Inspirado en un poema de Lord Byron con el mismo título.
**•̩̩͙✩•̩̩͙*˚Así es, no volveremos a vagar tan tarde en la noche, aunque el corazón siga amando y la luna conserve el mismo brillo.˚*•̩̩͙✩•̩̩͙*˚*
-¿Quieres decir que no me amas lo suficiente como para quedarte a mi lado? -preguntaste al bicolor.
Era de noche. Había una luna llena en el cielo y ambos habían quedado de verse en el parque para charlar sobre su relación.
-No sé cómo explicarlo -contestó ruborizado -. Es extraño. A veces tengo tantas ganas de estar contigo y a veces solo deseo alejarme.
-Eres tan raro. Tu personalidad es casi idéntica a tu don.
-Lo lamento, pero siento que si me quedo voy a enloquecer. En el fondo de mi corazón, yo te amo, pero no con la intensidad necesaria para pasar el resto de mi vida junto a ti.
**•̩̩͙✩•̩̩͙*˚ Pues la espada gasta su vaina, y el alma desgasta el pecho, y el corazón debe detenerse a respirar, y aún el amor debe descansar.
˚*•̩̩͙✩•̩̩͙*˚*-Siendo así… -agregaste con una voz temblorosa- acepto la ruptura. Solo quiero que sepas que lo di todo para sacar nuestro noviazgo adelante.
-Muy bien. Agradezco todos tus esfuerzos. El problema aquí fui yo, así que por favor, no te sientas culpable.
**•̩̩͙✩•̩̩͙*˚Aunque la noche fue hecha para amar, y demasiado pronto vuelven los días, aun así no volveremos a vagar a la luz de la luna.˚*•̩̩͙✩•̩̩͙*˚*
Ambos quedaron en silencio hasta que tú rompiste en llanto. Shoto te tomó con ternura entre sus brazos e intentaba consolarte. Te aferrabas aún más a él; deseabas que nunca se apartaran el uno del otro.
Por tu cabeza pasaban uno por uno, todos los bellos recuerdos de amor, un amor frío y cálido. Un amor que nunca iba a regresar.