La mañana recibió a San con fuertes lluvias y mal humor. El chico se levantó de la cama, pero un repentino dolor de cabeza lo hizo agarrarse de la cabeza con las manos y gemir suavemente. Parecía que incluso el latido del corazón desprendía un dolor punzante en las sienes, buscó a tientas con una mano el teléfono que tenía debajo de la almohada; tenía llamadas perdidas de Ian, Yuna y algún número desconocido.
San se rió entre dientes, Wooyoung debe haber pensado que se iba a escapar de la casa otra vez. Tirando el teléfono a un lado, el chico se recostó contra las almohadas, ni siquiera quería moverse. Pero el dolor de cabeza no lo dejaba en paz, y San decidió bajar a la cocina para tomar una pastilla.
Poniéndose la primera camiseta y sus pantalones de chándal favoritos, el pelirubio caminó hacia abajo, frotándose los ojos. Cuando llegó a la cocina, el chico dio un paso adelante y se detuvo en seco: Wooyoung estaba sentado en la mesa y durmiendo, con la cabeza apoyada en los brazos cruzados.
El rostro de Wooyoung yacía hacia la puerta, frunciendo el ceño en sueños y arrugando la nariz cómicamente. No se despertó ni siquiera cuando San entró con cautela en la cocina y se sirvió un poco de agua de una jarra.
San estaba a punto de irse, pero sin saber por qué, se detuvo a mirar al chico dormido.
Líneas suaves formaban su boca, piel bronceada, largas pestañas que ensombrecen, rubor en las mejillas, que solo complementaba las armonías en los suaves rasgos del rostro. El cabello le había crecido notablemente durante el último mes y se ha rizado en la coronilla. Ojos que ahora estaban cerrados... Ojos verdes moteados. Jung Wooyoung era realmente guapo... Demasiado guapo sinceramente.
San no entendía cómo tanta crueldad y odio se combinaban con una apariencia tan gentil. Wooyoung se movió un poco, murmurando algo en sueños, y San salió corriendo de la cocina al instante, cerrando con cuidado la puerta detrás de él.
Pensar que estuvo de pie, admirando a Wooyoung con mucha atención... Incluso pensar en ello era ridículo. Pero, a San no le hizo ninguna gracia, en el fondo de su alma comprendió que no le importaría un carajo todas las burlas y palabras insultantes de Wooyoung, si tan sólo... San borró esos pensamientos rápido, a él no le importaba un carajo el propio Wooyoung.
Habiendo subido a su habitación, el chico escuchó un pitido desde el costado de la cama, alguien lo llamaba. Agarró el teléfono y el chico respondió la llamada.
─¿San?.
─Sí.
─Te dignaste a levantar el teléfono. ─ La voz disgustada en el auricular pertenecía a Ian. ─He estado llamándote durante una hora.
─Fui a la cocina durante tres minutos. ¿Qué sucedió?
─¿Por qué tiene que pasar algo? Tal vez solo quería decirte que vamos a tener una fiesta y que estás invitado.
─Dios, Ian, ¿Otra fiesta? Las organizas todas las semanas.
─Es cierto, pero es la última semana de vacaciones, o para ser más precisos, los últimos días, por lo que sería una estupidez que nos quedáramos en casa el resto del fin de semana. Los padres de Hongjoong se van a Roma por una semana, ¡Y toda la casa está a nuestra disposición! Seonghwa prometió llamar a las chicas también, así que tú también puedes llamar a alguien. ¡Vamos, San, va a ser divertido! Todos los chicos geniales estarán allí, incluso los graduados. Además, nunca hemos ido a lo de Hongjoong y tiene una casa bastante grande.
─Dios. ─ Susurró San, frotándose la frente. ─Está bien, estoy de acuerdo... No quiero sentarme en casa y estar aburrido. Iré.
─¡Súper! Y, por cierto, te entiendo, con un hermano así también soñaría con escaparme a algún lado o ahogarme en el agua.
San se estremeció, casi dejando caer el teléfono de sus manos, Ian habría sabido lo cerca que estaba de la verdad.
─Ian, no hablemos de eso... Estaré allí, ¿De acuerdo? Ahora tengo que irme. Hasta la tarde.
San colgó antes de que Ian tuviera la oportunidad de responderle y se recostó en la cama. Sin pensarlo dos veces, el pelirubio escribió un mensaje.
San:
Hola, ¿algún plan para esta noche? 😊
Yuna:
Hola😊 No, estaré sola otra vez, tu gurú gay tiene una cita, y gracias a dios, no con la casa incluida.
San:
¿Cuántas citas van? Bueno, espero que Jongho se divierta. 😈 Mis amigos me invitaron a una fiesta, pero no quiero ir solo, ¿Puedes venir conmigo?
Yuna:
Pero ni siquiera conozco mucho a tus amigos 😐
San:
Pero conoces a las chicas, también estarán allí, y de todos modos, me debes este favor ya que me fui a un cita contigo
Yuna:
Oh, Dios mío, así es. Sabía que intentarías usar esto a tu favor
San:
¿Eso significa que sí?
Yuna:
¿Tengo elección?
San:
No
Yuna:
Está bien, iré contigo, pero no por mucho tiempo, Jongho y yo tenemos una llave para los dos.
San:
Super, iré por ti a las 21:00. 👍
Yuna:
Okay :).
♡. Desde ya mil gracias por leer, votar y comentar. ♡
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Red line ; woosan
Fanfic❝San estaba muy contento de que su madre, con quien no se comunicó durante mucho tiempo, había encontrado a su alma gemela. Sin embargo, no imaginó que junto con el nuevo padrastro, también recibiría a un hermanastro, que resultaría ser Wooyoung, el...
