Moonlight

CAPÍTULO 7

*Jake Adams*
*Viernes 10 de septiembre*
*12:15 p.m.*

De todas las cosas que pensé que sería capaz de hacer, no pensé que podría usar la vulnerabilidad de alguien en su contra, para beneficiarme de ello.

Sigo tratando de huir de cualquier situación social, cada vez que tengo la oportunidad. Así que es algo irónico hacer lo que estoy a punto de hacer.

Isaac y yo estamos en unos de los recesos, como de costumbre. Ambos nos hemos unido bastante durante un plazo de semanas, y se me hace una persona bastante agradable. Tiene defectos como cualquiera... pero eso no lo hace una mala persona. Sería mejor si tratara de no esforzarse todo el tiempo en... pretender.

Solo eso.

—....  Y luego me dijo que era un completo imbécil, ¡¡Como si yo tuviera la culpa!! No tengo la culpa de nada. —Rugía Isaac. Llevaba más de 10 minutos quejándose sobre una pelea que tuvo Charlotte.

Quizás hubiera prestado atención a cada palabra que salía de su boca, si me hubiera importado. Eran palabras crueles, lo sé... es solo que mi mente desborda de otras preocupaciones, y no puedo solo decirle a Isaac que deje de hablar solo porque sus problemas no parecen importantes en este momentos.

En realidad, no lo hacen. Me interesa Isaac. Me interesan sus problemas. Es solo que... estoy fingiendo que me importan más de lo que deberían. Incluso siento algunos gestos demasiado sobreactuados. Pero por suerte, Isaac está demasiado concentrado en recrear la discusión con sus manos y gestos como para notar mi horrible actuación.

—Si, ajá, tal vez le dije que estaba loca, pero no es mentira. Es la puta verdad. Se está volviendo loca con esa rara obsesión que desarrolló con los Dankworth ¡Y se atreve a venir a venir a insultarme!

Me retuerzo las manos sobre mi regazo. Y entierro mis uñas en la carne de mis palmas. Su frustración de alguna manera parece pegarse a mi, pero hago todo lo que puedo para hacer que las palabras salgan, incluso cuando siento que se enrolla hacia mi garganta, sin intención de salir.

—Tengo una idea. —Digo, él se detiene y me observa con atención.

—Mierda... ni siquiera me di cuenta de que estaba hablando todo el tiempo. Perdón Jake....

—¡No, está bien! Supongo que estabas desahogándote.

Él asintió con pesar. Soltó un suspiro cansado.

—Por favor, dime qué idea tienes. 

Yo asiento.

—Tal vez deberías... —Carraspeo mi garganta y me trago el bulto que se ha instalado en medio de ella. —Deberíamos, —Corrijo. —salir. Deberíamos salir.

Isaac arruga las cejas.

—¿Qué? ¿A qué te refieres con "salir"? No se puede salir.

—Si, si, si... lo se. —Concedo. Isaac devuelve su vista hacia el frente. —Pero piénsalo, —Vuelve a poner su vista sobre mí, sin necesidad de ser curiosa, su mirada era más bien de confusión. — quizás si ella se da cuenta de que la estás pasando bien sin ella, y haciendo nuevas amistades... se sentirá mal.

Isaac produce una mueca, y por un miserable momento, siento que lo arruine.

—¿Y cómo haría que ella se enterara de todas maneras?

Suspiro.

—Redes sociales. —Le explico.

—Ah...

El silencio se prolonga hasta el punto de querer interrumpirlo, y suponer que Isaac ya se olvidó del tema. Pero el habla de nuevo:

—¿Qué tienes en mente? —Pregunta, con algo de indecisión.