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Guillermo se fue a hacer el café y a servir las dos medialunas, volvió, me lo sirvió y se fue a atender a más gente.

Mientras tomaba mi café dudaba en si mandarle un mensaje a Iván o no, pero decidí que si.

Iván ❤
Hola Iván:
¿De qué querías hablar anoche?:

Supuse que estaba dormido así que me iba a contestar más al rato, o eso creía.

Le pagué a Guillermo y me fui del restaurante, era una mañana fresca así que solo me fui a caminar un rato mientras escuchaba música.

A los minutos sonó mi celular, era Iván.

Iván ❤
Hola Iván:
¿De qué querías hablar anoche?:
:Hola T/n
:¿Podes venir a mi casa para hablar?
Pásame la ubi así voy:
:(ubicación en tiempo real)
Tomo un taxi y voy:
:Gracias, acá te espero

La verdad es que no se de que quería hablar, pero bueno, no me hacía nada mal ir a su casa y hablar con el un rato.

Tome un taxi y en unos 10 minutos llegue a su casa, toque timbre.

-T/n, pasa- me dio un beso en la mejilla y se hizo a un lado,yo pase, sonreí al ver el SetUp en el que hacía stream casi siempre -Sentate, bueno mira- suspiró- quería hablarte de lo de anoche-
-¿Para eso me hiciste venir? No quiero hablar de eso yo-
-Pero yo sí y lo vamos a hablar, o por lo menos déjame hablar a mi ¿Si?- asentí -bueno la cosa es así, tu amiga Vero es muy piola, pero yo en serio quería estar con vos, ella se encimaba mucho a mi y yo traté de ser piola para sacármela de encima, no la iba a tratar mal por el hecho de que es tu mejor amiga, pero yo te fui a ver a vos, dale eu, perdóname, en este poco tiempo que nos conocimos, que fue hace 4 días, me hiciste sentir tan especial como nadie, de verdad T/n,no te cambiaría por nada en el mundo- Sus palabras realmente me conmovieron, no podía pensar en otra cosa que el, solo el, lo amo demasiado y lo único que se me ocurrió fue acercarme a él y unir nuestros labios.

Fue un beso realmente esperado por parte de los dos, se sentían nuestros deseos, fue tierno y desesperado a la vez, cuando nos quedamos sin aliento, nos separamos.

-Iván yo...- me interrumpió.
-No me digas nada, espere demasiado ese beso- sonrío y me volvió a besar.

Así estuvimos todo el rato, el se veía demasiado emocionado y feliz, así que me invitó a quedarme a almorzar en su casa. Y Verónica, pues, digamos que se puede arreglar sola.

Eran las 12:25 y estábamos cocinando, estábamos haciendo fideos caseros con tuco. Al terminar de cocinar limpiamos el desastre que habíamos hecho por que nos pusimos a jugar.

En la hora de la comida solo nos mirábamos con demasiado lujo, no dijimos ni una sola palabra, lo cual, no era incómodo para nada.

Pasado el rato lavamos los trastes y nos sentamos en el sillón y me llego una llamada.

-¿Hola?... ¿Vero?¿Qué pasa?... Estoy en casa de Iván ¿Que necesitas?... No, yo ya almorcé acá, come vos... Dale, nos vemos- corte la llamada.
-¿Qué quería?- Dijo Iván curioso.
-Me preguntó si iba a comer con ella y cuando le dije que estaba con vos cambió la voz como a más decepcionada- reí un poco, pues no quería que Verónica interrumpiera mi día con Iván.

Pasamos todo el día boludeando y jodiendonos, jugando y riéndonos de todo, estábamos en nuestro mundo, ninguno de los dos quería que terminara ese día, pero lamentablemente así fue.

