Capítulo 6

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Wei wuxian se encontraba guiando a lan wangji por las profundidades de los túmulos funerarios, ya habían pasado la cueva donde wei wuxian antes vivía, aquel lugar donde ningún mortal se atrevería a pisar pues el resentimiento llegaba a ser muy denso y ahogaría a cualquiera. Lan wangji jamás había pisado las profundidades de los túmulos por la densidad y porque tampoco sabía si se podría salir vivo pues los cadáveres feroces abundaban en cantidades escalofriantes.

Wei wuxian estaba demasiado feliz de estar al lado de lan wangji. Habían pasado 3 años desde que no lo había visto, puedo darse cuenta que alcanzar la divinidad le asentaba demasiado a lan wangji, aunque si le preguntaras personalmente respondería que el lan siempre parecía un inmortal, un dios con belleza talento e inteligencia, la perfección en vida, la luz entre mortales, incluso antes de convertirse en un dios.

El wei nunca podría dejar de apreciar la belleza del lan, desde que despertó no pudo pensar en otra cosa que no sea lan wangji y a-yuan, se esforzó los dos años para hacerse un nombre con peso entre fantasmas, calamidades, dioses, inmortales y otros. Cualquier ser sabía de la existencia de wei wuxian, pero lo que no sabían era hasta donde llegaría su poder como calamidad. El único con aquel conocimiento fue hua cheng porque si bien muchos sabían que el poder de wei wuxian son las ilusiones y el controlar cadáveres o algunos fantasmas, hua cheng sabía que el poder de wei wuxian iba más allá de lo pensado, wei wuxian podía controlar fantasmas de cualquier rango e incluso podría controlar calamidades, claro que hua cheng era la excepción porque encontró una manera, además, wei wuxian jamás lo usaría en su contra. Por otro lado, Wei wuxian también pensaba que hua cheng era muy poderoso, su poder no tenía limites además del conocimiento que lluvia carmesí poseía era incomparable y el wei siempre tenía respeto por ello.

Wei ying –dijo lan wangji llamando la atención de wei wuxian quien salió de sus pensamientos y sonrió al lan pues ya se habían detenido.

Ah lan zhan ya hemos llegado –dijo wei wuxian alegremente, pero lan wangji lo miro interrogante pues habían parado en un muro enorme.

Lan wangji no pudo preguntar pues wei wuxian solo alzo la mano y la energía resentida brillo antes de que el muro se abriera como si de una puerta se tratara. Estaba confundido, la energía resentida se arremolinaba por lo que miro a wei wuxian, pero el wei tenía la mirada al frente, su rostro estaba serio como nunca antes lo había visto incluso en su época como el patriarca de yiling, su rostro estaba sin la sonrisa habitual que le había dado sin embargo el lan reconoció la suavidad en la mirada.

Lan wangji siguió la mirada del wei y se quedó sorprendido al ver muchos fantasmas y algunos cadáveres feroces que los miraban, por si fuera poco, el lugar no era aquellos túmulos sin vida, había luz, casas, un mercado y muchas más cosas, era una ciudad, aunque parecía que todavía estaban construyendo más casas, el lugar era simplemente fascinante, a lo lejos incluso pudo notar que había una gran mansión muy hermosa.

¡Nuestro señor ha vuelto!! –gritó un fantasma haciendo que lan wangji saliera de sus pensamientos

Oh mira ha traído a alguien!! ¿Quién será? –dijo otro y muchos otros lo siguieron

La pareja de nuestro señor, eso es obvio!! Mira lo hermoso que es!! Perfecto para nuestro amo –gritó un fantasma alegremente y todos empezaron a celebrar mientras lan wangji tenía las orejas y el rostro muy rojo sacando una carcajada al wei haciendo que todos los fantasmas, cadáveres o cualquier otro ser se callara pues jamás habían visto a su amo en tal alegría y con el rostro soñador como si de un niño se tratara.

Lan zhan, mira ya les has agradado, talvez en otro momento podamos venir a ver algunas tiendas –dijo wei wuxian suavemente y mirando al lan que tenía una mirada de sorpresa por lo hermosa que era la ciudad antes de asentir.

Mi Amado Hanguang-junDonde viven las historias. Descúbrelo ahora