Dulce Confianza

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-Mencion de apuestas
-Alcholismo
-mención de sexo oral forzado
-fluff
-nakamaship
-amor platónico

Las personas llenaban todo el lugar, gritos y risas en todas partes, las voces de los comerciantes haciendo propaganda de sus productos convinandose con la de los civiles que tenían amenas conversaciones entre ellos o los atendedores, la música ro...

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Las personas llenaban todo el lugar, gritos y risas en todas partes, las voces de los comerciantes haciendo propaganda de sus productos convinandose con la de los civiles que tenían amenas conversaciones entre ellos o los atendedores, la música rompía sus tímpanos animando más el área y locales pocos debidos se llenaban hasta el tope.

En cierta cabaña una pequeña pero poderosa tripulación bebía y bailaba con alegría, el alcohol iba de aquí a allá, competencias y apuestas, solo diversión de la más pura y pegajosa.

Todos divididos en sus cosas, unos dormían pacíficamente por el alcohol, otros eran rodeados de bellas mujeres que buscaban sacarles dinero, unos comían, otros apostaban y otros se habían ido para relajarse de la fiesta.

Se podría decir que en todo el ajetreo el más conciente era Sanji, escuchando hablar a las chicas que lo rodeaban, disfrutando de la dulce sensación de los pechos femeninos restregarse en su cuerpo, sus voces suaves y seductoras, llevando control del consumo de licor, como cocinero conocía lo dañino que era, e inconscientemente evitaba extenderlo.

Sabía a ciencia cierta que probablemente (si no seguramente) Luffy estaba pulcramente limpio de alcohol, el menor siempre negándose a la bebida por su amargo y ardiente sabor en su delgada garganta, pero el chico era tonto y nunca pensaba las cosas, ser prudente no estaba en su diccionario y llevar el control estaba en manos del rubio con su capitán exaltado por las fuentes emociones alegres.

Mirando brevemente al hombre no puede evitar poner los ojos en blanco, obviamente Luffy estaba más lívido, pero ni aún así era más conciente que un Sanji con un par de copas, el pecho del antes mesero se sintió cálido, Luffy era un sol sociable, sentado en la barra hablando con un montón de borrachos mientras se llenaba la boca de comida que Nami tendría que pagar en la mañana.

Por el rabillo del ojo pudo ver a Usopp celebrar cuando su apuesta fue certera y ganó dinero, ignorando al robot noqueado en su hombro, las chicas se habían ido, cargando a un reno dormido, con la festiva noche acompañándolas entre sonrisas sin algo para asegurarse de que no les pase nada, Brook estaba inconsciente a su lado con los huesos de su rostro sonrojado por las chicas y las bebidas, Zoro había salido del bar para pelear con unos borrachos.

Por ello era el único consciente de su alrededor,  ni siquiera Usopp que tampoco bebía casi, estaba en buen estado, pero el hombre no era alguien de las apuestas, por lo que dejarse arrastrar ahí por Franky y divertirse era una clara señal de que su mente estaba abrumada por el licor.

Sanji río ignorando su alrededor, feliz, de oír a la chica que sobaba sus abdominales al aire llenando su mente de halagos y arrogancia y sus pulmones llenarse de humo cancerígeno.

Que idiota era.

Que idiota era

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¡𝓤𝓷 𝓣𝓻𝓪𝓰𝓸 𝓟𝓪𝓻𝓪 𝓥𝓲𝓿𝓲𝓻!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora