𝔇𝔦𝔢 𝔉𝔬𝔯 𝔜𝔬𝔲 |𝒮𝒶𝓁𝓁𝓎 ℱ𝒶𝒸ℯ 𝒴 𝒯𝓊|

Capítulo siete

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𝙴𝚜𝚌𝚊𝚕𝚘𝚏𝚛𝚒́𝚘𝚜
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(Evelyn)

Era un domingo por la mañana común con mi mamá como siempre, ya que hoy tocaba ir a la iglesia y mientras ella se estaba arreglando, yo veía por la ventana distraída. Era muy aburrido ir todos los domingos para orar a un ser que posiblemente no exista, y si así fuera ¿Donde estaba Dios cuando uno lo necesite? Era la misma pregunta que me hacía siempre.

Al llegar, el padre de Travis nos recibió como siempre, hacia el nombre de Dios y bendiciones que eran comunes para ellos... Normalmente él trata de acercarme mas hacia sus costumbres pero me retracto, aun así insiste. ¿Que es lo más raro de ello? Soy la única de aquí que asiste a este "culto" raro...

Eventualmente diría yo que soy la unica tonta que esta aquí mientras observo que cada persona que va llegando, me miran de una forma extraña, como si fuera un fenómeno o algo así.

Pasó una hora exactamente cuando todos estaban despidiéndose del padre de Travis mientras mi mamá hablaba con una señora mayor. Al rededor notaba las extrañas pinturas y una algo particular. No estaba Dios como supone que estaria. Ninguna cruz, algún símbolo religioso o algo parecido... ¿Alguna vez han ido a una iglesia que no tuviera a Cristo como lo representan muchos?

Es algo... Sospechoso.

——Quedate aquí. Iré a despedirme del Pastor.

Yo simplemente asentí y ella se fue. Por unos momentos me empezó a dar escalofríos de repente. Era la misma sensación de que algo o alguien me observaba. Miré a todos lados extrañada y de la nada un bajón de mi presión se presenció cuando vi aquella sombra se postraba detrás del Pastor. Esos ojos rojos estaban dando hacia los ojos de él, todos los presentes tenian esos ojos rojos los cuales sentía sus miradas y susurros se presenciaban en mi cabeza.

"¡Debes huir!"

"¡Corre mientras puedas!"

"¡Huye!"

Yo solo me tomaba de la cabeza mientras me gritaban aquellas voces, el humo negro se acercaba a mi y una voz mas me gritó fuerte.

"¡Huye con el niño de la abominación!"

Y luego todo se detuvo. De la nada escuché que me llamaban de fuera. Miré hacía la puerta y a lo lejos estaba Sally, montado en una bicicleta color roja. Me saludaba de lejos agitando su mano, al parecer estaba sonriendo por como sus ojos se entrecerraban.

Yo sonreí ante ello y miré que mi madre siguiera ocupada, apovechando en ir hacía él rápidamente. Pero de la nada Travis me detuvo viéndome molesto. Sujetaba mi brazo mirando de lejos a Sally. En algún punto Sally miró ello y estuvo apunto de acercarse.

-----¿Que haces?

-----Te estoy protegiendo. ¿A donde piensas que vas?

——Por favor Travis. Es mi amigo, y ni tu ni nadie va a impedirlo. dije mientras me liberaba de su agarre.

-----Si mi papá te ve con él, se molestará.

-----Prefiero arriesgarme. ¡Yo no soy como todos ustedes! Y no quiero que sea así para controlar mi vida.

-----¡Tu no lo entiendes!

-----No. Y no quiero hacerlo...

Dije para después caminar hacía aquel chico de coletas. Se notaba que estaba algo molesto por Travis pero al acercarme cambio su humor conmigo.

-----¿Que haces aquí?

-----Yo... Quería preguntarte algo, si no estas muy ocupada...

-----¿Si?

Se notaba algo nervioso al qierer hablar y muy tierno a la vez. Era muy tímido cuando se trataba de cosas serias. Adoraba su lado amable.

-----Quería saber si... ¿Quisieras cenar a mi casa esta noche? Mi papá quiere conocerte y le agradaría que fueras. Habrá espagueti con albondigas.

Por un momento lo pensé, ya que al saber que mi mamá no quería que conviviera con él. Pensé que podría inventarle algo para que pudiera ir. Jamás le había mentido en algo, pero esta vez ya era el colmo, y al no tener control en mi vida, sería la primera vez en revelarme.

-----Si claro. ¿A que hora?

Sally pareció emocionarse por mi aprobación. Me dijo que seria a las 6:00pm y que agradecia que lo aceptar. Ambos nos despedimos con un abrazo y él se fue de ahí en su bicicleta. Entré de nuevo y miré que Travis estaba ahí esperandome, parecia ser que escuchó nuestra conversación y no le gustó para nada eso.

-----¿Y que harás ahora?

-----Necesito que me cubras esta vez. Por favor.

-----Ni loco... Esta vez no lo haré. No si se trata de ese fenómeno.

-----¡Deja de llamarlo así! No permitiré que le faltes al respeto a Sally.

-----¡Yo lo llamaré como quiera a esa abominación!

Callé un momento mirandolo algo molesta. Era raro que actuara de ese modo con él, pero... ¿Lo llamó abominación? ¿Por que me sentía tan aliviada al oír eso?

-----Esta bien... No me ayudes. Pero recuerda que yo te he ayudado en varias ocaciones cuando tu padre te golpeaba y me metía para defenderte... ¿Por que todo el mundo es tan cruel conmigo y tu lo permites? -dije algo triste. Admito que me sentí de la mierda con ello, pero no debía mostrarlo en frente de las personas que no valen. Ignore todo esto y caminé hacia el auto para subir.

Al parecer todos son raros conmigo. Y ni siquiera se por que...