Capítulo 1: Mareas Conspirativas

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(Lucy)—¡Levy, lanza tus llamas, Hermana, dame algunos buffs!.

El grupo, se encontraba rodeados de fieras bestias blancas, llamadas lobos plateados.

Desde hace tiempo, estaban cazándolas con esmeró, pero mas y mas lobos aparecían, por cada dos que mataban. Hasta que llego un punto, en el que Bosque se tiño de blanco y lo único oible eran los amenazantes gruñidos de los lobos.

(Lucy)—Hermana, prepara tu magia sagrada de desinfección, estos perros tienen Riuba.

(Levy)—Eliz, ¿Que es Riuba?.

<<En simples palabras, Rabia>>

(Lucy)—¡¡Levy!!, ¡Alejate de los lobos, atacalos desde la distancia!.

Bellos trazos aparecían, por cada movimiento que hacia Lucy con su espada. No eran solo bellos sino que también precisos y mortales pues por cada trazo, caía la cabeza de un lobo.

Los lobos plateados, son tratados como montruso de rango D-, pero esto solo es porque atacan en manada, individualmente no son considerado un peligro para los aventureros, cayendo en la categoría de E-.

E incluso así, no poseen tantas habilidades como las Crías de Dragón Superior raza a la cual pertenece nuestro protagonista y ocupa el mismo rango, que los lobos plateados.

Pero esto no aplica aquí. La manada de lobos plateados es abismal, casi sin fin, y para rematar la situación, están contagiados con Riuba, por lo que no es recomendable para los aventureros que luchen cuerpo a cuerpo. A menos que tengan alguna habilidad, de resistencia a los cambios de estado.

(Zadiris)—Canta dios misericordioso, cura a tus hijos y condena la plaga que los afecta.

El canto de Zadiris muestra resultados inmediatos, sobre los lobos. La espuma que salía de sus bocas desaparece y la mirada perdida que poseían, recobra su brillo natural.

Su carga suicida, sin sentido, contra el trío, se ve frenada debido a su confusión. Era como si alguien los hubiera controlado, para que diecen sus vidas por alguna causa desconocida.

(Lucy)—Ha~ Ha~, Zadiris, si vuelven a atacar, lanza Barrera sobre ti. Ya no puedo asegurar, que podre protegerte.

Las jadeantes y adoloridas palabras de Lucy, hacen preocupar tanto a Zadiris como a Levy. Miran con nerviosismo hacia los lobos, hace tiempo terminaron la misión de cacería, pero como fueron rodeados sin previo avizo por estos. No han podido retirase.

Tras un breve período de tiempo con un incómodo silencio de fondo, los lobos comienzan su marcha devuelta al bosque. Y finalemte, el grupo deja caer los hombros, y las piernas en el suelo.

(Zadiris)—Ha~ ha ~, Oh, diosa de la tierra, brindanos tus fuerzas , a tus hijos que de ella carecen.

Así como cuando se encontraron Levy y ellas, por primera ves, en ese frondoso bosque. Una luz desconocida los rodea nuevamante, aliviando su fatiga y curando sus heridas.

(Zadiris)—Uf~, fue una aventura muy dificultosa , es gracioso que la hallamos tomado pensando que era fácil.

(Lucy)—Fiu~, ni me lo recuerdes, que estara causando tanto alborotó en este bosque.

(Zadiris)—Volvamos rápido al gremio, y contemoselo a Belia. Quizás sepa algo que desconocemos, o pasamos por alto.

Y comienza su caminata devuelta al gremio, la cual duro unas tres horas.

Reencarne En Otro Mundo, Como Un Dragón Donde viven las historias. Descúbrelo ahora