POV. ALBA
- Perdón eh, es que necesitaba darme una ducha después de sudar tanto esta tarde.- Dijo Natalia saliendo del baño con un pantalón de chándal y en sujetador.
¿Pero y esos abdominales?
Ahí puedo fregar ropa perfectamente.
Y rallar caso.
Alba no mires tanto coño, que se va a dar cuenta de que te ponen su abdominales.
- Ya... Ha quedado la cicatriz, es horrible.- Dijo Natalia tapándosela con la mano y mirando al suelo.
¿Cómo le digo que no estaba mirando su cicatriz?
- A mi me gusta, es un símbolo de guerra.- Dije sonriendo y acercándome para tocarla.
Pasé mis dedos por encima y los aparté enseguida porque me quemaban.
- Lo siento.-
- No pasa nada, voy a ponerme una sudadera.- Dijo Natalia yéndose a su habitación.
Madre mía Alba.
¿Estás tonta o que?
- ¿Cenamos?- Preguntó cuando volvió.
- Claro, ya estarán frías las pizzas.-
- ¿Quieres que las caliente?-
- A mi me gustan frías también, así que por mi no hace falta.-
- Vale, pues no.- Dijo Natalia sonriendo.
- Madre mía la que ha liado Marina con esto.-
- Nos siguen shippeando.-
- Ya ves.-
- Oye y tú a las fans les dijiste que podía que te gustara alguien, y la que se lio por Twitter, hay cada conspiración.-
- Es que mis fans son intensas pero majas, como tú.-
- Touché.-
- Pero sí, se lio un poquito. Me han shippeado con media España ya.-
- ¿Y a mi no me vas a decir quien te gusta?-
Piensa Alba, piensa.
- El niño que hizo de Peter Pan, es guapísimo.-
- Buah ya ves, era mi crush.-
- Es que como para no.-
- ¿Quieres ver una película?-
- Venga, dale.-
- Voy a poner una de miedo, lo siento.- Dijo Natalia riendo.
- La madre que te parió.-
Acabamos rápido de cenar y nos tumbamos en el sofá para ver la película.
- Es chulo el sofá.-
- Gracias, lo elegí con Icíar.-
Empezó la película y yo ya me estaba cagando en todo.
- ALBA.- Gritó Natalia haciéndome saltar del susto.
- Gilipollas.-
- Tu cara.- Dijo Natalia descojonándose.
Le tiré un cojín pero siguió riendo.
Me encantaba su risa.
- Anda, ven si quieres, que así compartimos manta y no pasas ni frío ni miedo.-
- Yo no tengo miedo, pero si frío.- Dije yendo hasta ella y sentándome a su lado.
Natalia me pasó la manta por encima y yo apoyé mi cabeza en su hombro.