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✦❀༄ ✧• . · • . · • . · • . · • . · • . ·✦ ❀༄ ✧---¡Buenas! Sí viniste. ---Brinco del susto al escucharlo en la puerta, estaba con la espalda recargada en la pared. ---Bienvenido, mi superior. ---Da un reverencia sin borrar aquella estúpida sonrisa.
Agh... Como odiaba que me llamara así, ganas de golpear esa cara no me faltan. ---Tenía... curiosidad... ---Lo dejé pasar por ésta vez, ya van mil veces que le digo mi desagrado ante esa etiqueta y sigue sin entender. ---Por cierto, gracias otra vez por el obsequio, es muy amable al invitarme a su taller. ---Doy una mirada a mi nuevo palillo inteligente, hace unos días cuando rechazaron su invento en aquella reunión y me regaló no he parado de usarlo, es demasiado útil.
---Meh, si soy honesto, no creí que vinieras. ---Ríe tiernamente extendiendo su sonrisa de perlas. A veces no entiendo cómo xuxas me pone nervioso éste sujeto en varias ocasiones. ---Ven, te doy un tur. ---Me dirijo a él quién caminaba en dirección a un brazo metálico junto a varias cajitas pequeñas. ---¡TA DA! Está en progreso todavía, tiene varios defectos, sigo sin descifrar cuáles son. ¿Su utilidad? Cada botón de éste brazo inteligente tendrá guardado una pequeña cajita y esas cajitas guardarán cualquier objeto, no importa el tamaño. ---
Apego aún más los ojos hacía el brazo metálico completamente asombrado. ---¡No te pases! ¿De cualquier tamaño? Ehm... No sé... ¿Una litera de cuatro camas? ---Asiente con la cabeza mostrando la cajita, con cuidado le da un pequeño apretón leve, aquel pequeñín objetivo comienza a convertirse en un suéter.
---Algunas masas no son compatibles con el brazo inteligente, ojalá lo arregle pronto, hasta eso sigo creando más cajitas. ---
Vuelve a transformar el suéter en una cajita para después ofrecermela. ---Es increíble... ésto podría revolucionar el mundo. ---Admiro a detalle el objeto.
Alza los hombros dándome la espalda. ---Lo haría... si me dieran la oportunidad, probablemente no sea la gran vaina. ---No puedo evitar dedicarme aprovechar éste oportunidad de observar los rasgos de guerra los cuales lleva en su piel a penas noto su distracción conmigo. Lentamente, con tan solo conforme a ver su cuello, recorro la extremidad de su brazo hasta llegar a su mano fuerte sujetando un martillo seguramente creado por él mismo. Ecuador posee varias quemaduras, daños leves en su cuerpo ya con cicatrices, aquello le pasó hace muchos años en la cuarta guerra mundial.
Recuerdo que yo nunca participé en aquel tiempo, ni siquiera para ofrecer recursos básicos, si tan solo pudiera retroceder el tiempo... escogería ayudarlo.
Suelto un suspiro concentrándome en la cajita. Aquel artefacto de verdad es ingenioso. ---¿Por qué no pruebas crear tu propia mercancía? ---Exclamo aquella pregunta, no obtuve respuesta. Sin previo aviso, apenas giro mi cabeza para buscarlo, me lo encuentro extremadamente cerca, invadiendo todo mi espacio personal, exterminando con la distancia, rostros exageradamente juntos. ---¡¡AAAHHH!! ---Torpe, doy varios golpes nerviosos al aire hasta darle a un objeto.---¡Ayayay! Tranquilo mijin, se que estoy feo pero no grites. ---
Agarro mi pecho con el corazón sobre la mano, mi respiración es agitada y corta a la vez, mis piernas hacían su mejor intento de mantenerse y no caer por los constantes temblores en mi cuerpo. ---¡¡N-no- v-vu-vue-l-vas a- acer-ca-r-te a-sí!! ---Reclamo retrocediendo ardiendo como una flama.
Acaricia su mejilla soltando una risa diminuta. ---Eres adorable cuando te pones así. ---Agito la cabeza varias veces negando aceptar esa afirmación dicha por él, me han dicho muchas cosas de odio o respeto, pero nunca que soy adorable. ---Como sea, ¿Cómo voy hacer mi propia mercancía? Necesito la ayuda de al menos cinco supervisores. Ya sea económicamente, en recursos, propaganda, mano de obra, revisiones por si hago un mal cálculo, será muy difícil que lo hago yo solo. ---
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•⏳ Bucle ⏳• ⟨ CountryHumans EcPa ⟩
Teen FictionEl sonido de su voz me es conocido. Cada tacto que hace con mi piel me trae recuerdos de los cuales nunca he tenido. Me basta escuchar por un segundo su risa de felicidad para acelerar brevemente mi corazón, deseoso de más. Me da miedo pensar cuánto...