Trenzas

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Espero que les guste~

Nota: Por alguna razón, uno de los Headcanon que yo tengo es que a MK le gusta hacer trenzas

Nota-2: Macaque y Wukong son mujeres

MK estaba en medio de una muy ligera crisis sobre un tema tan tonto que estaba seguro que cualquiera se burlaría de él si lo escuchaba.

Desde que era pequeño y había aprendido gracias a una amable señora de largo cabello que se convirtió en cliente frecuente en la tienda de Pigsy, adoraba hacer trenzas. Puede recordar que le costaron mucho al principio, haciendo pucheros al sentir que sus dedos eran demasiado cortos para manejar mechones de cabello pero siempre recibiendo una sonrisa divertida de parte de aquella señora, quien lo alentaba a volver a probar.

Mei se ofreció como sujeto de prueba sin mucho problema, dispuesta a dejar que él probara cualquier peinado que se le viniera a la mente con su largo y lacio cabello oscuro, siempre cuidado gracias a su madre y a todos los productos que ella la obligaba a usar. No importaba que peinado le hiciera en la ocasión, ella siempre los lucia con orgullo y con una gran sonrisa, sacando todas las fotos posibles para compartirlas.

Cuando le pidió que  le cortara el cabello, le dolió pero acepto, triste mientras veía los largos mechones oscuros caer al suelo, aunque contento al verla sonreír alegremente ante su nuevo corte.

A partir de allí, ya no tuvo la oportunidad de hacer peinados, aunque seguía haciendo trenzas en pulseras que se iban acumulando en uno de sus cajones.

Entonces las conoció y aunque lo había notado desde un principio, había cosas más importantes en que concentrarse. Locuras, aventuras, ataques y algo de trauma al que agregar a la lista. Había sido mucho en poco tiempo pero después de todo, cuando la relativa paz se hizo presente, lo recordó.

Y el problema era que ahora tenía dos cabelleras largas que ansiaba trenza con todas sus fuerzas.

Estaba el cabello largo y oscuro de Macaque, que se notaba que siempre lo estaba cuidando y que tenía un suave olor a flores, empezando lacio y con ondulaciones que se volvían más pronunciadas a medida que bajaba, las puntas terminando en una ligera curva hacia arriba.

Luego estaba el largo y claro cabello de Wukong, siempre atado en una coleta alta y de aspecto esponjoso, las ondas más pronunciadas y con un fuerte aroma a durazno.

Tenía tantas ganas de hacer algo bonito en sus cabellos, poder ver algo de ese orgullo que siempre había visto en la expresión de su mejor amiga en el mundo a la hora de lucirlos

-Podrías preguntar, ¿sabes?- Mei enarco una ceja, muy divertida con la situación si tenía que ser sincera pero sin estar dispuesta a burlarse por el momento, lo haría más tarde. -Lo máximo que te pueden decirte es "No"-

-¡No puedo!- se sentó de piernas cruzadas en su cama, retorciendo sus dedos sobre la almohada que puso en su regazo. -¿Qué pasa si es un tabú entre demonios preguntar? ¿O si los ofendo de alguna manera? Peor aún...¿Y si solo aceptan para darme el gusto pero se sienten super incómodas?- se horroriza ante todas esas posibilidades.

-MK...- a ella siempre lo sorprendía lo lejos que podía llegar la imaginación ajena. Lo escucho divagar sobre cómo todo podía salir mal y demás, sentándose en la silla más cercana porque sabía que iba a estar allí un tiempo. Suspiro, divertida.

~Monkie Kid~ 4️⃣Donde viven las historias. Descúbrelo ahora