♧ Capítulo 20 ♧

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● Luz Navideña ●

Acasia.

Pasaron los meses, lentamente. Y me encuentro ahora viendo cómo colocan un gran árbol navideño, esta decorado con mucho esfuerzo aunque la festividad no provoca nada en mi.

Todo eso murió con la niña de 4 años que le arrebataron a su padre, lo único que motivaba sus sueños.

—¿No te gusta?—su voz y sus manos apresan mi cuerpo—, de niña amabas la navidad.

—Lo has dicho, de niña y, por sino lo has notado—quito sus manos de mi cadera que se acercan peligrosamente a algo que no quiero que note.—, ya no soy una niña.

Salgo de la sala, chocando con nonna al llegar a las escaleras, ella lo sabe pero ha guardado muy bien el secreto, parece que no es el único que ha guardado.

—Debes moderar tu temperamento mi niña, puede hacerte daño y además, sólo alzas su ego—me acaricia—, eres mucho mas que esto.

Sopeso sus palabras, las analizo y obtengo el mensaje oculto de ellos.

—Gracias nonna.

—Siempre voy a estar para ti, mi niña—sonríe—, eres especial, eres el fin de una maldición.

Cuando cae en cuenta en lo que dijo, quiere arreglarlo pero ya es tarde.

—¿Qué?

—No me hagas caso, estoy delirando. Ya soy muy anciana.

Si no supiera su edad, no lo creería, no sé ve cómo la edad que tiene.

—Voy a supervisar la cena, nada tiene que cambiar, bueno, no todo.

Pasa por mi lado y yo me quedo frente a las escaleras, diviso esa pequeña diferencia en la pared cercana.

Mi As bajo la manga.

Comemos en un raro silencio cómodo, Keiran, nonna y yo. Carly esta de pie, cómo una buena criada.

El filete en termino medio me asquea al cortarlo y para no llamar tanto la atención de Keiran le ordeno a Carly que lo cocine un poco más. Desaparece en la cocina y Keiran me observa.

—Sabes que odio el termino medio—bebo agua—, es cómo comerte el animal recién salido del matadero.

—Estas muy cambiante en tu dieta ¿algo que deba saber?—mira intercalado entre nonna y yo.

—Yo no tengo nada que decir, desde que me salvo la vida nuestra confianza pareció esfumarse—nonna lo dice triste, ayudándome.

—Nunca me quedo con una dieta demasiado tiempo y mi paladar es muy especial, me decepciona que esos pequeños detalles se te hayan olvidado, esposo.

No habla mas, Carly regresa con mi filete mas cocinado y lo degusto complacida.

La cena acaba y vamos a la sala, el árbol alumbra todo con sus luces led de un bonito color. Bajo el ya están tres cajas envueltas, regalos que desconozco.

KarmaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora