Sayonara, Tora

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SAYONARA, TORA




Una gran explosión levanto a todos del campamento, Chuuya protegió a Dazai, Shibusawa los miro. Habían llegado las tres brujas del círculo. – Osamu Dazai – hablo Fyodor, la bruja morada. – cuanto tiempo

― Fyodor... - le llamo con un gran rencor en sus palabras

― Gogol, Sigma, busquen al príncipe

― Sobre mi cadáver – expreso Shibusawa y Fyodor sonrió

― Será un placer.

Kyouka mantenía una barrera con polvos de hada, Chuuya retenía a Gogol, mientras que los soldados batallaban con Sigma, eran simples humanos contra un brujo.

Por su lado, Dazai había usado su magia en un espejo, era poco, pero era algo. Pudo ver a Tora abrazado al príncipe – aún falta tiempo... - trago saliva – necesitamos tiempo. Solo un poco más

En la habitación, Akutagawa podía ver al tigre, era grande pero su grandeza hizo que no pudiera ver al príncipe, dudoso y sabiendo que el príncipe no hablaba bien se asomó para verlos y con ellos se sorprendió. Tora y el príncipe se estaban uniendo en aquel abrazo, parecía como si fuese absorbido – no, príncipe - le llamo preocupado, pero no pudo separarlos. Fue a las escaleras, pero también estaba cerrado – maldición. ¿Qué debo hacer? ¿Qué debo hacer? – se cuestiono

― Nada – escucho, aunque no vio a nadie, lo sabía, era ala voz de Dazai – asegúrate que termine todo y cuídalos bien.

Unos minutos después pudo escuchar mucho escandalo desde el techo, sabía que la guerra se había desatado en la parte alta pero su prioridad era Tora y el príncipe, cada vez se unían más y cada vez había menos de Tora. Apretó los puños sin entender lo que ocurría, pero sabía que debía dejar que aquello continuará su proceso.

Fue de un momento a otro, Tora comenzó a hacerse pequeño, tan pequeño que llego rápidamente a ser un cachorro, un gatito como Akutagawa lo vio días atrás, aquel gatito se sentó, lo miro y maulló. Burbujas doradas salieron de él dejando únicamente una estatua pequeña de tigre. Las lágrimas del soldado comenzaron a brotar sin poder contenerse, el felino se había vuelto un maravilloso aliado y un gran guerrero – Sayonara Tora...

Los ojos del príncipe se abrieron, color lila y dorado. 


...

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El príncipe perdido y el soldadoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora