Entre dagas 🗡y rosas 🌹

Capítulo IV - ¿Es amor?

-Mi amor, esta vez he fallado pero sé que los poderes de la destrucción y la creación están activos, haré todo lo que esté en mis manos por conseguirlos y crearé un mundo en el que tú y yo podamos recuperar la felicidad que la vida nos arrebató- dijo el Rey Gabriel frente a la urna de cristal en la cual yacía Emilie en un sueño mágico.

-Gabriel- escuchó una voz que lo llamaba.
-Nathalie, se lo que vas a decirme, y no tengo opción , es la única manera de conseguir los Miraculous-respondió.

-Solo quiero decirte que no seas tan duro con Adrien- dijo la mujer

-No soy duro con él, lo hago para protegerlo, todo esto lo hago por -respondió enojado.

Nathalie sacudió la cabeza y se acercó al rey tomándolo de las manos con dulzura  -Habla con él, haz lo correcto- añadió.

Gabriel la soltó y se dirigió hacia la habitación de Adrien, llamó a la puerta, la cual estaba cerrada con seguro pero nadie respondió, así que le pidió a los guardias abrirla, cuando entró no había nadie.

-Busquen a Adrien en los alrededores del palacio y en el pueblo, rápido y encuéntrenlo cuanto antes- dio la orden a los caballeros de la guardia quienes se marcharon en busca del príncipe.

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-Entonces ¿Cómo te llamas?- insistió la azabache.
-Yo... yo... soy Emile, si, así me llamo- recordó que eso le había contestado al chico que conoció más temprano, pero esta vez se sentía pésimo por mentir.

-No te había visto por aquí nunca ¿eres de fuera verdad?- preguntó curiosa.
-Si, amm , vengo de un pueblo vecino- mintió nervioso.

La azabache lo miró de pies a cabeza, su cabello se veía tan suave y resplandeciente y lo más impresionante eran sus hermosos ojos verdes.

-De verdad muchas gracias por salvarme, llegaste en el momento indicado, si no , no sé qué hubiera pasado conmigo - dijo

-Me alegra que estés bien- respondió  el rubio.

Marinette se sonrojó y le dedicó una traviesa sonrisa.

-¿Y tú eres de aquí?- preguntó el joven príncipe.
-Sí, mis padres tienen una panadería, y yo les ayudo en eso- respondió la azabache.

Mientras platicaban ambos caminaban por las calles solitarias, Marinette tropezó pero Adrien la sostuvo evitando que cayera.

-Gracias- dijo la azabache perdiéndose en los ojos esmeralda del chico.

Adrien sonrió y miró las manos de la azabache, las cuales tenían algunas cortadas.
-¿Qué te sucedió? ¿Alguien te lastimó?- preguntó
-No, no, es que a veces hago algunos trabajos de sastrería y ayudo a arreglar algunas prendas- respondió nerviosa.
-Que increíble, ¿tu hiciste el vestido que llevas?- preguntó curioso el rubio.

La azabache asintió nerviosa y sintiendo cómo el calor subía por sus mejillas.

-Wow, mi... el rey, estaría muy impresionado de tu talento- dijo

El rostro de la azabache cambió con la mención.

-¿El rey? ¿Para que quisiera yo impresionar al rey, es un hombre cruel y malvado, ojalá que pronto lo destronen no merece la admiración de nadie- respondió resentida.

-¿Tan malvado es?- preguntó con tristeza.

-Mira a tu alrededor, nos tiene sumidos en la miseria- respondió.

-Ya veo, nunca me imaginé que vivieran así, me habían contado algo completamente distinto- añadió el rubio, Marinette lo miró extrañada, de pronto a lo lejos vio pasar a la guardia del rey.

-Mira, hablando del rey, sus guardias andan por aquí- dijo la azabache

-¿La guardia real?, ven vamos a escondernos- respondió el rubio alarmado al ver que se acercaban, tomó la mano de la azabache y juntos corrieron entre los callejones.

