Cap 38. Tina.

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El día en New York pintaban bien, aún era verano y el clima era agradable, Tn debía de ir a la reunión con los productores, cuando se desperto se encontro sola en la cama, la verdad es que no entendía qué había pasado, después de unos minutos se había quedado profundamente dormida, como si los problemas de sueño no la hubieran atacado momentos atrás. Durmió tan bien que no noto la ausencia de su esposa. Se levantó y vio que era hora de darle de desayunar a Alba, pero al entrar a su habitación no la encontró así que bajó las escaleras al escuchar ruido, las encontró en la cocina dándole de comer a Alba.

-Veo que la ciudad las hace pájaros madrugadores… -Entra y se dirige al refrigerador.
-Si bueno… el cambio de horario. Te deje un matcha en esa taza. Por si quieres. Y el desayuno está en esos platos. - 
Tn toma la taza de la barra y mira dos platos servidos. Hailee se había despertado, hizo el desayuno y se encargó de Alba. A veces se siente bien que alguien se encargue de todo por un segundo. Toma los platos de comida y los mete al horno los dos. cuando los calienta deja uno en frente de Hailee y otro en su lugar.
-Oh, gracias. Comenzaba a tener hambre. -Dijo mientras le regala una sonrisa a su esposa y continúa alimentando a Alba. Ambas seguían aún en pijama. -Oh casi lo olvido. Mi amor, muéstrale a mami la nueva palabra que aprendimos. Di Morning.
Alba concentrada en su plátano cortado no presta mucha atención. -Alba, mi amor. Dile ¡Mooorning! a mami. Morning.
-Moooniin - La niña dice entre risas y jugueteos.
-Creo que es su forma de desearte buena suerte en tu reunión de hoy -Tn solo sonrió, estaba enternecida por todo esto, era muy temprano por la mañana como para pensar, no tenía ni ganas ni cabeza para poner barreras, solo disfruto este regalo que le estaba dando su esposa y desayuno con su familia.
-Bueno, estuvo muy rico el desayuno pero no quiero llegar tarde. Te quedaras todo el día aquí verdad. Para cuidar a Alba. -Dice Tn mientras se levanta de la mesa y toma su plato y su taza sucios.
-Si, tendremos una tarde de calidad explorando la casa. Verdad mi amor, la pasaremos bien hoy. -Esto último se lo dice a la bebe que esta de muy buen humor esta mañana.
-Genial, déjenme un poco de diversión para cuando regrese, que no sé a qué hora será eso. -toma también los platos de Hailee y de Alba y los pone en el fregadero.
-Trato hecho. -Tn vuelve a la mesa y se despide de Alba dandole sonoros besos a su hija.
-Portate bien con mamá, te veo al rato, TE AMO. -Cuando se separa de la niña pasa por detrás de la silla de Hailee, está solo agacha la cabeza y suspira, sabe que no habrá nada para ella pero le gustaría. 
-Que tengas un lindo día y que todo vaya mejor de lo que esperas de esto. -sonríe para sí misma. -Ni siquiera quiere voltear a verla, le da pena ser rechazada por su esposa, lo que no sabes es que Tn lleva todo este rato detrás de ella debatiéndose entre irse sin más o seguir sus instintos. 
-Algo me dice que si eso pasa será todo gracias a ti. -Tn apaga su cerebro, solo puede pensar en una cosa, en NYC no se piensa. Se inclina hacia Hailee que está de espaldas a ella, la abraza por la cintura y le deja un beso en el cabello. -Gracias por todo, estaba rico el desayuno. -Y se va, la deja así, congelada con una sonrisa en el rostro. A partir de hoy hará el desayuno todos los días.

Tn subió a preparase para su reunión, según Hailee un auto estaría esperándola a la hora necesaria para llegar a tiempo mientras sus autos estaban en la ciudad. Cuando estuvo lista se miró al espejo y le gustaba lo que veían, hace mucho no se preparaba para una reunión importante de trabajo, además en NYC todo es más elegante. Todo es más grande, hay más de todo. Es más imponente. Le gustaba sentirse así de nuevo, volver al trabajo después de todo era bueno. en el fondo sabía que también esto debía de agradecérselo a Hailee. Así que le sonrío al espejo y bajo lista para lo que viniera. Lo que no sabía que venía era algo tan tierno. 

Al bajar las escaleras pudo ver a Alba comiéndose la cara de Hailee, esta moría de risa y esto solo motivaba a que Alba hiciera más de lo mismo. Se detuvo unos segundos en el pie de las escaleras para contemplar la escena hasta que fue descubierta.

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