Gay Panic |Chaesoo| Editando.

CAPÍTULO 49

─¿Como sigue tu hermana?

─Muy mal, solo que intenta poner su mejor cara por lo niños. ─suspire.

─Todo ésto es muy complicado. Aunque evidentemente creó que fue la arpía de Somi, según lo que me contaste, nunca ha superado a Lisa y además, sus padres, si es que se les puede llamar así, son unos inconscientes, por pensar en el dinero antes que en su propia hija, es increíble...

─Pienso lo mismo, pero hasta que no salgan los análisis de los vídeos de seguridad no tenemos nada, y no pienso exponer a mi hermana hasta no estar completamente segura, de la inocencia de Lisa.

─Tienes razón, lo mejor es asegurarse. Hmm. ─suspiró. ─Cada día es más difícil, él está creciendo mucho. Tranquilo cariño, ya pasó. ─menciono acariciando su vientre.

─Te dije que no era necesario que vinieras, debes descansar, ya es suficiente con que sigas yendo a la empresa.

─No voy a dejar sola a mi mejor amiga. Estoy bien, Jichu, esta algo inquieto, es todo.

─Eres tan terca. ─negué con la cabeza.

─Ahora que eres oficialmente una embajadora de Dior. ¿Me darás ropa gratis?

─No funciona así como crees...  ─reí.

─No me interesa, de todas formas, quiero ropa gratis. ─dijo con sorna. ─Rosé está tardando demasiado, pensé que sería la primera en llegar.

─Tenía un inconveniente en el estudio y aún tenemos 6 minutos antes de que nos llamen. ─me encogí de hombros.

─Ya veo, pues el "inconveniente" ha venido con ella y parece completamente reacio a dejarla marchar. ─rodó los ojos. ─Es ese idiota de nuevo.

─¿Qué? ─giré mi rostro y me hirvió la sangre. ─No puedo creerlo. ─dije molesta y me levante de golpe. 

─Intenta calmarte, por favor. ─susurro tomando mi mano.

─Hola, mi amor. ─se acercó a besarme y aparté mi rostro. ─¿Qué pasa? ─pregunto con tristeza. ─Cariño, no te molestes, tardamos más de lo normal y...

─¿Por qué estás con ese tipo? ─pregunté estoica.

─Él se ofreció a traerme, mi auto falló, llamé a Jin pero estaba muy lejos, es todo...

─Él no es el único que puede acompañarte, traerte o llevarte. ¿No tiene vida propia o qué? ─sentencie levantando la voz. Está situación era reincidente últimamente. Primero los horarios, luego las firmas y ahora que el auto se averió... No habían más opciones salvo, Lay. ¡Maldición!  ─Estoy harta. Si necesitas algo me tienes a mí, a Alice, a Hyeri, a Tzuyu... ¡A quien sea, menos a él! ─fruncí el ceño.

─Amor... no te pongas celosa. ─pidió y aparte su mano.

─¿Celos? ¿De verdad crees que es solo eso? ¡Quiere contigo! ¿Es tan difícil de ver? ─bufé y se encogió en su lugar. ─Sabes.

─Jichu. Ven un momento. ─me tomo del brazo y me jaló unos cuantos pasos lejos de Chae. ─Te entiendo, y sé que tienes razón en estar molesta. ─me miró a los ojos. ─Pero ahora mismo, no es el momento. Estás aquí por tu bebé. Recuérdalo. Respira. ─froto mi brazo. ─No le hables de esa forma, tú no eres así. No te dejes llevar, piensa en frío, por favor. 

─Tienes razón. ¡Es que siento que no puedo más con esto! Me supera, no te imaginas como detesto verla con él. ─exclamé e inhale profundo. ─Gracias por estar siempre conmigo. ─la abracé fuerte. ─Estoy frustrada, ésto tiene que cambiar de una vez, no puedo más...