C A P I T U L O 16

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—Dijiste que no lo harías.

No respondo nada, solo la veo, quiero volver a besarla.

—La estás asustando Leo —escucho la voz de León.

Ella intenta zafarse de mi pero no se lo permito.

—Borra la foto.

—No quiero.

—Leah.

—No te tengo miedo Leo.

—¿Qué foto? —dice León.

—Tiene una foto de los dos abrazados.

—¿Y? No es como si fuera a mostrársela a alguien.

—... no quiero que exista una foto de mi en esas condiciones.

—¿Homofóbico?

—No...

—¿Entonces?

—... No le muestres a nadie Leah.

—Como si tuviera a quien mostrarla.

LEÓN.

Después de comer y pasar un poco el rato con ellos regreso a mi apartamento. La imagen de Leo besando a Leah no sale de mi cabeza y lo sorprendente de que ni por ser besada de esa forma intensa haya causado alguna reacción, pensé que actuaría extraña con Leo, pero no, para ella fue como si nada hubiera pasado.

Los próximos días iba a su casa cada que tenía tiempo de sobra, tengo un par de razones: primero, me acostumbré a vivir con ellos y mi casa se siente demasiado grande y silenciosa desde que se fueron; segundo, quiero ver qué pasa entre ellos; tercero, quiero saber si es que hay algo de diversión y ver si puedo unírmelos.

—¿Qué sentido tuvo que saliéramos de tu casa si todo el tiempo estas aquí? —me dice Leo.

—Les estoy cobrando el favor, así como ustedes se quedaron en mi apartamento yo puedo quedarme aquí.

—... Claro.

—¿Dónde está Leah?

—Su mamá le llamó para que vaya a ver unas cosas.

—¿Por qué no la acompañaste?

—Como si su mamá ya no me odiara lo suficiente. Leah dijo que estaría bien.

—¿Estás algo? actúas extraño.

—¿Extraño? ¿Cómo?

—Actúas como si te hubiera hecho algo.

—Tus ideas locas de que Leah quiere algo con nosotros se me han metido en la cabeza y no puedo pensar en otra cosa.

—Lo noté el día que la besaste ¿Cómo se siente?

—Fue demasiado corto como para saberlo.

—Yo sigo.

—¿Para qué?

—Para besarla, no es justo que tengas toda la diversión para ti solo.

—No es un juguete, León.

—¿Cuándo dije que era un juguete?

—No olvides que tiene sentimientos.

—¿Sentimientos? ¿Leah?

—Sigue siendo humana.

—Tiene sentimientos, pero sabes que su lógica no es normal.

—Deberíamos preguntarle directamente, no podemos respondernos asumiendo lo que ella haría, es poco predecible.

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