Las crónicas de Eloshem: En busca de mi padre

Capítulo 10: La misión de Cody

Cody ahora tenía la misión de buscar la llave y regresar, él había decidido en tener la opción uno y la opción dos; la opción uno era seguir a alguien, la opción dos era buscar el lugar. Una cosa iba a llevar a la otra, si él no podía encontrarlo siguiendo a los demás, no hubiera otra opción que ir a buscar el lugar, aunque se tardaría un poco.

Para su buena suerte, halló un sujeto rápidamente y sin ser visto, lo siguió; debía de ser muy cauteloso y precavido, cualquier cosa lo podía delatar; debía ocultarse ocasionalmente cuando otro sujeto se aproximaba desde la dirección opuesta a la suya o si un sujeto salía de otro camino.

En el trayecto de su caminar, aprovechaba para inspeccionar y saber más a detalle sobre el mapa de la cueva, quería tener una salida rápida y sin dolor para que cuando Akil y Solarc salieran, no estuvieran dando vueltas. Luego de seguir al hombre por más de 20 minutos, llegó a una sala donde se reunían más hombres, entre ellos estaba el hombre que tenía la llave, el que tenía la bandana.

—Ahí estas, muy bien; solo tengo que esperar que estés dormido o distraído para quitarte las llaves

Las llaves las tenía en el cinturón, colgando en la parte derecha. Cody tuvo que esperar unos minutos escondido para que el sujeto se moviera de la multitud y se fuera a un lugar menos ruidoso y con menos presencias.

Mientras estaba esperando, notó algo que lo paralizó del miedo; una criatura la cual su especie y hasta la especie Akil le teme, una serpiente. Él al verla asomándose cerca de donde estaba escondido se petrificó. La serpiente era negra, grande y completamente apta para almorzárselo.

Para su mala suerte, el sujeto se disponía a irse de donde estaba y se alejaba rapidamente. Ante la situación desastrosa, no tuvo otra opción que moverse rapidamente siguiéndolo y alertando a la serpiente de su presencia.

La serpiente era rápida y lo logró alcanzar rapidamente, Cody no pudo seguir la misma dirección del sujeto y en vez de eso se tuvo que meter en una grieta en la pared huyendo de la serpiente la cual su escape no la impidió de seguirlo violentamente.

Cody rapidamente logró recorrer la grieta adentrándose en ella mientras la serpiente lo seguía. El recorrido fue brusco y doloroso, la roca le causaba golpes y rasguños.

El tormentoso recorrido terminó al momento de que él saliera hacia una gran caída hacia la lava. Cody rapidamente se detuvo para no caerse y observó el feroz color brillante del magma caliente; rapidamente volteó hacia atrás y la serpiente lo seguía. Antes de que ella lo alcanzara, saltó hacia una roca en la pared la cual era plana y gorda. La serpiente al salir observó la lava y a él.

—Te gané

La serpiente observó hacia arriba, una roca plana estaba muy cerca de ella. Acto seguido se estiró hasta llegar a ella para proseguir a volver a intentar comerse a Cody.

—¡Déjame en paz!—exclamó

Ambos rapidamente empezaron a moverse, Cody saltaba sobre las rocas o las recorría rapidamente; la serpiente se deslizaba sobre ellas de la misma manera. De vez en cuando él recorría pequeños caminos de no más de 10 cm justo al borde de la pared de roca con la lava al fondo. La serpiente aprovechaba esos momentos para alcanzarlo rapidamente ya que era un terreno plano con pocos saltos.

Cody al notar que no era buena idea, empezó a moverse sobre las piedras saltando lejos de ella. En momentos desafortunados, la serpiente estaba tan cerca de él que ella podía atraparlo. Cody lograba esquibarse sus intentos por sus saltos y el buen momento que los hacía.

En su desesperación a gran escala, no se percató que se dirigía a una empinada de graba, la cual caía en la lava. Ambos saltaron a ella y rapidamente empezaron a no poder huir de la caída. Cody al ser más pequeño logró moverse lo suficientemente rápido y en diagonal hasta llegar a una roca la cual estaba justo en el borde de la caída de la graba. La serpiente no tuvo suerte ya que ella cayó al ardiente manto de rocas fundida acompañada con la grava que la empujaba. Cody solamente la pudo observar cómo caía a su muerte horrible.

