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¿no te gustaría ver las estrellas esta noche?

-¿en donde mierdas estabas? ¿¿Y por qué hueles a los asquerosos chupasangre?? -me preguntó Paul molesto, y ¿ahora que?

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-¿en donde mierdas estabas? ¿¿Y por qué hueles a los asquerosos chupasangre?? -me preguntó Paul molesto, y ¿ahora que?

-¿por que te molestas tanto? Ya estoy aquí.

-¿¿por que te fuiste tantas horas?? ¿No nos podías mandar aunque sea un mensaje de texto de que no ibas a regresar? Nos preocupamos.

-bueno lo siento, no sabía que ahora eras mi madre. -él cerró los puños con enojo y salió de la casa, pero conmigo, porque me agarro del brazo. -¿me puedes soltar? -cuando nos alejamos lo suficiente me soltó el brazo. -¿¿qué te sucede??

-estaba preocupado por ti, hace unas semanas han habido muchos asesinatos y pensé que te había sucedido algo.

-sé protegerme sola, gracia por preocuparte, ya me voy. -me di media vuelta.

-aun no término. -yo lo observé nuevamente cansada.

-¿ahora qué?

-¿por que me tratas así? Antes me tratabas muy bien, ahora eres literalmente otra persona, ¿estás enojada conmigo?

-no es nada.

-por favor dime, ¿que te hice? -yo suspiré.

-hace tres años me prometiste que me enviarías cartas, y nunca lo hiciste.

-si lo hice, te mandaba cartas cada semana, respondiendo a tus cartas y cuando dejaste de escribirme yo seguí escribiéndote.

-mentira, a mi nunca me llego ni una sola carta tuya.

-te lo juro, le puedes preguntar hasta a los chicos, ellos saben porque me acompañaban al correo a enviartelas... incluso... -el saca una carta de su bolsillo todo arrugado. -esta carta te la iba dar hoy. La escribí hace unos días. -él me da la carta y yo la veo.

-¿es enserio? -yo lo miré. -escribiste mi dirección mal. -no puedo creerlo. -él se tocó la frente enojado.

-¿Osea que nunca te llegaron las cartas?

-no...

-¡mierda! ¡Soy un idiota!

-si que lo eres, pero esta bien... no importa, solo fue un error. -yo me acerqué y le di un beso en la mejilla y él me sonríe como un bobo enamorado. -¿vamos a dentro?

-¿no te gustaría ver las estrellas esta noche?

-esta bien... -luego nosotro entramos a la casa y seguimos hablando. Todo fue muy tranquilo, yo estaba desesperada para que llegara la noche para ver las estrellas con Paul.

Cuando era lo suficientemente de noche, salí de la casa y vi a Paul sentado en el pasto, yo nerviosa me senté al lado de él.

-nunca pensé que habría tantas estrellas. es hermoso Paul. -dije mirándolo.

-te he extrañado mucho Samantha, los días son aburridos sin ti... y ahora qué estás aquí, creo que serán los mejores días de mi vida.  -yo le agarre la mano y le sonreí. -sa...sabes...que...si...siempre me has.. agradado.... Co...como una amiga. -dijo nervioso, nunca lo había visto nervioso y me parece gracioso.

-¿me quiere solo como una amiga? eso me pone un poco triste. -hice un puchero y miré denuevo al cielo.

-osea, si tú quieres, si quieres que seamos más que amigos sólo dímelo... yo soy lo que tú quieras.

-solo cállate. -dije y le robe un beso, creo que fue el mejor beso que he dado en toda mi vida. Fue lento y suave, me sentía como en las nubes, mi corazón no dejaba de latir y otra cosa comenzó a palpitar...

Des[amor] Paul LahoteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora