Me estaba terminando de vestir luego de salir de la ducha a causa de una larga sesión de entrenamiento junto a Limario y Chaeng me llamó de forma cariñosa, así que salí del vestidor usando una licra y un top deportivo, a la vez que traía en mi mano izquierda un jersey celeste que aún no me ponía.
─Hola, preciosa. ─la saludé haciendo un puchero por lo tierna que se veía. Me senté a su lado y acaricié su melena rubia.
─Buenos días, mi amor... pero que hermosa vista me estás regalando está mañana... Estás muy guapa. ─paso sus manos por mis brazos desnudos en una caricia.
Que linda. ─¿Cómo amaneció la princesa de la casa? ─dije sobre sus labios y ella enredó sus brazos en mi cuello.
─Contenta... muy feliz. ─sonrió. ─Y con mucha hambre también. ─soltó una risita que me contagió al instante. Me pegó a sus labios y nos fundimos en un beso. No perdí el tiempo y mordí su labio inferior ocasionando que dejara escapar un jadeo. ─Me encanta como me besas. ─me incorporé sonriendo. ─Aún traes el cabello un poco húmedo... mmm y hueles delicioso. ─le guiñe un ojo.
─Para ti. ─sus mejillas enrojecieron. ─Aunque aún no he terminado de arreglarme del todo, amor. ─me levanté de la cama y me puse el jersey.
─Ahhh no... ─se quejó y la miré confundida.
─¿Qué pasó?
─Te cubriste... estabas tan sensual. ─bufó. ─Cubriste lo que más me gusta. ─mi abdomen, lo sé. Reí negando. ─Te hubieras quedado así para mí todo el día. ─dijo coqueta apretando el borde inferior de mí jersey.
─Me lo quitare entonces... aunque, no creó que me vea igual de profesional frente a Iseul. ─dije con sorna y se sentó inmediatamente. ─Será incómodo trabajar semidesnuda junto a ella.
─Kim Jisoo. ─regaño y solté una carcajada. ─No te atrevas. ─sentenció frunciendo el ceño.
─Jamás, amorcito. ─tome asiento a su lado una vez más, riendo bajo. ─Todo ésto es solamente tuyo. ─asintió indignada y comencé a besar su hombro derecho. ─¿Cómo está tu brazo? ¿Te duele mucho?
─Ya no duele demasiado. Estoy bien, mi amor. ─deje un besito ahí.
─Pediré que te suban algo delicioso para desayunar.
─Ahh, sí quiero, gracias... ─atrapó mis mejillas. ─¿Me acompañas, o ya desayunaste?
─Luego de entrenar junto a Lisa, desayuné, sí. ─hizo un mohín. ─No quería despertarte, amor. Estabas durmiendo profundamente. ─le di un piquito.
─Es que ahora me da más sueño y me siento más cansada también. ─dijo tierna frotando su barriguita.
─Oww cosita. ─le di otro piquito. ─Es normal... ─acaricié su vientre. ─Cada vez falta menos para tener a Haneul en nuestros brazos, está creciendo mucho por eso te sientes así, amor.
─Tengo tantas ganas de conocerla y de llenarla de besos. ─repose mi cabeza ahí con cuidado y ella comenzó acariciar mi cabello. ─Estoy muy ansiosa. ─tomé su mano izquierda y le di un par de besitos ahí.
Que lindos son estos pequeños momentos. Los atesoro mucho. Tocaron dos veces a la puerta, esa debía ser la familia Park. ─Pasen. ─respondí y la puerta se abrió.
─Buenos días... ─hizo una pausa. ─Oh. ¿Interrumpo? ─preguntó apenada.
─Hola, Bae. Claro que no, ven aquí. ─respondió Chaeng sonriendo, palmeando el lado libre de la cama y me puse de pie.
─Buenos días. ─saludé a Alice. ─Voy a bajar ya, amor. Estaré en la oficina. ─me agaché levemente acorralandola, poniendo una mano a cada lado de su cuerpo. ─Te amo. ─le di un pequeño beso.
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Gay Panic |Chaesoo| Editando.
RomanceEl amor es un hito de desastre que te eleva y te suelta haciéndote golpear muy fuerte. Ya estaba cansada de sufrir, y esperaba que tú fueras quien juntará los pedazos de mi alma. De verdad esperaba que fueras mi luz. ¿Tú y yo seremos felices?