—No tuviste que meterte con el poderoso Cody...

En su regreso a su misión, recorrió la cueva un rato intentando encontrar al sujeto; pero inevitablemente se dio cuenta de que iba a tomar mucho tiempo; con poca esperanza regresó a donde lo miró por última vez con la esperanza de que estuviera cerca.

Cuando ya estaba cerca, observó como Mailliw apareció acompañado por el sujeto. Mailliw estaba ansioso, exaltado.

—Preparen todo, quiero mi armadura hoy, si la noche cae y no la tengo, mucho de ustedes tendrán que jugar a la lotería para saber a quién mato

—Mata a Solarc y a su hijo

—Eso es obvio, pero como te dije, ustedes se le rifarán conmigo

Acto seguido se retiró del lugar. Cody rapidamente luego de se retirara, se acercó a donde estaba el sujeto de la llave. Él llegó a un rincón y se desplomó ahí mismo, se durmió en 2 segundos. Este era el momento idóneo para el hurto de la llave; Cody se le acercó y sin despertarlo y con una habilidad de cirujano, le quitó las llaves dejando la escena del robo. Antes de hacerlo, logró sujetar la llave a su cuerpo con una fina cuerda que había en el suelo; para así poder correr y moverse mucho más fácil y fluido, al igual de la libertad de poder usar sus extremidades sin problema al no estar cargándola.

En su regreso, cuando todo estaba ya hecho y su misión iba en buen camino, sufrió un percance lamentable provocando recuerdos prematuros de una casi misma situación sufrida no hace mucho.

Cuando se disponía a regresar, Cody estaba en una área grande sobre una estructura de madera parecida a un puente, la cual recorría de un extremo al otro rectamente sobre las rocas y grava. En el lugar, de una grieta en el techo de la cueva, donde la luz de las antorchas no alcanzaba, un mamífero volador emergió de su crepúsculo escondite con dirección directa a él. Cody, percibió una alteración en sus sentidos, alertándolo de un peligro más que inminente a su conservación. Al girar para apartar dudas, sus 2 diminutos y redondos ojos observaron nuevamente una especie que aunque no era su depredador natural, es un dominante peligro para su vida; un murciélago. Este en particular era carnívoro, cualidad nada favorable a la situación suya. Él logró reaccionar a tiempo y esquibarse el ataque de dicha criatura; inmediatamente salió corriendo del lugar, esta vez no sería como la serpiente, su contrincante era mucho más rápido y ágil. Hubo varios intentos de ser comido, pero él logró esquivárselos todos con una suerte de muy pocas probabilidades. El murciélago lo sobrevolaba y caía en picada hacia él intentándolo agarrar o morder. En su huida, llegó a una zona de la cueva donde era empinado y para bajar había una estructura de madera con escalones. Cody logró subir hasta el barandal y se deslizó hacia abajo con la intención de ganarle al murciélago. El murciélago aun con eso lo intento agarrar.

Antes de que Cody llegase hasta abajo, fue golpeado por el murciélago empujándolo fuera del barandal cayendo en la madera. Rapidamente se reincorporó y observó a su enemigo

—Diablos..., esto no es bueno...

El murciélago se colgó de una roca mirándolo, acto seguido se avanzó hacia él a gran velocidad. Cody no sabía qué hacer, seguir corriendo lo iba a cansar más de lo ya estaba y se iba a perder en la cueva si seguía huyendo sin conocerla completamente. Antes de que llegase, en pleno aire el murciélago fue abatido por una flecha el cual lo atravesó por completo hasta empujarlo y dejarlo incrustado en la pared de piedra. Cody rapidamente observó el origen de la flecha y miró a Mailliw, él le había disparado al animal.

—Malditos murciélagos, no pudieron ser amantes de frutas o insectos...; cuando tenga mi armadura explotaré esta maldita cueva, ya estoy harto de mordeduras...

Acto seguido él se retiró. Cody se alivió y siguió su camino, pero regresando por donde vino con la esperanza de que se recordara del camino hacia Akil.