-¿Por qué huyes de la guardia real? ¿Eres un fugitivo o un ladrón?- preguntó Marinette.

-No, no, bueno es que yo... ahh no sé cómo explicarlo pero no deben encontrarme aquí- respondió.

-Si no me quieres contar, no lo hagas, pero te debo un favor, así que ven conmigo- dijo la azabache apretando su mano para llevarlo por un camino conocido, tomaron un atajo y pronto habían perdido a la guardia.

De pronto empezó a llover fuertemente.

Los chicos caminaron hasta la puerta de la panadería.

-Seguro, entre mis creaciones, tengo algo de ropa que puedo prestarte y puedes esperar en mi casa hasta que la lluvia se detenga si quieres- lo invitó la azabache con una mueca de sonrojo.

-Estoy bien así, debo irme, pero me dio gusto conocerte, ¿sabes?, no tengo muchos amigos, y no soy muy bueno socializando pero algo me dice que puedo confiar en ti- dijo el rubio.

Marinette le dedicó una tierna sonrisa -Podemos ser amigos pero ¿Te volveré a ver algún día?- preguntó
Adrien llevó sus manos a su cuello y se quitó una medallita de plata que portaba.
-Toma, es una promesa de volver a encontrarnos- dijo entregándosela a la azabache.

Marinette sintió que sus mejillas explotarían, ¿Qué le pasaba?, jamás había sentido algo igual.

-Es una promesa ¡Ve con cuidado!- dijo antes de que el rubio saliera corriendo.

Adrien se despidió y corrió entre la gente.
-Mira nada más, creo que has conquistado un corazón muchacho- dijo Plagg
-¿Qué dices?, Marinette me ofreció su amistad, nada más- respondió -Tengo una amiga- añadió y se sonrojó.

De pronto sintió como una mano pesada lo tomaba por el hombro.
-Hasta que lo encontramos príncipe, su padre está muy enojado- dijo el guardia jalándolo y encaminándolo hacia un carruaje.

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Marinette entró a casa y saludó a sus padres quienes concentrados trabajan sacando una docena de panes del horno.
-Marinette estás empapada, cámbiate o te enfermarás- dijo Sabine.
-Si madre- respondió la azabache mientras se dirigió a su cuarto.

-Tikki Tikki, hoy ha sido un día muy loco- dijo -Primero te encuentro a ti y ahora soy toda una guerrera, después conocí a un chico ladronzuelo bromista  cuya identidad desconozco y al final un chico lindo me salvó, ¿viste sus ojos?, eran preciosos, pero lo más importante, tiene una personalidad hermosa y un corazón de oro- añadió.

-Mmm, creo que estás enamorada- respondió la Kwami.
-No lo sé, pero espero volver a verlo- dijo.

-Marinette te buscan- escuchó a su madre llamarla.

Rápidamente la azabache se cambió la ropa y bajó, la esperaba Alya en la entrada.

-¿Qué pasa?- preguntó extrañada.
-La resistencia convoca a una reunión urgente Marinette- dijo después de saludarla.

-¿Reunión urgente?
-Si, después de lo qué pasó hoy, tenemos que hablar, además me adelantó Nino que ya sabe la fecha del baile en el palacio, nos la dirá para que te prepares para tu encuentro con el príncipe - respondió su amiga haciendo un ademán de pasar un cuchillo por su cuello.

Marinette suspiró molesta  -Alya, sabes que yo no estoy completamente de acuerdo con eso, presiento que algo va a salir mal.

-Tranquila, por eso vamos a planearlo, vámonos qué hay mucho de que hablar- respondió  y ambas se marcharon para reunirse con los demás miembros de la resistencia.

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Amigooos , gracias por leer, ya tengo avanzados varios capítulos de la historia (aún requieren algunas correcciones) pero les adelanto que se acerca el drama, y muchos muchos momentos de amor 🌹😍

No olviden dejar sus comentarios y su estrellita, me motiva mucho leerles :)

Gracias por seguir en esta aventura ❣️