Karma

•Capítulo 13•

•No todos pueden apagar todo•

Keiran.

Espero noticias de Acasia en el hospital, la hemorragia fue mas grave de lo que esperaba. Así que tuve que traerla de emergencia al hospital, menti diciendo que la habían asaltado mientras yo compraba algo.

Londres es conocido por la falta de confianza hacia los policias así que un asalto a una mujer va a pasar desapercibido muy rápido.

—Keiran—,Simón se me acerca vestido de médico.

—Amigo.

—Me enteré por una enfermera ¿ya salió de cirugia? —niego—. Carajo, espero que tanto ella como el bebé sobrevivan—tenso mi mandíbula— ¿se lo dijiste?

—Iba a decírselo, quería salir a caminar y fuimos a un parque, solo fui a comprar algo y... —hago mi mejor actuación sollozando, Simón me da un suave apreton en mi hombro—. La vi llena de sangre.

—¿Familiares de Acasia Davren?

Simón me da un empujón.

—Soy su pareja ¿cómo está?

—La señorita esta bien, logramos controlar la hemorragia pero, el feto fue expulsado por su cuerpo. El arma blanca logró penetrar el saco amniótico provocando el aborto —Simón niega decepcionado—. La llevaremos a una habitación pronto.

—Gracias colega—agradece Simón, yo sonrió internamente. Ese niño no iba a nacer, estuviera o no formado no iba a permitirlo—. Amigo lo siento mucho de verdad.

—Sé que te emocionaste al saber que sería padre.

—¿Acasia esta embarazada?

Michael aparece detrás de nosotros, pero siento su presencia.

Ariella.

—¿Keiran?

—Estaba embarazada señor Román —mi amigo se encarga de contarles todo mientras la tensión se arrastra por mi cuerpo y por el de Ariella, puedo asegurarlo.

Los veo fingiendo estar afectado, Michael se traga todo pero la mujer vestida en azul y unos grandes lentes de sol, no.

—¿Acasia esta bien verdad?

—Si.

No digo nada, solo comparto mirada con Krimhilde, ella maldiciendo que haya fallado hace 5 años y yo deseando matarla justo ahora.

—¿Ella viene con usted señor Román?

Simón señala a Ariella provocando que Michael se tense.

—Es una conocida de Acasia, también de Keiran—maldito, la esta salvando de nuevo. Nada sorprendente.

Nada es sorpresa viniendo de Michael sobre Ariella.

•°•°•

La lámpara alumbra un poco la habitación, Acasia esta sedada aún. El doctor dijo que debió usar un sedante demasiado fuerte para que la operación no tuviera complicaciones, suspiro pensando en mi error «debí ser menos impulsivo» si hubiera hecho eso, no estaríamos aquí.

Pero no podía dejar que avanzara, que Acasia se ilusionara eso solo iba a hacer el problema mas grande.
Podía permitirle ofensas, intentos de humillación, hasta que me quisiera matar pero no que trajera al mundo a un niño con mi gen corriendo por sus venas.

Ese era el único limite que Acasia no iba a poder cruzar.

—Papá—susurra—. Papá no...

Papá, esa palabra.