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La alarma de celular de Sunoo sonaba por quinta vez esa mañana, con pereza tomó su teléfono que se encontraba a su lado en la mesita de noche con un ojo medio abierto y el otro cerrado, la apagó.

Volvió a cerrar ambos ojos para después abrazar la almohada a su lado y volver a acurrucarse entre las cobijas.

¿Qué día era?, ¿sábado? Si era sábado no debería sonar su alarma.... no debería ir trabajar...

Con pereza volvió a tomar su celular para checar la fecha...

Viernes... 7:50 am.

Todo aquel sueño que tenía desapareció al momento, estaba llegando tarde al trabajó.

En menos de 10 minutos ya estaba duchado y listo, bajó de una manera rápida las escaleras, en olor a comida llenaba sus fosas nasales, olía realmente delicioso.

— ¿No vas a desayunar? — Sunoo quien se encontraba tomando sus cosas de manera apresurada volteo a su llamado.

— No, perdón voy demasiado tarde — el pelinegro comenzó a poner su zapatos de manera rápida, mientras buscaba con la mirada las llaves de su auto.

— Ve con cuidado, igual ya casi me voy, toma te prepare el almuerzo — Sunoo asintió mientras depositaba un beso en los labios del contrario.

— Te amo Nini, te veo al rato — el rubio asintió para después despedirse de Sunoo.

Habían pasado aproximadamente 8 años desde que ambos se toparon en aquellos pasillos de la universidad, donde meses después comenzaron a salir.

Cuando ambos finalizaron la universidad decidieron mudarse juntos, llevaban 3 años viviendo juntos.

Y en tan solo unos meses más, llevarían  acabó la celebración de su matrimonio.

Cualquier persona que los viera se daría cuenta del gran e inmenso amor que emanaban ambos.

Una vez Sunoo llegó al hospital donde trabajaba como doctor, su secretaria anunció su primer cita del día.

Acomodo sus cosas para recibir a sus pacientes, un pequeño de 8 años con una fractura en la mano.

—  Adelante — anunció Sunoo cuando la puerta de su consultorio fue tocada, una mujer con dos niños entraba. — Buen día, tomen asiento por favor.

Los tres asintieron para sentarse en aquellas sillas.

— Buen día doctor — Saludaron los tres al mismo tiempo.

— ¿cuál es tu nombre pequeñito? — el nombrado quien portaba un yeso en su mano volteó.

— Jungwon, Yang Jungwon. — Sunoo asintió.

— ¿puedes decirme como pasó ésto?.

— Estábamos jugando y Jungwonie se cayó — el otro niño que acompañaba a los dos presentes, habló.

— Supongo que tu eres su hermano — el nombrado inmediatamente negó.

— No, Jungwonie es mi novio

— Jay!

Sunoo solo pudo reír ante aquellos niños, mientras la madre de Jungwon reía avergonzada.

— Lo siento doctor — Sunoo negó.

— No se preocupe — Sunoo giró si vista hacia Jungwon — 8 años tienes y ya tienes novio, sabes to a tu edad apenas conocía a mi hermano mayor, aunque el fue el primero en tener novio de nosotros, decía que por que era más guapo, pero obvio no, siempre fui yo el lindo — ambos pequeños rieron.


— Yo no tengo hermanos, solo a Jay

— Si, pero obvio yo soy el más guapo.

— Como digas Park.

— Wonieeee no te enojes.

Aquella linda escena hizo reír tanto a Sunoo como a la madre del menor, vaya que esos dos pequeños le recordaban mucho a Sunghoon y Jake, uno se enoja mientras el otro lo llena de besitos.

Al finalizar su jornada laboral, el pelinegro se dirigió a su casa, donde ya lo esperaba Ni-ki.

— Llegué — la luz de su cocina se encontraba encendida, camino hacia allá donde se encontró al menor cocinando.

— Oh, llegaste — Ni-ki bajo la intensidad del fuego para saludar de un lindo beso al mayor.

— Sabes, hoy tuve dos pacientes que me recordaron mucho a mi hermano y Jake.

— ¿Si?, ¿por qué?.

— Sabias que los niños de hoy en día a los 8 ya tienes novio, pues ellos lo eran, y uno de ellos decía que era el más guapo, pero el otro se enojaba y decía que no por que claramente el era el más lindo, y lo llenaba de besitos para que no estuviera enojado, y eso hacía exactamente ellos dos, era horrible por que yo era el que los veía cada día — Ni-ki rió ante la cara que hizo Sunoo al recordar esos momentos donde claramente se moría de la envidia. — aunque hoon decía que era el más guapo, se equivoca por que obvio yo era el más lindo de los dos, pero cuando yo lo decía me golpeaba con una almohada.

— Claro que tu eres el más lindo cariño — Sunoo asintió orgulloso — Pero no más que yo.

— Hey!

Ambos comenzaron una mini pelea donde terminó en una sesión de besos.

— Oye Nini — el pelinegro habló en medio del beso, recibiendo por respuesta un "hmm" por parte del rubio — Hay que tener un bebé.

Decir que Ni-ki casualidad se ahoga esta de más, por que incluso el aire le faltó.

— No somos muy jóvenes aún — Sunoo negó.

— Ya estamos bien en todos los sentidos, ambos tenemos un trabajo donde ganamos lo suficiente, casa propia, amor, y creo que eso sería lo único que faltaría.

— Per no podemos tener un bebé.

— No tonto, así no, podemos adoptar — el gran "Ahhh" que soltó el menor hizo reír a Sunoo.

— Bueno, pero debemos estar casados para eso, y aun faltan 6 meses para la boda.

— Bueno, entonces después de casarnos adoptemos un bebé

El rubio asintió para volver a besarlo.

— mientras podemos hacer uno — el rostro de Sunoo se coloco de un rojo total.

— Se va a quemar la comida.

— No, ya la apagué.

— Piensas en todo — ambos comenzaron de nuevo con la sesión de besos.

— Te amo Sun.

— También te amo Nini, eres como mi ángel, siempre me cuidas.

— Siempre te cuidaré, por que eres lo más importante para mí.

Al final ambos tuvieron lo que más querían, una persona que los amara sobre cualquier cosa, que los cuidará, que estuviera ahí para ellos, por que ambos se amaban con el alma, y ni cielo, más o tierra, podrían separarlos.

Por qué lo mejor que pudo sucederle a ambos, fue conocerse.













Llegamos al final del primer extra, se decidió que si se hará e extra Jakehoon wooooh

Espero les haya gustado.

Recuerden votar y comentar para actualización más pronta.

Lxs tqm <3

Los invito a leer la nueva historia, esta en mi perfil, es Jaywon.




Lili

Zona Fronteriza - Sunki -Donde viven las historias. Descúbrelo ahora