Ecos de Amor

Cap 21. Se va.

No sabía que odiaba más si el sonido del despertador o el de Alba llorando, apenas y había dormido unas pocas horas y no era porque su hija hubiera pasado mala noche o tener mucha energía, al contrario, estaba muy cansada, pero fue muy difícil conciliar el sueño por más que daba vueltas en la cama. Pero el día siempre llega sin detenerse por nadie y aquí estaba Tn, con ojeras, cansancio y cero ganas de iniciar este día. 
Le da un biberón a Alba mientras la cambia de ropa y baja decidida preparándose mentalmente para lo que pueda venir hoy en la consulta médica de Nana.

-Disculpe Señora Tn -Tere la llama y se gira un poco mientras carga a Alba con un brazo y en otro la pañalera gigante - ¿hoy si preparo la comida o solo dejo listas las cosas de la bebe?
-Oh claro, comeré fuera, así que solo las cosas de la bebe por favor, y gracias Tere, ten buen día.

Fue un viaje tranquilo, puso un poco de música y hasta la bebe se estaba divirtiendo, por momentos como este que le recuerdan un poco de su normalidad de hace unos meses pero agregando solo a su hija le hacían creer que todo podría estar bien. Llegaron a casa de Nana y con un poco de ayuda subió a la camioneta y fueron a consulta.

-¿Cómo está este angelito el día de hoy?
-Pues increíblemente como un angelito. No ha llorado ni una sola vez en toda la mañana, creo que ella también ama visitarte como yo. -Sigue las indicaciones del GPS.
-Mis niñas… por cierto traje emparedados, te ves muy delgada, tienes que comer.
-Ay nana, muchas gracias pero estoy bien, solo aun no te acostumbras a verme sin la barriga de embarazada.
-No hagas enojar a tu nana y cometelo. -Le extiende un emparedado y de mala gana Tn lo toma y le da una mordida. -Mucho mejor, aun recuerdo cuando estabas en secundaria, también era un problema hacerte comer.
-Y mírame aquí, no pasó nada.Estoy perfectamente, hasta criando una bebe.

cuando llegaron al doctor fue un poco un problema, no pensaron en que Tn oslo tenía dos manos y entre la nana, la pañalera y la bebe se volvería loca, así que le pidio ayuda a un enfermero y le ayudo llevandole una silla de ruedas y empujandola hasta el consultorio.

-Pero miren quien viene por ahi, Señora Mery, que gusto verla. -El doctor les daba la bienvenida al consultorio. El doctor era una persona mayor pero tenía esa aura de alguien que ha tratado pacientes por años y ya es natural. su bata blanca era parte de él. -Y viene muy bien acompañada. 
-Claro, vengo de gala, esta bebe es como mi nieta. -Una sonrisa triste se dibuja en los labios de Tn mientras toman asiento.
-¿Cómo te has sentido Mery? Cuéntame, lo malo de que las personas vengan a visitarme es porque no se encuentran bien y nunca porque les da gusto verme.
-Pues hay días buenos y días malos, hoy es uno bueno, no tengo dolor. Pero comienzo a tenerlos más seguido y duran más, además son muy fuertes.
-Ya veo, ¿y qué tal tu apetito?
-Pues no tengo, pero se que debo de comer y lo hago.
-Ojala todos fueran como tú mery. 
-Digalo más fuerte, hay alguien aquí que necesita escucharlo.
-YA veo… creo que ya escuchó. ¿Y ha habido algún otro malestar? Náuseas? mareos? problemas digestivos? 
-Bueno, cansancio, pero lo adjudico a los años.
-¿Tienes problemas para dormir?
-Solo por el dolor. 
-Muy bien, Jake te llevará a que te saquen un poco de sangre, ya sabes, los análisis de estos últimos meses, rutina. Jake, ¿Puedes venir por la señora Mery? por favor. -Presiona un botón en su teléfono fijo para llamar a otro enfermero a que lleve a Nana a la habitación de análisis. -Mientras examinare a esta chica, mirala, se ve delgada.
-Es lo que le dije, hoy hice que se comiera un emparedado pero no entiende razones, y mira que la conozco de toda la vida.

La realidad es que el doctor quería hablar a solas con Tn, Nana no tenía estudios programados para el día de hoy.

-doctor, no le haga caso, estoy bien, solo es cansancio, tengo una bebe de 6 meses que cuidar sola y es una locura.
-Me imagino, pero realmente quiero hablar sobre su…
-Nana, es mi nana.
-Sobre su nana.
-¿Qué pasa? -Su semblante cambia al instante, su estado pasa al de alerta y comienza a sentir los latidos de su corazón en sus oídos.
-Bueno, como sabes el estado de tu Nana es crítico, ya no podemos ofrecerle un tratamiento, simplemente una vida lo más digna posible hasta que el momento llegue -Cada palabra que escuchaba eran como cuchillos en su alma, esperaba lo peor, un escalofrío que nacía de su estómago no la dejaba respirar propiamente. -El cáncer que tiene es muy agresivo y desgraciadamente cuando comienza a atacar de esta manera a los órganos principales ya no hay mucho que hacer. Por más medicamento que le de el dolor no va a cesar, solo se pondra peor, llegará un momento en el que tendrán que decidir que la hacen sufrir o le dan el medicamento más fuerte que existe para el dolor pero eso afecta sus musculos y puede que eso le provoque un paro cardiorrespiratorio. Y ese día ya no está lejos.