My daughter's nanny (Saida G!P)

Capítulo 21

—¿Quieres dar un paseo?—pregunto cuando hace rato terminamos el desayuno, ella asiente feliz y yo la tomo de la mano.

Caminamos mucho tiempo, disfrutando de descubrir pequeños detalles, nuestros temores, sueños, anhelos, pensamientos, todo. Sonriendo en todo momento, lástima que es nuestro último día, ya que mañana tenemos que regresar a nuestra realidad. Pero si ella está conmigo no me importa. Extraño mucho a mi hija, sonrío al pensar que me absorberá con preguntas cuando le diga que le pedí matrimonio a Dahyun, sé que eso la hará realmente feliz, ella la adora y Dahyun a ella, las tres mujeres de mi vida, con mi madre. Espero que está felicidad siga durando como hasta ahora.

Pov Dahyun

—Sana—mi voz hace que se gire para mirarme.

—¿Sucede algo?—me mira preocupada y yo siento.

—Tengo miedo—le confieso nerviosa.

—¿Por qué princesa?—sus brazos me arropan y me deja un olor muy agradable.

—Tengo un presentimiento malo, es como si me anunciarán que algo malo vendrá. Tengo mucho miedo mi amor—la miro en el momento en que sus ojos se encuentran con los míos.

—No sabes lo sexy que se te escucha decir mi amor, eres tan especial—me abraza y avanzamos hasta el coche.

Los hermosos días que pasamos aquí, sin algo que voy a atesorar toda mi vida, Sana me ha hecho abrir mis alas y por sin volar, aún no puedo creer que ya no soy virgen, que me voy a casar. Miro mi dedo anular donde llevo ese hermoso anillo, es de oro blanco con pequeños diamantes adornándolo y haciendo un hermoso corazón con ellos. Avanzamos y abre la puerta del auto para mí.

—Gracias—ella me guiña un ojo antes de que yo entre y me ponga el cinturón de seguridad.

—Vamos allá—anima Sana antes de poner el auto en marcha. Pongo música para relajar el ambiente y la voz de Ed Sheeran, se escucha en la radio. Tarareo la canción hasta que siento el sueño vencerme.

.....

—Dahyun—siento como alguien mueve suavemente mi hombro—Dahyunnie, hermosa, despierta—gruño en protesta, pero al final me despierto, unos hermosos ojos avellana me miran con amor.

—¿Llegamos?—me estiro y suelto un bostezo.

—Sí, vamos—toma mi mano y luego la suelta para bajar del coche, rodearlo y pasarme su mano la cual tomo gustosa, entrelaza nuestros dedos y caminamos a la entrada.

Sana abre la puerta y lo primero que veo saltar en el aire es un hermoso cabello muy conocido para mí. Sullyoon se lanza a los brazos de Sana mientras sonría feliz. Sin pensarlo se lanza a mis brazos.

—¡Dahyun!—grita feliz—te extrañé—la abrazo fuerte.

—Yo también princesa—respondo feliz.

—Qué bueno que ya llegaron—Yubin aparece en nuestro campo de visión.

—Hola madre—Sana se acerca a ella y la abraza y luego besa su mejilla.

—Hola hija.

—Yubin—saludo abrazándola y ella a mí.

—Hermosa—una joven entra a la sala junto con un niño pequeño—Sana, mira quién ha venido a visitarnos—Sana se sorprende cuando ve al niño.

—¿Chan?—pregunta desconcertada. El pequeño, ahora llamado Chan tiene un hermoso cabello obscuro, ojos azules, pero es más pequeño que Sullyoon, parece un angelito.

—Que hermoso niño—de mis ojos debe de salir corazones en este momento.

—Eso no es cierto—miro a Sana indignada.

—Pedazo de inteligencia—mi boca se abre del asombro al escuchar al pequeño llamar a Sana de aquella manera.

—Pequeño mocoso—gruñe molesta.

—Yubin, ¿qué sucede?—pregunto al mirar cómo se retan ambos con la mirada. Pero una carcajada brota de mis labios al ver a Sana discutir con un niño de algunos 4 o 5 años.

—Chan es primo de Sana, no sé en qué momento empezó toda esa rivalidad que se tienen, pero se odian y Sana actúa como una bebé discutiendo con él, esto ya es algo normal en ellos—termina de contar.

—Ya veo—respondo distraída y me restriego los ojos cuando los siento muy pesados y molestos.

—¡Oh por Dios!—el grito de Yubin me hace mirarla, pero ella me mira a mí, una parte especial, mi dedo anular, donde llevo el anillo.