Los Dioses Del Averno [#2 Trilogía Herencias Peligrosas]

Capítulo 13

ATENEA

- Bael - grito a uno de los perros de mi hermano que viene corriendo y me tira al suelo para jugar conmigo

Mi hermano tiene tres pit bull, Paimon, Bael y Lilith, siempre le ha gustado todo lo relacionado con los demonios y por esa razón sus perros llevan nombres de tres de ellos sin contar que en Italia lo conocen como el demonio italiano. 

- Corre, cógela - le tiro la pelota y los otros dos demonios terminan de comer y se unen al juego 

Me pongo en una zona del jardín y sonrío preparándome para salir corriendo, miro a los demonios a mi lado y me encanta lo bien adiestrados qué están 

- Ya - grito y salgo corriendo, corren a mi lado y cuándo llego al árbol me siento riéndome cuándo empiezan a pasar la lengua por mi cara como si me estuvieran dando besos.

- Demonios - grita mi hermano y como si fueran otros corren hacia mi hermano y se sientan delante de él mientras se quedan mirándolo - a trabajar 

No es necesario que diga nada más para qué los perros caminen detrás de él que me mira y asiente antes de irse. 

En estos meses Romeo no me ha dejado ver ningún interrogatorio, según él aún no estoy preparada para eso. Camino hacia el aparcamiento de la mansión y cojo mi coche para irme a casa, necesito un descanso. 

Cuándo llego dejo las llaves en la entrada y me saco las deportivas para caminar hacia el baño y darme una ducha, me pongo el albornoz después de la ducha y me tiro en el sofá con una copa de vino, mi móvil suena en el sofá y miro el reloj de la pared, son las siete

Buenas tardes niña 

Buenas tardes guapo

Todos los días hablamos a la misma hora

¿Qué tal?

Nada nuevo, trabajando en lo qué mi hermano me deja 

No me creo que estés metida en toda esta mierda 

Ya no soy una niña

Para mí siempre lo serás

Ruedo los ojos, después de más de cinco años aún sigue viéndome como una niña 

Pues no

Lo qué tu digas bonita 

¿Cuándo piensas venir a Italia? 

Estoy en Rusia, tengo algunos problemas por aquí 

¿Necesitas hablar? 

No, estoy bien, solo qué tengo mucho trabajo

Está bien guapo

Gracias niña 

¿Por qué? 

Por todo

Sonrío como una niña y suspiro acomodándome en el sofá para seguir hablando con él de cualquier cosa que se nos va ocurriendo

En los cuatro meses que llevo de vuelta en Italia no nos hemos visto en ningún momento, mi hermano ha ido a Grecia un par de veces pero él no ha venido nada

A las diez me meto en cama y me quedo dormida después de mirar durante largos minutos el dibujo de la playa que tengo pegado en la pared.