POV. ALBA
- ¿Cómo ha ido?- Me preguntó Alex cuando entré.
- Agotador pero feliz.- Dije sonriendo.
- Oye Alba, que estás chicas nos han dicho que tu les has dicho que me dijeran que se quedaran conmigo.- Me dijo Marina.
- Eh... Sí, ella sí, es Natalia.-
- Yo soy su hermana pequeña, Elena.- Se presentó la otra chica.
- Ah, pues encantada por segunda vez.- Dije riéndome.
- Oye Alba, ven.- Me llamó mi hermana.
-Dime.-
- ¿Le has dicho que se quedara porque toca el bajo?- Me preguntó para que nadie le oyera.
- Sí, he pensado en hacerle una prueba a ver que tal. Pero más o menos parece de nuestra edad, es chica y bajista, puede funcionar. Y se le ve maja, algo tímida pero maja.-
- Sí, es muy maja, hemos estado hablando con ellas, su hermana es más social.-
- Ya se ve.-
- Pues menos mal que he reaccionado a tiempo porque sino se nos iba eh.-
- Esperaba que la telepatía de hermanas funcionará.-
- Oye chicas, no es por nada pero Natalia tiene una cara de no entender nada que flipas.- Nos vino a decir Álex.
- Natalia.- La llamé.
- Madre mía tienes cara de estar más confundida que ocho confundidas.- Le dijo Marina riéndose.
- Ocho son pocas.- Bromeó Natalia con nerviosismo.
- A ver.- Dije sentándome a su lado en el sofá, entre ella y Diddy.
- Ellas supongo que ya las conoces son Diddy y Saray, guitarrista y batería para la gira. El caso es que nos falta una bajista, y al verte con el bajo, de más o menos nuestra edad y chica, pues he pensado en ti. Entonces si tu quieres me gustaría hacerte una prueba a ver que tal se te da, y si se da el caso y tu quieres pues empezar a formar parte de nuestra banda.- Le expliqué.
- SÍ.- Gritó su hermana.
- Esto... Sí... Claro, me encantaría hacer esa prueba, aunque no sé si la superaría.-
- Pero si eres la mejor bajista del mundo.- Le dijo su hermana.
- Elena tu te callas.- Le recriminó Natalia.
- Mira, hacemos una cosa. Quedamos mañana por la tarde en nuestro estudio, te dejo mi número de móvil y te paso la ubicación. Sí al final decides que no quieres hacer la prueba me mandas un mensaje y no pasa nada, y sino pues eso, quedamos mañana.-
- Vale...-
- Espera, dame tú móvil que apunto mi número y así luego me mandas un mensaje para tener yo el tuyo.-
- Sí, toma.-
- Estoy confiando en ti, una fan, así que espero que no filtres mi teléfono personal.- Le dije de broma.
- No voy a hacer eso, palabrita del niño Jesús.- Dijo Natalia.
- Ya tienes mi número, luego con la calma me dices, que creo que te he tomado mucho de sopetón.- Dije riéndome al ver su cara.
- Necesito asimilar.- Dijo sonriendo.
- Que mona.- Dijo Marina.
- Esto... Gracias de verdad.- Dijo Natalia levantándose.