𝐔 𝐍 𝐎

4.1K 166 3
                                    

Son las 9:15 de la mañana y me encuentro en la cocina preparando el desayuno favorito a mi pequeño demonio, hoy es su cumpleaños número 3. No puedo creer que mi niño ya tenga 3, me acuerdo todavía de sus primeras semanas de vida.

Termino de hacer los panqueques y le pongo un poco más de maple de lo normal. Pongo 3 velas de color verde y me dirijo a la habitación donde esta Malcom dormido.

-Happy birthday to you, Happy birthday to you, Happy birthday dear Malcom, Happy birthay to you- Entre cantando.

Malcom se levanto de la cama y yendo a la esquina es esta para esperarme, me acerqué a él y le enseñe el plato para que pudiera ver su desayuno pastel.

-Pide un deseo y después sopla amor- El pequeño hizo lo que le pedí, cerro sus ojitos y después soplo las velas- ¿Qué has pedido cielo?

-No poder decir ma-ma, es secreto- Dijo mi hijo mientras me quitaba el plato para poder comer el contenido.

Le pedí que comiera en la sala para poder limpiar el cuarto, muy obediente fue y se sentó en el sillón mientras veía su programa favorito. Aproveché que estaba tranquilo para poder limpiar la casa.

Metí a bañar al niño para que estuviera listo para la sorpresa que le tenía, estaba segura que lo volverá loco. Me ha pedido tantas veces esto que perdí la cuenta, pero por problemas financieros no podía cumplir el deseo de mi bebé hasta ahora.

Me bañe yo también para alistarme y estar lista para estar a tiempo en el lugar, me puse unos moms jeans, mis tenis más cómodos y una blusa blanca para que combinara con mi calzado. Al pequeño Malcom le puse su atuendo favorito que es el uniforme de Barca, su equipo de futbol favorito.

Cuando se lo compre le iba a poner su nombre y el número 4, pero el quería que dijera Piqué y el número que tenía este. Él decía que le recordaba mucho al abuelo en sus mejores tiempos, y la verdad es que sí. Gerard le daba un aire a mi padre cuando era joven, más que nada en sus ojos.

Pedí un taxi para ir primero a comer al lugar favorito de mi hijo, tome mi bolso con todo lo que necesita Malcom, ya saben, otro cambio y uno que otro juguete para que se distraiga al momento de tener que esperar.

Tome a mi bebé y salí porque el taxi ya había llegado, subimos y le dije ¨Al McDonald's de Sants-Badal por favor¨. El conductor solo asintió y manejo hasta donde le pedí que nos llevará, Malcom seguía adormilado, así que no tuvo ni idea de a donde lo llevaba.

Llegamos y le pague al del taxi, tome en brazos a el pequeño demonio y me baje del lugar.

-Amor, hemos llegado. Despierta- Intente que él abriera sus ojitos para que viera a donde lo traje.

El niño de a poco abrió sus ojos acoplando la vista y ver en donde se encontraba, al ver la enorme M que estaba sobre nosotros abrió muchísimo los ojos y la boca.

-¡Hamburguesas!- Exclamo él.

Tomo de mi mano y corrió dentro del restaurante de comida rápida, ambos nos formamos para poder ordenar, al tocarnos pedí una cajita feliz y una double cheeseburger con dos refrescos.

Nos fuimos a sentar a una mesa libre, mi niño y yo comenzamos a comer. Una vez que terminamos me fije en la hora, decidí que era de irnos a la gran sorpresa.

-Malcom ¿estás listo para la gran sorpresa?- Hice énfasis en la palabra ¨gran¨.

El asintió muy rápido, lo tome de la mano y salí del lugar con mi hijo. Fuimos a pie ya que el lugar a donde íbamos no estaba tan lejos del McDonald's. En el trayecto al lugar Malcom y yo platicábamos de distintitas cosas, al ¨platicamos¨ me refiero a que hablaba y el escucha asentía y/o negaba.

Creo que eso de venir caminando fue mala idea, era más de lo que pensaba, en el gps no marcaba tanto, al llegar vi que ya había mucha gente formada. Maldecí un poco al ver la fila, debí llegar antes para encontrar menos gente.

Mi pequeño y yo estuvimos formados 20 minutos y la fila todavía no avanzaba, Malcom estaba jugando con muñequito de Piqué. Todo ahí comenzaron a gritar como locos, provocando que mi hijo se asustará y me abrazara, yo lo cargue para que no se asustará.

La gente apuntaba a unos camiones que se acercaban, le pregunté a una señora que estaba a lado que es lo que estaba pasando, ella me dijo que en esos camiones venían los jugadores.

-Mira amor- Le dije a Malcom apuntando a los camiones- Ahí viene Piqué, probablemente te pueda autografiar tu jersey cielo.

El pequeño bajo de mis brazos y comenzó a saltar de la emoción, esa cara que tenía no la cambiaba por nada, mi hijo era feliz, por lo que yo también lo era.

Los jugadores empezaron a bajar de los camiones, todos gritaban demasiado. Yo nuevamente cargué a mi hijo para que pudiera ver a todos los jugadores, ellos se acercaban a firmar y tomarse fotos antes de entrar al estadios. Araujo, Dembélé y Ferrán firmaron la playera de mi pequeño.

Mi hijo siguió saludando a todos, la mayoría se acercaba y chocaban el puño con el, Gerard se iba a acercar también, estaba segura. Pero la gente de alrededor se le dejaron ir, a lo que el tuvo que retroceder y de lejos le dijo adiós a Malcom.

Después de unos momentos más de espera por fin pudimos entrar, había ahorrado durante todo un año para traer a Malcom al Spotify Camp Nou, donde jugaría su equipo favorito. Y no es todo, compre boletos para uno de los mejores asientos del lugar. Estaban situados a 3 filas de la cancha, ahorras sirvió.

Nos sentamos y esperamos a que el partido comenzara, mientras tanto veíamos a los chicos entrenar. Le tome un par de fotos para el recuerdo, se que cuando crezca me lo agradecerá.

 Le tome un par de fotos para el recuerdo, se que cuando crezca me lo agradecerá

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Una nueva historia, pero ahora con nuestro canario favorito. No olviden votar, los quiero<3

COINCIDENCIA|ᵖᵉᵈʳⁱDonde viven las historias. Descúbrelo ahora