81. || Rabbits Vers ||

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Atsushi había dejado a los conejitos en casa. Nadie lo sabía, solo ellos conocían su historia

Capu es una conejita de color negro, orejas caídas, con las puntas de sus orejas y patas de color blanco. Su nombre es Ryuko

Chino es un conejito de color blanco, orejas levantadas, con pequeñas líneas color negro. Su nombre es Atsu

POV CONEJITOS

Salió de su madriguera artificial, se estiró alegre.

— Ryu, ya se fueron los humanos

— Déjame dormir Atsu, prefiero cuando viene mami

— mami se fue, nos cuida mami dos, la que es esposa del ogro — se quejó, mientras se acostaba sobre de el - Ryu, levántate

— no quiero Atsu. Además, ese ogro como lo llamas, me cuida de ti, pervertido

— Ryu, no se puede evitar. Eres una conejita sexy

El blanquillo la miró, la coneja lo ignoraba así que se acercó y pisó sus orejas — ¡Que haces?!

— tengamos crías

— te operaron Atsu

— anda Ryuuu, hágamoslo

— No

Atsu comenzó a perseguir a Ryu, era un poco más difícil para ella por sus orejas. Andaban corriendo por toda su área dando vueltas. Cuando a lo lejos se escuchó.

— Jinko, ya llegue — hablo el azabache — maldición, aún no llega.

Fue a dejar sus cosas a su habitación mientras hablaba — voy a pedir algo de comida China; quizá quiera unos rollos y — vio el area de los conejos. Corrió rápidamente a ella y tomó a Ryuko — pequeña Capu ¿que te hace ese animal de Chino? — se quejó teniéndola entre sus brazos

— ¡Mi héroe! — dijo sonriente Ryu

— ¡DEVUÉLVEMELA GIGANTE APESTOSO! — gritaba Atsu quien usaba su pata para golpear el pie de Akutagawa

— alimaña del mal

Akutagawa terminó encerrando a Atsu mientras dejaba libre a Ryu.

Era cosa de conejos que solo Akutagawa podía resolver

— Ryu ya llegue — hablo el albino quien se quitaba sus botas — oh, Capu ¿que haces fuera de tu jaula?

— yo la libere, eres cruel al dejarlo con ese Chino

— Ryu, deben estar juntos son pareja

— no, no deben — pensó un segundo y sonrió; tomó a Atsushi de la cintura — ven aquí conejito, las parejas deben estar juntas

Atsushi se sonrojó — oye, no, estoy sucio y tengo hambre

— te daré de comer — mencionó llevándose al menor a la habitación

Atsu los miraba desde su jaula cruzando de brazos — y este por que si puede y yo no — se quejo

Ryuko disfrutaba de una rama de lechuga en la cocina, era la única tranquila de la casa.


...

¡Gracias por leer!

Our life is... ||Shin Soukoku||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora