Un juego descontrolado [Completa] +18

♟️10: Sintiendo el fuego ♟️

Isabella Victoria Morgan

Era hoy, lo volvería a ver y recorriendo la ansiedad por todo mí cuerpo.

Esa mañana hice la rutina con mis niños. Por suerte estaban mejor. La pasaron muy mal ayer cuando fuimos al cementerio y ahora solo quiero volver para ver la carta que le habían escrito, pero me negué cuando supe que me dolería leer a mí.

Los lleve al jardín con una sonrisa, tratando de ignorar de como nos habíamos sentido ayer.
Jamás en mí vida sentí ese dolor tan fuerte, ver a mí hijo llorar por su padre hizo que mí corazón se partiera más de lo que estaba, sentí miedo al verlo así de mal. Sarah había estado mal, pero no lloró aún así me partieron el alma. Ellos hablaron como estuviera aquí con nosotros, esperando una respuesta que no iba a llegar.

Ahora me encontraba en el trabajo firmando papeles y escuchando Jennifer hablar sobre el problemas que teníamos con la construcciónes.

-Son muy pocos. Y los españoles piden más de ellos para adelantarnos

-Joder, no entienden que tengo a otros trabajando - susurro agarrándome la cabeza estresada - diles que los espero en la oficina a las.... - miro la hora el celular - ...a las dos, si no llegan me iré. Dile eso

-Okey

-Gracias por decirme

-Es mi trabajo

-Lo sé, pero gracias. Ayudas mucho en serio

-Me halaga, Señorita Morgan

-Ve - señalo moviendo mi mano para que se vaya - que a la dos tengo esa reunión y ya me estoy volviendo loca

-Okey - ríe cerrando la puerta detrás de ella

Me quedo sola firmando y acomodando los papeles. No paro de pensar que en un rato lo veré. Lo bueno de ser jefa que puedo terminar antes, después de la reunión iré a verlo.

Lo único que me da miedo es sentir algo por Sombra, no lo conozco para nada, solo follamos sacándonos las ganas que tenemos encima. Sin embargo sigo teniendo miedo, se que tengo que darme una oportunidad al amor, pero se me hace imposible por qué todavía mi corazón sigue amando a Alexander, porque más allá que no este más a mí lado sigo sintiendo ese amor, locura, felicidad, enojo, desesperacion. Era una sola persona que me hacía sentir un conjunto de emociones.

Pasaron horas hasta que se hicieron la dos, ya estaban al frente mío sentados en cada silla que había. Los miraba sería, sin ningúna pizca de sentimiento o educación.

-¿Quieren café? - pregunta Jenna antes de cerrar la puerta

-No, gracias - contestan

-Yo si - sonrío hacia ella para después clavar la vista a los españoles

-Ahora de lo traigo

-Gracias - respondo todavía mirándolos a ellos. Escucho como la puerta se cierra detrás de mis acompañantes - Bueno, ahora que estamos solos quiero que me comuniquen a mi lo que pasa con la construcción

-Queremos más personas construyendo. Se está haciendo un infierno y ya casi se está pasando el mes, Señorita Morgan - me explica el jefe de la compañía García

-Señor, lo entiendo. Pero entiéndame tu a mí - le digo con cansancio, estaba harta de estos señores - tengo a la mitad de mis trabajadores construyendo para el edificio que usted quiere. Los otro los tengo haciendo diferentes cosas, lo entiendo perfectamente, pero necesito que tengan paciencia

-Confiamos en ustedes

-Eso no viene al caso - respondí tajante - si ustedes vienen devuelta a quejarse por algo tendré que romper el contrato y es lo que menos queremos ¿ O si quieren que lo haga?