Otoño, hermoso otoño que pinta el hermoso Yokohama de color amarillo, con días cálidos y en frías noches.Esa noche en especial era sin lugar a dudas una noche fría a pesar que apenas iniciaba el otoño, Atsushi estaba envuelto en sábanas mirando por la ventana. — ¿A que hora va a llegar? — se quejaba molesto. El azabache estaba en turno, lo que odiaba es que se había llevado la cartera, de castigo lo sentenció a ir por la despensa y otros artículos. Lo malo es que ya era tarde y el albino solo quería un abrazo.
Para sorpresa de muchos, no tenían alguna frazada para el frío, y Atsushi estaba temblando por sus pijamas delgadas.
Estaba envuelto en sabana cuando escucho algo chocar con el cristal, se levantó aún con sabana envuelta y se asomó recibiendo el golpe de una piedra en la frente — Jinko — le grito en un tono de escondite y preocupadoAtsushi volvió a asomarse con una herida en la frente — ¿que haces en el primer piso? — gritó entre susurros
— Quería hacer algo romántico
Atsushi comenzó a reír, — me encanto — respondió alegre
El azabache uso a Rashomon, justo en la ventana, Atsushi sonrió — ¿eres un príncipe o un ladrón?
— por ti... el príncipe de los ladrones
Atsushi había vuelto a reír alegre, el azabache entró a la casa con las bolsas, fue a la sala para dejar todo y el albino lo siguió en una imitación de E.T pues seguía con las sábanas encima. Mientras el mayor sacaba las cosas de las bolsas — ¿comienza a darte frío?
— si, la habitación es fría
— bueno, si, vivimos en un último piso
— ¿compraremos cobertores?
— te dejare la tarjeta, ve mañana de compras, elige unos calientitos, escuche que este invierno será fuerte
— compraré jarabe para la tos de una vez
El albino ayudó al azabache a sacar la despensa, la acomodaron juntos aunque el mafioso llevaba ya una intención, no dejaba de apretar los glúteos del albino cada que tenía oportunidad, o robarle un beso así significara asustarlo, incluso dejó caer una taza.
Atsushi acomodaba el cereal arriba del refrigerador cuando el azabache se pegó a su espalda y tomó el vientre del menor — te tengo tantas ganas
— hasta el cereal se dio cuenta — mencionó el albino divertido. — toma un baño y te espero en la cama
— si me baño perderé las ganas
— oh, ¿mi cuerpo calienta menos que un baño?
— Iré a tomar ese baño y te veo en la cama
El mafioso fue al baño, era la única forma que tenía Atsushi de hacerlo bañar todos los días. Fue a la habitación, seguía con frío, solo esperaba que el mafioso arreglara la calefacción rápido. Justo mientras pensaba en ello, apareció, no era de extrañar que sus baños fueran rápidos. Lo único que cambio fue su toque.
En cuanto el azabache tocó los brazos del albino para besarlo este sintió un gran escalofrío. Akutagawa de por si tenía manos frías y esa noche no era la excepción, en realidad, estaban heladasAún así, el beso continuo, terminaron encima de la cama mientras el beso se intensificaba, el azabache tocó sus mejillas, haciendo a Atsushi sentir más frío aún pudo soportarlo, pero llegó a su límite cuando tocó su pecho — Ryu, Ryu detente
— ¿que pasa?
— es que estás muy frío
— ¿tanto que no me dejas tocarte?
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Our life is... ||Shin Soukoku||
Fanfiction"historias de amor, historias de codicia, historias de alegría, fantasía y más, es nuestra vida, es nuestro deseo" Historias cortas, historias largas y como dice arriba, de amor, tragedia, fantasía, deseo, desamor e ilusión, todo unido en un mismo...