrio.
―Con un demonio, Kelly ¿Qué haces aquí y en éste estado de embriaguez?.―Cuestiono Renata pero Kelly no contestó.―Vamos, levantate.
La castaña ayudo a Kelly para que se pusiera de pie con algo de dificultad.
―¿Quién e..res t..tu?.
―Hay no juegues Kelly.
Renata cerró la puerta de la entrada y se encaminó hasta su recámara ayudando a Kelly a caminar cuidadosamente.
Al estar en la habitación dejo caer a Kelly sobre su cama.
―Agh, te odio idiota.―Se quejó Renata y seguido de esto se cento al lado de Kelly sobre la cama.―¿Cómo es que apesar de todo no puedo odiarte, amor?.
Renata se recosto en la cama y se acostó sobre el pecho de Kelly, con la mirada hacía arriba mirandolo.
―Te amo, y no creo que eso pueda cambiar porque estoy tan enamorada de ti.
―Bueno...yo digo lo mismo.
Renata se quedó congelada al escuchar la voz de Kelly.
