15

4.9K 320 100
                                    

Que cagón. Mauro seguía en aquella posición, haciendo como si yo no le hubiera cuestionado nada.

—¿escucharon? — Preguntó Mica.— el coordinador va a venir a presentarse.

—¿en serio?— Preguntó Ari. —¡ay que emoción! no veo la hora de estar ya en bariloche.

Ariana y Mica se sentaron en frente mío, y me sentí traicionada. Después de acordé que Mauro estaba recostado al lado mío y se me pasó.

una vez que todos estuviéramos en nuestros salones, un chico de unos aproximadamente veintitrés años, estaba parado al lado de la Directora.

Que bueno que está...

todos mis compañeros se empezaron a reír, menos Mauro, que me miró con una ceja alzada.

—Gracias.— respondió el chico.

La puta madre, pensé en voz alta.

—Buenos días chicos... mi nombre es Mariano, me pueden decir Nano, Marian, como quieran.— se encogió de hombros.— Tengo Veintitrés años y Voy a ser su coordinador principal en este viaje, espero que nos llevemos bien, ¿ya les explicaron más o menos cómo va a ser?

Mientras mis compañeros le hacían preguntas al coordinador, yo no podía dejar de Mirarlo, la primera vez que un varón me parece tan atractivo. Después del pelotudo de Mauro, obvio.

—Mara... ¿viste lo lindo que es?— Mica rió, mientras se daba la vuelta, junto con Ari.

—No tanto como mi Monzón, pero si, es lindo.— opinó mi mejor amiga.— y fachero.

—Encima no tiene una edad muy lejana a la nuestra.— reí.

—A mi no me parece tan fachero.— Mauro se encogió de hombros.

—No sé, yo le doy.— volví a opinar. Al pedo porque cada vez que hablo mis compañeros se callan, mandándome al frente.

—Otra vez gracias.— Mariano me sonrió.— repito, las noches de Boliche van a ser por temática, pueden llegar a ser, Bizarra, Argentina, disfraces, blanco y negro, y colegial. No sabemos en qué orden, seguramente allá en Bariloche les digamos.

Me encontraba con Ari y Mica, comprando algunas cosas que nos faltaban para el viaje

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Me encontraba con Ari y Mica, comprando algunas cosas que nos faltaban para el viaje.

—¿Decís que esto me quedará bien?— Mica mostró un body de Argentina.

—Es lo más horroroso que vi en mi vida.— opiné humildemente.

Ari asintió.

—con la remera vamos a estar bien.

Después de comprar unos pares de labiales y brillitos, nos fuimos a tomar un helado.

— Quiero cojer.— acotó mica.— mi meta es cojer las seis noches.

—La mía es cojerme a monzon en una montaña.— agregó Ari.

—La mía es no quebrar.— le pasé la lengua a mi cucurucho

—Apunta más alto amiga.— Mica rió.

Quiero, pero no lo veo capaz, ojalá me cojiera a Mauro, pero conociéndolo, lo veo difícil.

—Ya está viniendo el uber.— Ariana le metió lo que le quedaba de helado en la boca y caminamos hacia la salida del shopping.

—Mira la fuente, ¿pedimos un deseo?— Mica saco unas monedas de su mochila.— es creer o reventar.

mi mejor amiga y yo asentimos, ¿qué vamos a perder?

cada una agarró una moneda y pedimos un deseo en silencio, primero Ari, después Mica y por último, yo.

»que todo lo mío venga a mí.«

¿pensaron que iba a desear algo de Mauro? los amarres no son lo mío.

al subirnos al uber, nos dejó a cada una en su respectiva casa, al llegar saludé a mi mamá y subí a mi pieza a cambiarme así le muestro lo que me compré.

—¿en serio vas a usar eso para la bizarra?— me pregunta mientras se toma un mate.— no es muy... ¿raro?

—esa es la idea ma, que sea raro.— me miré al espejo.

—En mis tiempos lo bizarro era ponerse un bóxer y una tanga arriba.— se cebó otro.

—y en los míos es ser mas creativa.— me saqué lo que tenía puesto y me puse mi ropa normal. — ya está eso es todo.

—Muy buen gusto tenes hija, en la ropa.— aclaró.— porque en los hombres...

—Salí a vos.— le sonreí.

guardé todo en sus respectivas bolsas y me fui a mi pieza.

dejé todo por ahí y me tiré a mi cama, era hora de mi dosis de tres horas mirando tiktoks.

Al agarrar mi celu, tenía una llamada perdida, era de Mauro.

Pendejo de mierda otra vez me acordé de su existencia y lo mucho que me boludea y me hace sentir miserable.

Mauro
últ.vez a las 16:34hs.

necesitabas algo??

si, puedo ir a tu casa?

no.

abrí tiktok y me puse a mirar videos de coreanos comiendo pollo crocante. Inservible, se piensa que voy a estar a su disposición.

al parecer me quedé dormida, ya que mi pieza estaba totalmente oscura, y no se escuchaba a mi mamá dando vueltas.

mire la hora y eran casi las diez, mierda si que tenía sueño. También tenía otras llamadas perdidas de mauro pero eso no era importante ahora.

me paré a cerrar la ventana y una piedra golpeó contra mi teta izquierda.

—uy perdón.— se disculpa Mauro, desde abajo.

—¿te quisiste hacer el romántico?

—No, era para tu cara, no para tus nenas.

casi me río, pero me acordé que es un pendejo sin responsabilidad afectiva, así que me la aguanté.

—¿qué querías?— le pregunté.

—mi mamá se enojó conmigo y me dijo que no aparezca hasta el lunes.— habló.

—¿y?— me encogí de hombros.

—¿puedo quedarme en tu casa?— preguntó.

—no.— negué.

—¡obvio que si!— la voz de mi mamá se hizo presente en la ventana de abajo, su pieza.

primero Ariana, ahora mi mamá... qué traicioneras que son.

🧘🏻‍♀️🧘🏻‍♀️

alguien que haya ido a bariloche me habla🙏🏻 porq yo NO FUI

❝woman.❞ dukiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora