Gran banquete

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Gran Banquete.



Una semana después, la bruja lila había sido aprisionado, la bruja azul, bruja roja, amarrilla y blanca ahora eran parte del reino, protegían del ahora rey Atsushi a toda costa.

Atsushi descansaba aquella tarde en su palacio, miraba documentos que dejo su padre cuando un cuervo llego a su ventana – Chuuya ¿Qué te trae a esta hora? – pregunto mientras el cuervo tomaba forma

― Dazai y los demás regresan – dijo alegre. – Higuchi y Akutagawa también

― Me alegra escucharlo, iré a recibirlos

Chuuya sonrió – mejor recibe a Akutagawa – dijo burlón. Atsushi se sonrojo

― Chuuya, silencio

Atsushi paso por las grandes puertas, los vio llegar en caravana, cuidaban del reino, los habitantes, las costumbres, del rey. Atsushi se inclinó alegre por verlos volver sanos, pasaron a las tiendas a curarse sus heridas y el albino fue tras ellos. Paso su largo camino viéndolos y hablando con Dazai y Oda sobre su cruzada. Sus ojos se desviaban a ver al azabache quien era curado del brazo. Dazai y Oda sonrieron, se levantaron – pero estamos bien

― Si su majestad, prosiga – mencionaron con un pequeño empujón

Atsushi arreglo su cabello mirando al azabache, esté le sonrió – Jinko, volvimos

― S-sí, bienvenido – le contesto

La enfermera sonrió apartándose y el albino se pudo acercar un poco más – te vez bien ¿duele?

― No, soy todo un soldado

― Capitán – le reprocho

― Si, si guardián real del rey Atsushi – dijo Akutagawa orgulloso y burlón hacia el joven rey - ¿quieres cenar hoy conmigo?

― ¿de-debería?

― Me ofendería si no

Atsushi sonrió – me encantaría... capitán Akutagawa.


Dos meses después, la cena se celebró con un gran banquete, pues ahora celebraban su compromiso, y la felicidad en el reino se quedó por siempre con todos reunidos y felices...




Fin


...

Lo sé, esta historia tuvo altos y bajos, pausas enormes y otras pequeñas, quiero recordar hace unos años cuando la hice para mi pequeño primo, ahora tiene 7 años, aquel niño de 4 añitos crecio y ya no le gustan estos cuentos, adaptarlo a ser un Shin Soukoku fue hermoso y algo lindo para recordar

Espero la disfrutarán y si la leen en un ratito podrá ser de gran ayuda para dormir.

Espero un día lo reconozcan en algun libro infantil, sería lindo.

¡Gracias por leer!

El príncipe perdido y el soldadoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora