El miedo de perderte

Capítulo 23

El celular sonó repetidas veces, con los ojos entrecerrados lo tomó y tenía mensajes de dos números diferentes, uno conocido pero el otro no sabía de quién era. Vio la hora y eran las 3:00 de la mañana, buscó a Jungkook, pero no lo encontró. Asustado ante su ausencia se levantó para buscarlo en el baño... tampoco estaba ahí. Se acomodó el cabello, se limpió el rostro y salió de la habitación. Todo estaba casi en silencio, las pocas personas que habían quedado estaban dormidas o lo bastantes ebrias como para poderle dar razón de su amigo. Jin estaba dormido junto con RM y Hobi no estaba por ningún lado.

Tomó nuevamente su celular y antes de ver los mensajes le llamó a Jungkook, llamó una, dos, tres veces, no había respuesta, nuevamente se sentía abandonado como las semanas anteriores, nuevamente el mismo sabor amargo y el hoyo en medio del pecho ante la ausencia de él. Caminó hacia la habitación, se sentó y abrió los mensajes.

Minho

Llegué bien a casa, gracias por todo hoy, la pasé de lo mejor

11:45 p.m.

Supongo que te estás divirtiendo, me alegro, te escribo más tarde

Cuídate y no tomes sin mí, te lo advertí.

12:30 a.m.

Quiero decirte algo importante ¿Nos vemos mañana?

¿Te parece bien a las 3:00 p.m.? Te invitaré a comer

1:00 a.m.

Me respondes cuando puedas ¿si?

1:15 a.m.

No se había dado cuenta de los mensajes. Le parecía buena idea salir, pero antes necesitaba ver a Jungkook y saber que todo estaba bien.

Mi TeTe

De acuerdo, nos vemos a las 3:00 ¿llego a tu casa?

Disculpa que no vi tus mensajes. También quiero hablar contigo

Estoy seguro que todo te saldrá bien con lo de tu libro,

deseo que puedas descansar.

Nos vemos otro rato.

Supuso que estaba dormido ya que no respondió los mensajes y su última hora de conexión había sido a la 1:30 de la mañana. Vio el numero desconocido y abrió el mensaje.

Número desconocido

Taehyungie no me bloquees, por favor cariño

Dame una oportunidad para hablar contigo.

Veámonos, sé que ha pasado mucho tiempo. Dejé que tuvieras tu espacio

Pero no lo soporto más. Por favor, aunque sea déjame hablar contigo.

Te quiero... Baekhyun

Otra vez él, pero de otro número. Se sintió lleno de resentimiento, no quería que lo contactara, ya no. No había nada que hablar, nada que le pudiera decir que resarciera el daño que le había causado. Ninguna razón o justificación de lo sucedido o de su ausencia durante todos esos meses. Creía que merecía una disculpa, pero consideraba que probablemente no podría creerle, así que tampoco serviría. Se armó de valor y respondió.

Mi amor Tae

¿Qué quieres Baek? ¿No te parece que es tarde ya?

Déjame en paz. Creí que, al no responderte y bloquearte,