-Dale T/n, quédate hasta a las 12 así soy el primero en saludarte-
Dijo Iván.
-Es que no quiero dejar sola a Verónica, vino desde Santa Fe solamente para venir a mi cumple- dije mientras estábamos en el sillón, el me rodeaba con su brazos en mis hombros y yo lo abrazaba por la cintura mientras tenía mi cabeza en su pecho.
-Para ¿Vos también sos de Santa Fe?-
-Obvio, de Santo Tomé lñ¿Por qué?- No se por que me preguntaba esto, como fan se que Spreen era de Santa Fe pero no se de que parte exactamente.
-¿Osea que vos eras la minita que se sentaba atrás mío y me escribía cosas en el cuello?-
-Jodeme, ¿posta fuimos compañeros?- estaba sorprendida, nunca pensé que el chico que sentaba adelante mío y no me dejaba ver el pizarrón fue el mismísimo Spreen, nunca le presté atención a ese pequeño niño.
-¿Pero como terminaste acá? Digo, eras de Santa Fe y estás acá en Buenos Aires- Iván levantó una ceja.
-Tuve problemas con mi familia y quería irme de mi casa a toda costa, así que me vine acá- agache la cabeza. Mi familia, mi familia es una mierda.
-Ey, tranquila, acá vas a estar bien, más si estás a mi lado- me abrazo y sonrío. En sus brazos me sentía segura, no quería que este día terminara -Faltan diez minutos para las doce, ¿segura que te querés ir?-
-Nah, mejor me quedo acá- dije mientras seguía abrazando a Ivan.

Iván me dejó de abrazar y se fue hasta su piesa. Eran las 23:59 y el todavía no volvía, así que de curiosa fui a buscarlo. Entre a su piesa.

-Iván, ¿en dónde estás?-
-Aca- estaba Iván con un ramo de flores y un una bolsa de regalo -Feliz cumpleaños T/n- ya eran as 00:00. Iván me abrazo y me dio un tierno y cálido besó.
-Gracias- Agarre el ramo de flores y la bolsa.
-bueno abrilo, aunque no se si te va a gustar, pero pensé que iba a ser tu estilo- Abri la bolsa y había un buzo grande de color gris.
-Es hermoso- acerque mi nariz a la flores y sentí su perfume -Que lindo aroma- miré a Iván -Gracias, no me lo esperaba-
-Yo tampoco, recién me lo dio Rodri por la ventana de la pieza, lo mandé a buscarlo hace unos 20 minutos- se río nervioso.
-¿Esta acá?-
-Esta en el auto afuera-
-hacelo entrar pobre, esta re frío afuera-
-¿Tanto te preocupa?-
-Me preocupa todo el mundo, así soy yo- sonreí.
-Bueno, hay lo llamo- saco su celular del bolsillo y lo llamo -Boludo entra, T/n te está esperando para que la saludes- dijo riendo -Bueno dale- corto la llamada.
-¿Que dijo?-
-ya viene y también te trae un regalo- me miró.

Fuimos al living y llegó Rodrigo, me dio el regalo que era una caja chiquita.

-Nah amigo, te vas al carajo- Era una caja de condones con una notita. Yo me cagaba de la risa.
-Y si, nadie sabe lo que puede pasar hoy o mañana, por qué ya me entere de que se re comieron la boca- dijo mirando a Iván.
-Para amigo, te enteras de todo-
-Por eso es lindo tener un amigo que te lo cuenta todo-
-Sos un buchon vos- Mire a Iván riéndome.
-Y si obvio, estaba re emocionado a alguien se lo tenía que contar- dijo riéndose.
-Bueno, te la perdono- reí -Che, tengo ganas de tomar algo, ¿vamos a comprar?-
-Vamos- dijeron los dos al mismo tiempo.

Rodrigo nos llevó en su auto, compramos un Fernet, Smirnoff y Gancia. Hace mucho que no tomaba, ya lo necesitaba. De camino a la casa de Iván compramos comida, mucha.

-Che¿No les parece mucho?- Dijo Iván.
-Tranqui, acá conmigo no va a sobrar nada- dije yo.

Pasaron las horas y tomábamos el alcohol como si fuera agua, ya estábamos demasiado borrachos, cada cosa que hacíamos o decíamos nos daba mucha gracia.

-Amigo, menos mal que compramos comida por que estoy recagada de hambre- intente pararme pero me caí y me doblé la muñeca, quería llorar. Con los chicos nos empezamos a cagar de la risa.
-Ahora no le vas a poder hacer la paja a Iván-Dijo Rodrigo, se fue al carajo.
-Sos un hijo de puta, te fuiste al asco- dijo Iván.
-Bueno, yo me voy, por que tengo sueño- dije un poco incómoda.
-Para, ¿a dónde vas a ir? Son las 4 de la mañana es re tarde, quédate acá, mañana te vas- Dijo Iván.
-Bueno, me quedo-

Iván me prestó su cama, le presto un colchón a Rodrigo y el durmió en el sillón, si, sillón.

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1403 palabras.

-Solo estamos locos- || Iván Buhajeruk/Spreen.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora